Diferencia entre revisiones de «Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno (Chinchilla de Montearagón)»

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La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno se funda en el año 1.609 en el Convento de [[San Juan Bautista]], de la [[Orden de Predicadores]] de [[Santo Domingo de Guzmán]], ''"en memoria de la Pasión y Muerte de Nuestro Redentor [[Jesucristo]]"'', siendo la causa, principalmente, realizar la Procesión de Penitencia y Silencio que el día de [[Viernes Santo]] por la mañana, desde aquel tiempo, se ha hecho siempre. El principal promotor de la fundación de la Cofradía fue don Francisco Núñez Pujazones, Alférez Mayor de la Ciudad.
La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno se funda en el año 1.609 en el Convento de [[San Juan Bautista]], de la [[Orden de Predicadores]] de [[Santo Domingo de Guzmán]], en memoria de la Pasión y Muerte de Nuestro Redentor [[Jesucristo]], siendo la causa, principalmente, realizar la Procesión de Penitencia y Silencio que el día de [[Viernes Santo]] por la mañana, desde aquel tiempo, se ha hecho siempre. El principal promotor de la fundación de la Cofradía fue don Francisco Núñez Pujazones, Alférez Mayor de la Ciudad.


Las imágenes e insignias que tuvo la Cofradía en sus orígenes fueron las de Nuestro Señor Jesucristo vestido de Nazareno, [[San Juan Evangelista]] y la mujer Verónica, hechas todas a expensas de los fondos de la hermandad. Aunque no era se su propiedad, también se encargaba nuestra Cofradía de procesionar con la imagen de la [[Virgen de la Soledad]], custodiada en la ermita de la [[Fuensanta]], extramuros de la Ciudad.
Las imágenes e insignias que tuvo la Cofradía en sus orígenes fueron las de Nuestro Señor Jesucristo vestido de Nazareno, [[San Juan Evangelista]] y la mujer Verónica, hechas todas a expensas de los fondos de la hermandad. Aunque no era se su propiedad, también se encargaba nuestra Cofradía de procesionar con la imagen de la [[Virgen de la Soledad]], custodiada en la ermita de la [[Fuensanta]], extramuros de la Ciudad.


Todos los años, el [[Domingo de Ramos]], sin ser necesario citar a los hermanos por ser el día señalado y estipulado para ello, tal y como aparece en sus primitivas Constituciones, se realizaba una Junta General en la sacristía de la Iglesia Parroquial para ''“conferir y tratar las cosas que más convengan al servicio de Dios nuestro Señor, bien y aumento de dicha cofradía y, principalmente, en la disposición que se ha de dar para el gobierno de la Procesión del Viernes Santo por la mañana, nombrando las personas de mayor autoridad y virtud que la rijan, llevando dichos cofrades sus túnicas y capuces, cubierto el rostro”''.
Todos los años, el [[Domingo de Ramos]], sin ser necesario citar a los hermanos por ser el día señalado y estipulado para ello, tal y como aparece en sus primitivas Constituciones, se realizaba una Junta General en la sacristía de la Iglesia Parroquial para “conferir y tratar las cosas que más convengan al servicio de Dios nuestro Señor, bien y aumento de dicha cofradía y, principalmente, en la disposición que se ha de dar para el gobierno de la Procesión del Viernes Santo por la mañana, nombrando las personas de mayor autoridad y virtud que la rijan, llevando dichos cofrades sus túnicas y capuces, cubierto el rostro”.


