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Arquitectura civil de Jaén

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La ciudad de Jaén tiene una riqueza monumental de gran valor arquitectónico y turístico en la que destacan, en el ámbito civil, los siguientes monumentos:

Castillos

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Castillo de Otíñar, a 13 kilómetros al sur del casco urbano.
Castillo de Santa Catalina.

Castillo de Jaén

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Imponente conjunto militar que "vuela" sobre la ciudad, integrado por tres recintos (Castillo de Santa Catalina, Alcázar Viejo y Abrehuí). Las vistas desde la zona de la Cruz son de mucho postín. Los orígenes se remontan a Aníbal, que posiblemente construyó las primeras torres y posteriormente fue fortificado y reforzado a lo largo de los siglos. El Alcázar Viejo que albergaba el palacio del rey árabe fue mandado a edificar por Alhamar. La Torre del Homenaje, de cuarenta metros de altura, fue construida por Fernando III, el Santo.

Castillo de Otiñar

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Situado dentro del mismo municipio y a escasos minutos de la capital, merece igual mención el conjunto arqueológico de Otíñar en pleno Parque Periurbano Monte La Sierra, en el que destacan una veintena de abrigos con pinturas rupestres, un dolmen y muralla de la Edad del Bronce, una fortaleza medieval (Castillo de Otiñar) y una aldea del siglo XIX hoy abandonada, la de Santa Cristina.

Baños árabes

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Los Baños Árabes de Jaén son los mayores que se conservan en Europa, construidos en el período de Abd-Al-Rahman II, están bajo el Palacio de Villardompardo.

Palacios

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Palacio de Villardompardo.

Palacio de Villardompardo

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El Palacio de Villardompardo es un edificio construido a finales del siglo XVI por el Virrey de Perú don Fernando de Torres, obtuvo la consideración de monumento histórico–artístico en 1931, alberga en la actualidad el Museo de Artes y Costumbres Populares y el Museo de Arte Naïf.

Otros

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Artesonado del Salón Mudéjar del Palacio del Condestable Iranzo.
  • Palacio Provincial: Sede de la Diputación Provincial de Jaén. Fue residencia de Fernando III el Santo, cuando se conquistó la ciudad. Pedro I entregó el convento a los Franciscanos en 1.354 y estos a su vez a los Observantes en 1.524. Se construyó sobre la base de un proyecto, redactado en 1.871, por el arquitecto Jorge Porrúa, premiado en la Exposición Provincial de 1.878. Es un edificio de planta tradicional al estilo del palacio italiano renacentista. Espacio abierto a un gran patio interior, dos plantas y sótanos, bien distribuidos, con un hemiciclo al norte, que, al exterior, tiene forma de ábside. La fachada principal, a la plaza de San Francisco, con una portada en el centro resaltada con un triple vano de arcos de medio punto. Ventanas, con balcón corrido en el segundo piso, y un remate de frontón con un reloj y el escudo de la provincia.

Fuentes

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Fuente de los Caños.
Fuente Nueva del Conde de Torralba.

La ciudad de Jaén cuenta con un gran número de fuentes históricas que embellecen sus calles. Entre otras, actualmente se cuentan las siguientes: Infraestructuras en origen romanas como Los Baños Árabes, El Balneario de Jabalcuz, el Raudal de La Magdalena, Fuente de Los Caños, Fuente del Arrabalejo, Fuente de la Merced, Fuente de la Alameda, La Fuente del Pato, Las fuentes de la Plaza de San Bartolomé, y las recientes fuente de La Glorieta de Blas Infante, Fuente de la Carretera de Granada o las fuentes y manantiales (artificiales) del gran parque del Bulevar donde el agua y sus fuentes juegan un papel simbólico muy importante para una ciudad cuyo origen y devenir va ligado al agua.

La relación entre la ciudad y el agua es muy importante, puesto que la ciudad se origina en torno al desbordante raudal de la Magdalena, morada del lagarto, un caño de agua tan abundante que no sólo abastecía, aún en época árabe, a una población de una ciudad de unas 20 ha, sino que además también daba agua a cinco baños públicos y un importante número de huertas, y todavía sobraba. Los cronistas hablaban de que su raudal alcanzaba el tamaño del tronco de un buey, brotando de la montaña.[5][6][7]

También gozaba de consideración, el manantial de Santa María o Caño Santo (bajo la Catedral). Junto a otras fuentes y pilares, configuraban así una ciudad donde el agua era abundante y, de forma insólita y al contrario que la mayoría de las ciudades, la ciudad abastecía a los campos cercanos y no a la inversa. La procedencia de estos manantiales se situaba en el cerro de Santa Catalina, que se supone un inmenso almacén natural de agua.

El agua configuraba la ciudad. Así, cada barrio contaría con su aljibe que ya en época cristiana, sobre todo durante el renacimiento, se sustituiría por su pilar o fuente, en muchos casos de carácter monumental, adosada por lo general a una pared, de donde los vecinos se abastecerían y en la que abrevaban los animales.

A esta riqueza habría que sumar los arroyos que surcaban la ciudad, cruzados por numerosos puentes, como en la calle Arroyo de San Pedro, que establecían un paisaje urbano radicalmente distinto al que hoy conocemos, estos arroyos actualmente permanecen ocultos bajo las bóvedas construidas para la formación de nuevas calles, necesarias ante el crecimiento de la ciudad.

Actualmente, las aguas de esos manantiales no son superficiales, o incluso algunos se han secado, por lo que las fuentes que han sobrevivido al exacerbado crecimiento urbano se abastecen de la red de distribución pública, emanando agua perfectamente potabilizada. Un inadecuado sentido de la construcción moderna ha ido afectando a la capa freática, donde se almacenaba tanta agua, hasta agotarla o desviarla.

