Anexo discusión:Los 80 de Vichy

Artículo incompleto e incomprensible

Se impone completar y contextualizar el artículo. ¿Es un Anexo a qué...? Por ejemplo: debería describirse la situación política y militar de Francia y la irreversible derrota sufrida frente a Alemania a causa de la guerra declarada por el Gobierno del Frente Popular; convendría establecer la composición completa de las Cámaras de diputados y senadores y los votos y porcentajes obtenidos por la afirmativa (la delegación de poderes constituyentes al Mariscal Petain) y, finalmente, la composición de los partidos políticos mayoritarios que lo votaron. Como ayuda, tomo de la página francesa algunos datos. Philippe Petain fue llamado al cargo de Presidente del Consejo el día siguiente de la renuncia de su antecesor, Paul Reynaud, 16 de junio de 1940, con la precisa instrucción del Presidente de Francia, Albert Lebrun, de obtener un armisticio con las fuerzas victoriosas así como las mejores condiciones posibles para Francia. El Mariscal no había tenido ninguna participación en la política o la organización militar francesas hasta el día 17 de mayo de 1940, residiendo en Madrid como embajador de Francia ante el Gobierno de Francisco Franco desde 1939, en que fue llamado a su patria frente al hundimiento catastrófico de los frentes. En esa fecha, es nombrado vice-presidente del Consejo de Estado sin ninguna función especial, el cual estaba presidido por el susodicho Reynaud y en la esperanza de crear un fuerte impacto emocional en los franceses ante la presencia del viejo Mariscal, cuando ya se avizoraba la derrota. Era conocida la aversión de Petain a una guerra para la cual, según él, Francia no estaba preparada, así como su antipatía por los ingleses, a quienes juzgaba propicios a la traición y al abandono, tal como en efecto sucedió. Y en efecto, el 14 de junio de 1940 mientras los alemanes ocupan París, los británicos se avocan a completar una retirada general del campo de batalla en la evacuación de Dunkerke, por medio de la cual abanonarán completamente el suelo francés desde mayo. Se populariza así el dicho "los británicos pelearán hasta el último francés". Es en este contexto, ya perdidas las batallas principales y abandonados por el Ejército Expedicionario Británico, que el Gobierno Francés contempla la esperanzada posibilidad de una rendición condicionada -la que, por lo demás, Francia no retribuirá en 1945 a sus antaño generosos enemigos. Petain acepta la responsabilidad a sabiendas de lo que significa para él, un militar siempre victorioso, tener que negociar nada menos que una rendición. Y proclama a los franceses: "no he podido ser vuestra espada, seré vuestro escudo". Y en efecto, el día 22 de junio de 1940 se firma un armisticio con los alemanes. Gracias a Petain, quien de todos modos calificará a las condiciones de "durísimas", el territorio francés no será ocupado totalmente; Francia conservará intacta su flota de guerra (más tarde destruída por un bombardeo inglés) y todos sus mandos militares, salvo los capturados; también conservará todas sus posesiones coloniales y ultramarinas sin ninguna injerencia alemana. Se permitirá junto a estas condiciones la existencia de un Gobierno Francés totalmente independiente -que sin duda lo fue, pese a los remanidos adjetivos de "gobierno títere", que la historia desmiente- y que de hecho, substirán hasta el final de la guerra, a excepción del control del territorio francés, que Alemania ocupará totalmente en 1944 ante la amenaza del desembarco aliado.
Es evidente que esta decisión salvó a Francia de una destrucción masiva y de una mortandad semejante a la primera Guerra Mundial -casi 2.000.000 de muertos- reduciendo dramática pero esperanzadoramente los males de la guerra. No está demás decir que los británicos pretendían una "defensa numantina" de Francia a fin de beneficiarse con las demoras que se ocasionaría al Ejército alemán, no obstante la devastación que esta política causaría.

Los plenos poderes

Acuciados por la situación, los políticos franceses en la Asamblea francesa -pertenecientes principalmente a la izquierda, el Partido socialista francés, el Partido comunista francés y el SFIO (sección francesa de la internacional obrera, socialista disidente)- votan el miércoles 10 de julio de 1940 una ley modificando la estructura constitucional de Francia y delegando al Mariscal plenos poderes constituyentes. Las Cámaras estaban compuestas por los diputados y senadores elegidos en las elecciones generales legislativas de 1936, donde el Frente Popular había obtenido una mayoría absoluta y prácticamente retenían los dos tercios de la Asamblea Nacional. De casi mil representantes (diputados y senadores) solo 110 eran de derecha. El resto, se repartía entre partidos de extrema y centro izquierda y algunos pocos de centro. Ese 10 de julio, se presentan a la votación 846 parlamentarios (544 diputados y 302 senadores), sobre una nómina total de 907 diputados y senadores con mandato vigente en 1939. Las ausencias son, algunas, las provocadas por la guerra, muertos o prisioneros o heridos, pero otras, de algunos tránsfugas que huyeron de Francia hacia Marruecos en el buque Massilia, casi todos de izquierda, sino todos, y otros que huyeron a Inglaterra y algunos más cuya ausencia es hasta hoy inexplicable. Así pues, el resultado de la votación fué el siguiente:

<tbody> </tbody>

Inscriptos	Votantes	Votes computados	Mayoría absoluta	A favor de los poderes	En contra	Abstenciones
846 (544 diputados y 302 senadores)	669	649	325	569	80	20

En la página Wikipedia en francés puede verse la extracción política de la mayor parte de los presentes, resultando ser prácticamente los mismos porcentajes y procedencias de quienes declararon la guerra en 1939.
Se podrá juzgar como se quiera esta circunstancia de la vida política de Francia. Pero no se puede ignorar lo siguiente:

• En junio de 1940 Francia estaba derrotada y su aliado principal en franca huída o retirada.
• La única posibilidad de supervivencia del país y la manera de impedir su devastación, era la rendición.
• La cesación de la lucha antes de la derrota total, permitía abrigar ciertas esperanzas de un trato benévolo, como en efecto sucedió.
• No correspondía que las autoridades políticas abandonaran la población a su suerte, provocando más desastres al dejar al pais sin ningún régimen político.
• Para el Mariscal, soldado al fin, la aceptación del Gobierno en esas circunstancias suponía un sacrificio inmenso.
• Las "facultades extraordinarias" concedidas a un gobernante en horas extremadamente peligrosas, son un resorte político que se conoce desde la Epoca romana como "dictadura", sin el contexto ideológico que tiene hoy en día.
• Finalmente, las autoridades que recogieron estas facultades extraordinarias, no tuvieron participación ni responsabilidad alguna en la Guerra, o la derrota militar. Y muy probablemente obtuvieron para Francia un tratamiento único y especial, frente a lo que sería la regla aplicada a los demás países ocupados a raiz de la Segunda Guerra Mundial, tanto por los alemanes como por los rusos o los Aliados.