Abría la Procesión el [[Alférez]], que llevaba el estandarte morado de la Cofradía, detrás del cual marchaban los cofrades con cruces en los hombros y otras penitencias. A continuación desfilaban las imágenes, siendo la última en hacerlo la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, seguido del [[Arcipreste]] y demás clérigos, que durante toda la Procesión rezaban el [[Miserere]] ''“en voz baja y dolorosa, según se ha acostumbrado”''. Después marchaban las mujeres, y seguidamente, ''“dos niños, también con sus túnicas, cantando a trechos diferentes coplas de la Pasión de nuestro Salvador, que es sólo a lo que se ha de atender y considerar”''. Estas "coplas" constituyen lo que actualmente se conoce como el [[Canto de la Pasión de Chinchilla]]. Cerraba el cortejo Nuestra Señora de la Soledad.
Abría la Procesión el [[Alférez]], que llevaba el estandarte morado de la Cofradía, detrás del cual marchaban los cofrades con cruces en los hombros y otras penitencias. A continuación desfilaban las imágenes, siendo la última en hacerlo la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, seguido del [[Arcipreste]] y demás clérigos, que durante toda la Procesión rezaban el [[Miserere]] “en voz baja y dolorosa, según se ha acostumbrado”. Después marchaban las mujeres, y seguidamente, “dos niños, también con sus túnicas, cantando a trechos diferentes coplas de la Pasión de nuestro Salvador, que es sólo a lo que se ha de atender y considerar”. Estas "coplas" constituyen lo que actualmente se conoce como el [[Canto de la Pasión de Chinchilla]]. Cerraba el cortejo Nuestra Señora de la Soledad.


Para su mantenimiento, la Cofradía contaba con diversas fuentes de ingresos. Además de las cuotas de sus hermanos y las limosnas obtenidas por el uso de las túnicas y por pedir por las calles en las fiestas, y por las aldeas del término durante el mes de agosto, tenía cinco fincas de las que recibía trigo y cebada que luego vendía. Disponía, además desde el año 1.753, de una [[bolera]] en la calle del Juego de Bolos (de ahí su nombre).
Para su mantenimiento, la Cofradía contaba con diversas fuentes de ingresos. Además de las cuotas de sus hermanos y las limosnas obtenidas por el uso de las túnicas y por pedir por las calles en las fiestas, y por las aldeas del término durante el mes de agosto, tenía cinco fincas de las que recibía trigo y cebada que luego vendía. Disponía, además desde el año 1.753, de una [[bolera]] en la calle del Juego de Bolos (de ahí su nombre).
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En el año 1.700, el Obispo de la [[Diócesis de Cartagena]], D. Francisco Fernández de Angulo, mandó trasladar la Cofradía a la Iglesia Parroquial de Santa María, al tiempo que se renovaban los [[Estatutos]] por los que la Cofradía debía regirse.
En el año 1.700, el Obispo de la [[Diócesis de Cartagena]], D. Francisco Fernández de Angulo, mandó trasladar la Cofradía a la Iglesia Parroquial de Santa María, al tiempo que se renovaban los [[Estatutos]] por los que la Cofradía debía regirse.


Los Estatutos volverían a renovarse en el año 1.739 y estarían vigentes hasta la disolución de la Cofradía en el año 1.771. Es en este año cuando el [[Conde de Aranda]], Ministro del Rey [[Carlos III]], manda hacer un informe sobre las Cofradías y Hermandades existentes en la ciudad de Chinchilla y todo el [[Reino de Murcia]], resultando un total de 18 hermandades en la Parroquia, 17 en las aldeas, 5 en el convento de Dominicos y 2 en el de religiosas Dominicas. Ante tal número de cofradías y hermandades, mandó el Conde con fecha 30 de septiembre de 1.771 la disolución de todas ellas, salvo las de San Sebastián y San Ildefonso ''”por no tener renta fija y ser intolerable el perjuicio y pensión del vecindario en sostenerlas con el gasto anual de 13.000 y más reales”''
Los Estatutos volverían a renovarse en el año 1.739 y estarían vigentes hasta la disolución de la Cofradía en el año 1.771. Es en este año cuando el [[Conde de Aranda]], Ministro del Rey [[Carlos III]], manda hacer un informe sobre las Cofradías y Hermandades existentes en la ciudad de Chinchilla y todo el [[Reino de Murcia]], resultando un total de 18 hermandades en la Parroquia, 17 en las aldeas, 5 en el convento de Dominicos y 2 en el de religiosas Dominicas. Ante tal número de cofradías y hermandades, mandó el Conde con fecha 30 de septiembre de 1.771 la disolución de todas ellas, salvo las de San Sebastián y San Ildefonso” por no tener renta fija y ser intolerable el perjuicio y pensión del vecindario en sostenerlas con el gasto anual de 13.000 y más reales”