  • Raudal de la Magdalena (morada del lagarto): En época árabe abastecía a gran parte de la población de la ciudad, así como, a cinco baños públicos y multitud de huertas. Según algunos cronistas su raudal alcanzaba el tamaño del tronco de un buey.
  • Fuente de los Caños: construida en 1558, en la Plaza de Los Caños, se alimentaba del raudal de La Magdalena. Consta de un gran pilar-abrevadero decorado con pilastras cuadradas en su frente. El muro está enmarcado por dos dioses Términos que sostienen en la cabeza capiteles en forma de canastillos de flores, con volutas de orden jónico, adornado con un friso con florones. En la parte inferior hay tres hornacinas dentro de las cuales, en alto relieve,figuran niños desnudos que vierten ánforas de cuyas bocas arrancan los caños por donde sale el agua. Hay varias inscripciones fechadas en 1569 y 1648. La obra está atribuida a Francisco del Castillo el Mozo.
  • Pilar del Arrabalejo: Fue construida en 1573 bajo dirección de Alonso Barba por el cantero Miguel Ruiz de la Peña. La obra fue una petición de los vecinos del Arrabal de la Puerta de Baeza al Cabildo Municipal. Consta de un gran pilar abrevadero y tres cuerpos, el primero presenta dos hornacinas por las que brota el agua del raudal de La Magdalena, el segundo está decorado con escudos y cartelas, y el tercero ornamentado con cartelas. Está coronado por un jarrón y una inscripción de 1574, un año después de su construcción. Se encuentra situado en la calle Millán de Priego, haciendo esquina con la calle Fernando IV.
  • Fuente Nueva del Conde de Torralba: Situada en la plaza de la Merced y adosada a uno de los edificios de la manzana. Las primeras noticias documentadas que se tienen de ella datan de 1712, aunque hay una inscripción muy deteriorada que fecha su construcción en 1504. Se surtía con agua del raudal del Alamillo y en tiempos tenía un gran pilar-abrevadero, hoy desaparecido. Separado de él, por un pasillo para el público, se alzaba el cuerpo monumental. En el primer espacio se abren dos hornacinas en las que se ubican los caños. El segundo cuerpo, almohadillado, se remata en dos volutas a modo de frontón con dos bolas de cerámica vidriada incrustadas. Este cuerpo se decora con tres escudos. En el centro el escudo de España, a su izquierda un escudo sin identificar y a su derecha el de la ciudad de Jaén.
  • Fuente de las Bernardas: Es una fuente monumental que consta de un pilar abrevadero de gran tamaño, se surtía del raudal de la Fuente de Don Diego. Se sitúa junto a la Puerta del Ángel, en la explanada de la Alameda y adosada al muro del monasterio de las Bernardas. En 1967 fue restaurada por Luís Berges Roldán, añadiéndole un cuerpo central, compuesto por parte del Escudo de Carlos I de España e inscripciones procedentes de las antiguas Carnicerías de la Plaza de San Francisco.
  • Fuente de San Eufrasio.

Otros monumentos destacados

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Monumento de las Batallas.
  • Las Murallas de Jaén: Fortificación que rodeaba la antigua ciudad de Jaén de la cual se conservan aún notables restos. En esta se abrían hasta doce puertas, de las cuales sólo queda la Puerta del Ángel y restos de la Puerta de Martos.
  • Carnicerías: Edificio monumental construido en 1736 para instalar las carnicerías públicas de la ciudad. Presenta una fachada de gran belleza con escudos nobiliarios y una inscripción alusiva a su fin. El interior fue remodelado en 1920, construyéndose un patio neomudéjar, para instalar un grupo escolar. A finales de los años 90 se han localizado bajo sus cimientos los baños árabes denominados Baños del Naranjo, del siglo XI. Se encuentra en la Plaza de los Caños. Será la futura sede de la Casa Sefarad-Israel.[9]

Completan el nuevo Teatro Infanta Leonor, el Arco del Consuelo, Jabalcuz, la Casa de los Priores,[11]​ etc.

Véase también

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Referencias

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  1. Los Vilches (Jaén) y todo alrededor, protegido www.ideal.es/jaen
  2. «El Palacio de los Vélez en iuventa.org». Archivado desde el original el 8 de enero de 2010. Consultado el 27 de julio de 2010. 
  3. Los linajes privilegiados de Jaén II. Torres de Navarra y Fernández de Velasco
  4. El IMEFE estrena sede en el casco histórico de Jaén
  5. Díez Bedmar, Mª del Consuelo (2000). Jaén: Concejalía de Cultura, Servicio de Publicaciones, ed. El urbanismo medieval de Jaén a través del documento escrito: La aplicación "Base de datos". La historia en una nueva frontera. ISBN 84-8427-041-6. Consultado el 23 de agosto de 2010. «(...) un plano de la ciudad que nos muestre el recorrido del agua que nace de la Fuente de la Magdalena, durante la Edad Media y su imbricación con el Urbanismo de Jaén.» 
  6. Díez Bedmar, Mª del Consuelo (1999). Jaén: Concejalía de Cultura, Servicio de Publicaciones, ed. El raudal de la Magdalena y el crecimiento urbano de Jaén. ISBN 84-88183-45-3. Consultado el 23 de agosto de 2010. 
  7. Díez Bedmar, Mª del Consuelo. Universidad de Jaén, ed. El raudal de la Magdalena y la ciudad de Jaén durante la Baja Edad Media. pp. 119-134. Consultado el 23 de agosto de 2010. 
  8. Monumento A Las Batallas
  9. Jaén acogerá la segunda sede de la Casa Sefarad-Israel tarbutsefarad.com
  10. El edificio de los mil y ningún usos
  11. Casa de los Priores, casa con nombre propio