=== La aparición de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia ===
=== La aparición de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia ===

Revisión del 09:35 18 oct 2009

Introducción

La Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Las Cruces y Santísima Virgen del Rosario es una Cofradía Penitenciaria de Semana Santa erigida canónicamente en la Parroquial de Santa María del Salvador de la ciudad de Chinchilla de Monte-Aragón, en la Diócesis de Albacete.


El origen de la Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno hay que buscarlo en los primeros años del siglo XVII. No obstante, a lo largo de los cuatro siglos transcurridos desde entonces, han sucedido numerosos acontecimientos que nos permiten dividir la historia de la Cofradía en tres etapas diferentes:

  • Período 1: Transcurre entre los años 1.609, en que se funda la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, hasta 1.771, año en el que el Conde de Aranda, de acuerdo con la reforma de las Cofradías por él impulsada, procede a la disolución de casi todas las Cofradías existentes en la ciudad de Chinchilla, entre ellas, la del Nazareno.
  • Período 2: Este período está comprendido entre los primeros años del siglo XIX (hacia 1.810) en que la Cofradía es restaurada tras la recuperación de las celebraciones de Semana Santa, y el año 1.936, en que la Cofradía es disuelta a causa de la Guerra Civil española. Durante este período, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno convive con la nueva Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia o de Las Cruces, fundada en el año 1.806.
  • Período 3: Este último período histórico arranca en el año 1.954, en el que aparece nuevamente la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y se fusiona con la antigua Hermandad de las Cruces, dando lugar a la actual Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Santísima Virgen del Rosario.


La Cofradía se encuentra dividida en varias secciones:

  • La Sección de las Cruces y la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, heredera de los antiguos Pasionistas de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia, es la encargada de representar cada Viernes Santo el ancestral Canto de la Pasión de Chinchilla detrás de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, en la Procesión del Encuentro.
  • La Sección Infantil del Resucitado, creada en 1.956, está compuesta por niños que acompañan la imagen del Resucitado en la Procesión del Domingo de Pascua.
  • Finalmente, el Tercio de Armados Alabarderos, fundado en la segunda mitad del siglo XIX, da Escolta de Honor a los pasos titulares de la Cofradía en cada una de las Procesiones o actividades en las que interviene.


La Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Las Cruces y Santísima Virgen del Rosario cuenta en la actualidad con unos 600 hermanos cofrades. En la Semana Santa de Chinchilla participa en las siguientes Procesiones:

  • Procesión del Prendimiento, en la tarde del Jueves Santo, con la imagen del Santísimo Cristo Ecce Homo.
  • Procesión del Santo Entierro, el Viernes Santo por la noche, con la imagen del Santísimo Cristo de la Misericordia.
  • Procesión del Traslado, el Sábado Santo por la tarde, con la imagen de la Santísima Virgen del Rosario.
  • Procesión del Resucitado, en la mañana del [Domingo de Pascua], con las imágenes del Santísimo Cristo Resucitado y la Santísima Virgen del Rosario.


Historia

Orígenes

La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno se funda en el año 1.609 en el Convento de San Juan Bautista, de la Orden de Predicadores de Santo Domingo de Guzmán, en memoria de la Pasión y Muerte de Nuestro Redentor Jesucristo, siendo la causa, principalmente, realizar la Procesión de Penitencia y Silencio que el día de Viernes Santo por la mañana, desde aquel tiempo, se ha hecho siempre. El principal promotor de la fundación de la Cofradía fue don Francisco Núñez Pujazones, Alférez Mayor de la Ciudad.

Las imágenes e insignias que tuvo la Cofradía en sus orígenes fueron las de Nuestro Señor Jesucristo vestido de Nazareno, San Juan Evangelista y la mujer Verónica, hechas todas a expensas de los fondos de la hermandad. Aunque no era se su propiedad, también se encargaba nuestra Cofradía de procesionar con la imagen de la Virgen de la Soledad, custodiada en la ermita de la Fuensanta, extramuros de la Ciudad.

Todos los años, el Domingo de Ramos, sin ser necesario citar a los hermanos por ser el día señalado y estipulado para ello, tal y como aparece en sus primitivas Constituciones, se realizaba una Junta General en la sacristía de la Iglesia Parroquial para “conferir y tratar las cosas que más convengan al servicio de Dios nuestro Señor, bien y aumento de dicha cofradía y, principalmente, en la disposición que se ha de dar para el gobierno de la Procesión del Viernes Santo por la mañana, nombrando las personas de mayor autoridad y virtud que la rijan, llevando dichos cofrades sus túnicas y capuces, cubierto el rostro”.

Abría la Procesión el Alférez, que llevaba el estandarte morado de la Cofradía, detrás del cual marchaban los cofrades con cruces en los hombros y otras penitencias. A continuación desfilaban las imágenes, siendo la última en hacerlo la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, seguido del Arcipreste y demás clérigos, que durante toda la Procesión rezaban el Miserere “en voz baja y dolorosa, según se ha acostumbrado”. Después marchaban las mujeres, y seguidamente, “dos niños, también con sus túnicas, cantando a trechos diferentes coplas de la Pasión de nuestro Salvador, que es sólo a lo que se ha de atender y considerar”. Estas "coplas" constituyen lo que actualmente se conoce como el Canto de la Pasión de Chinchilla. Cerraba el cortejo Nuestra Señora de la Soledad.

Para su mantenimiento, la Cofradía contaba con diversas fuentes de ingresos. Además de las cuotas de sus hermanos y las limosnas obtenidas por el uso de las túnicas y por pedir por las calles en las fiestas, y por las aldeas del término durante el mes de agosto, tenía cinco fincas de las que recibía trigo y cebada que luego vendía. Disponía, además desde el año 1.753, de una bolera en la calle del Juego de Bolos (de ahí su nombre).

En el año 1.700, el Obispo de la Diócesis de Cartagena, D. Francisco Fernández de Angulo, mandó trasladar la Cofradía a la Iglesia Parroquial de Santa María, al tiempo que se renovaban los Estatutos por los que la Cofradía debía regirse.

Los Estatutos volverían a renovarse en el año 1.739 y estarían vigentes hasta la disolución de la Cofradía en el año 1.771. Es en este año cuando el Conde de Aranda, Ministro del Rey Carlos III, manda hacer un informe sobre las Cofradías y Hermandades existentes en la ciudad de Chinchilla y todo el Reino de Murcia, resultando un total de 18 hermandades en la Parroquia, 17 en las aldeas, 5 en el convento de Dominicos y 2 en el de religiosas Dominicas. Ante tal número de cofradías y hermandades, mandó el Conde con fecha 30 de septiembre de 1.771 la disolución de todas ellas, salvo las de San Sebastián y San Ildefonso” por no tener renta fija y ser intolerable el perjuicio y pensión del vecindario en sostenerlas con el gasto anual de 13.000 y más reales”


La aparición de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia

A comienzos del año 1.806, varios vecinos de la ciudad encabezados por Alonso Hortelano, Pascual Sánchez y Francisco Ruiz, se reunieron con el párroco de la Iglesia de Santa María, D. Paulino Molino, a fin de reimpulsar la celebración de la Semana Santa en Chinchilla con la recuperación de las antiguas Cofradías. Para servir de revulsivo para sus convecinos, decidieron crear una nueva Hermandad bajo la advocación del Santísimo Cristo de la Misericordia y con el nombre de la Santa Penitencia y la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, que realizara Procesión de Penitencia en la Semana Santa del año siguiente. Sus Constituciones fueron presentadas para su aprobación el día 6 de mayo de 1.806, recibiendo la respuesta afirmativa por el Fiscal General Eclesiástico del Obispado de Cartagena, Sede Vacante, tan solo 20 días después.

En las procesiones vestían una túnica morada, un cordón de lana trenzada ceñido a la cintura, una banda de color marrón con la estampa de un santo de la devoción del cofrade (normalmente, el de su propio nombre), una pequeña cruz de plata al cuello, otra cruz de metal blanco que prendía de la túnica a la altura del hombro y un rosario de porcelana engarzado en plata prendido del cíngulo. Debido seguramente a la cantidad de cruces que estos cofrades llevaban en el hábito, recibieron el apelativo popular de “Las Cruces”, al igual que los de Nuestro Padre Jesús fueron llamados “Los Moraos”.

Una de las atribuciones que asumió la nueva Hermandad fue la de continuar con la interpretación del Canto de la Pasión de Chinchilla en la procesión del Viernes Santo por la mañana, que desde siempre había sido la propia de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Pese a ello, como se desprende de los antiguos libros de cuentas, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús, tras su refundación, invitaba cada año a caramelos a los Pasionistas, guardando una filial relación con la nueva Hermandad del Cristo de la Misericordia. Así lo demuestra el hecho de que en un período de crisis, entre la primera y la segunda mitad del siglo XX, en que las Cruces deja de desfilar, es la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno la que lleva sus imágenes en la Procesión y subasta sus cetros.


Entrada en el siglo XX

En el año 1.887, el nuevo párroco D. Melquíades Sánchez, deseoso de fortalecer el “orden espiritual” de sus feligreses, decide a dar un impulso a las Cofradías de Semana Santa que habían perdurado hasta esa fecha, a saber: la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, la del Santísimo Cristo de la Sangre, la del Santísimo Cristo de la Misericordia y la de Los Apóstoles. Y gracias a la labor conjunta realizada por las Cofradías y por su párroco D. Melquíades, la fórmula dio resultados inimaginables al año siguiente, 1.888, donde se señala en la documentación de la época que fue tal el efecto producido con la cooperación de las cuatro Cofradías que, salvo raras excepciones, toda la feligresía había cumplido con el Precepto Pascual, en tal medida, que fue necesario que vinieran otros tres sacerdotes de fuera de la población.


En este período, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno procesionaba con las imágenes de Nuestro Padre Jesús Nazareno, San Juan Evangelista, La Verónica y la Virgen de la Soledad, que le eran propias desde sus orígenes, más otros tres pasos: el paso de la Oración en el Huerto (atribuido a Francisco Salzillo), el paso del Prendimiento o Ecce Homo y el Resucitado. Asimismo, la Cofradía de Las Cruces procesionaba con su titular, el Santísimo Cristo de la Misericordia, con la Santísima Virgen del Rosario y con Santa María Magdalena, adquirida en el año 1.887.

Desgraciadamente, ninguno de estos pasos se conserva en la actualidad, pues con motivo de la Guerra Civil española, todas las imágenes fueron destruidas en el asalto e incendio de la Iglesia Parroquial en el mes de julio de 1.936.


La Refundación de 1.954

En el año 1.954 desfila por primera vez desde el inicio de la Guerra Civil una cofradía de Semana Santa en Chinchilla: la del Santísimo Cristo de la Agonía, fundada el año anterior para, al igual que había hecho la de las Cruces en 1.806, incentivar a los cofrades a restaurar las antiguas Cofradías. El 17 de noviembre del año anterior había llegado un nuevo vecino a la ciudad, natural de Villacarrillo, llamado José Ceres Rodríguez. Este joven médico, procedente de tierras andaluzas, sentía un gran apego por la Semana Santa y, en particular, por la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, ya que su madre siempre sintió una especial predilección por esta hermandad en Granada, donde había nacido.

Por tanto, y animado al ver desfilar a la recientemente fundada Cofradía del Cristo de la Agonía, comenzó a barajar la posibilidad de reorganizar la antigua hermandad del Nazareno.

Recién finalizada la Semana Santa de aquel año 1954, José Ceres citó en la Plaza Mayor a algunos amigos que habían sido cofrades de Jesús Nazareno y de Las Cruces antes de la guerra, a saber: José García, Emilio Toledo, Eduardo Cebrián, Pedro Ballesteros y Ramón López. José Ceres les expuso la idea de reorganizar la antigua Cofradía de Jesús Nazareno, secundando la propuesta todos los presentes de inmediato y eligiéndolo, por aclamación, como presidente. Algunos de los presentes propusieron organizar no sólo la Cofradía del Nazareno, sino también la de las Cruces, aunque finalmente decidieron agrupar las dos antiguas hermandades en una sola con el fin de que existiera una cofradía fuerte con muchos cofrades que dos pequeñas hermandades con muy pocos.

Se iniciaron los trámites con el Obispado de Albacete y se redactaron los nuevos estatutos, que fueron aprobados por el Obispo Mons. Arturo Tabera y Araoz, quedando constituida de nuevo la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, a cuyo título se había añadido “y Santísima Virgen del Rosario” en referencia a la Hermandad de las Cruces, de la que la Santísima Virgen, con esta advocación, era cotitular.

El primer paso a realizar fue la adquisición de la imagen titular. Emilio Toledo, uno de los fundadores, se ofreció para sufragar los gastos, donando a la Cofradía el importe íntegro de la imagen y gestionando su adquisición. La imagen del Nazareno, junto a la del Resucitado, que había sido donada a la Iglesia Parroquial quince años antes, procesionó por primera vez junto a los nuevos cofrades en la Semana Santa de 1.955.

Eduardo Cebrián encabezó el proyecto de recuperar el antiguo Canto de la Pasión de Chinchilla para la procesión del Viernes Santo por la mañana, para lo que comenzó a enseñárselo a un grupo de niños, hijos de aquellos primeros cofrades. Eduardo consiguió rescatar la Pasión para el momento del Encuentro en la Plaza Mayor, que se completaría finalmente en el año 1.959 con la adquisición de la imagen de la Verónica. Con anterioridad, habían sido recuperadas las imágenes de la Virgen del Rosario y del Ecce Homo. Igualmente, se compró una nueva imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno de talla, entregándose la que había donado Emilio Toledo, que era de pasta, a cuenta de la nueva.

En 1.956 se creó para la procesión del Domingo de Resurrección la Sección Infantil del Resucitado, compuesta por unos 40 niños vestidos de blanco, al modo hebreo, que desfilaron junto a la imagen de Cristo en la Procesión de Pascua.


La Cofradía en nuestros días

En los últimos tiempos, la Cofradía ha seguido contribuyendo activamente al engrandecimiento de la Semana Santa de Chinchilla, una de las más antiguas y tradicionales de la región, para mayor gloria de Dios y de su Santísima Madre, la Virgen del Rosario.

En el año 1.994 se decidió agregar al nombre de la Cofradía el título de “Las Cruces”, en recuerdo de la antigua hermandad absorbida en la refundación cuarenta años antes. Durante ese año se creó la Sección de las Cruces y la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, compuesta por los cofrades encargados de cantar la Pasión en la Procesión del Encuentro, que dos años antes, por iniciativa de Fina Ortega, se había recuperado en su versión íntegra. Asimismo, fueron reproducidas para esta sección las ropas de la antigua hermandad de las Cruces.

Siguiendo con la recuperación de antiguas tradiciones, en el año 1.995 se restauró la Sección Infantil del Resucitado, compuesta en esta ocasión por doce niños, en representación de los Apóstoles, para acompañar al Resucitado en la Procesión del día de Pascua.

Llegados al año 1.998 la Cofradía da un paso decisivo al recuperar la imagen del Santísimo Cristo de la Misericordia, titular de la antigua Hermandad de las Cruces. La imagen fue bendecida en la Iglesia Parroquial por el Obispo de Albacete, Mons. Francisco Cases Andréu, y supuso un importante revulsivo para la Cofradía y para la Semana Santa de Chinchilla. Sería también Mons. Cases quien aprobaría en el año 2.002 los nuevos Estatutos por los que la Cofradía del Nazareno se rige en la actualidad.

Desde entonces, hasta el día de hoy, cientos de personas han seguido trabajando de forma callada y constante por y para la Cofradía. Como un gran premio al buen hacer de sus cofrades durante tanto tiempo, la Cofradía ha tenido el alto honor de recibir en 2.009, en el IV Centenario de su fundación, el título de Real, otorgado por S.M. el Rey. D. Juan Carlos I, Hermano Mayor Honorario de la Cofradía desde el año 2003. No cabe duda que la concesión de este título, el más alto otorgado por la Casa Real Española, ha sido uno de los hitos más importantes de los que han jalonado la existencia de la Cofradía. Una Cofradía que, a día de hoy, persigue, con la ayuda de Dios y el compromiso firme de todos sus cofrades, transmitir a las nuevas generaciones los valores cristianos que impulsaron a los que la fundaron hace ya cuatro siglos.


Imágenes

La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno tuvo un importante patrimonio artístico, fruto del legado de más de trescientos años de historia. Sin embargo, todas sus imágenes fueron destruidas en el asalto a la Iglesia Parroquial producido en julio de 1936 con motivo de la guerra civil española. Entre otras, desaparecieron en el incendio del templo las imágenes de Nuestro Padre Jesús Nazareno, del siglo XVII; el Cristo de la Misericordia, del siglo XVI; o el paso de la Oración en el Huerto, atribuido a Francisco Salzillo, del siglo XVIII.

Sería a partir de la restauración de la Cofradía, en 1954, cuando las imágenes van siendo restituidas por las que actualmente desfilan en la Semana Santa de Chinchilla. La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno recuperó las imágenes de la Virgen del Rosario (1955), Nuestro Padre Jesús Nazareno (1957), el Ecce-Homo (1958), la Verónica (1959) y el Santísimo Cristo de la Misericordia (1998), más el Cristo Resucitado (1940) que pertenecía a la Iglesia Parroquial. Otras imágenes, vinculadas históricamente con las antiguas hermandades del Nazareno y Las Cruces, fueron a su vez recuperadas por otras cofradías. Las imágenes de San Juan Evangelista y de Nuestra Señora de la Soledad vieron aparecer nuevas cofradías, que se encargaron desde su fundación del culto a estas imágenes. La Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias recuperó la imagen de Santa María Magdalena en el año 2000. Finalmente, la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad recuperó el paso de la Oración en el Huerto en la Semana Santa de 2009.


Nuestro Padre Jesús Nazareno

La actual imagen del Nazareno no es la primera que tuvo la Cofradía tras la refundación de 1954. Sustituye a otra anterior, donada a la Cofradía por Emilio Toledo en 1954, que procesionó en la Semana Santa de los años 1955 y 1956. Esta imagen era de pasta y por esta razón la Junta Directiva decidió en 1956 comprar una nueva imagen de talla, entregando la de pasta a cuenta de la nueva imagen. Las gestiones se realizaron a través del representante artístico José Espuig, afincado en Valencia en la calle Guillem de Castro nº 69.

La imagen titular de la Cofradía, Nuestro Padre Jesús Nazareno, es una talla en madera de cuerpo entero de escuela valenciana, realizada en 1.956 por un autor anónimo. Fue adquirida a expensas de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús y costó 9.175 pesetas. Desfiló por primera vez en la Semana Santa de 1957. A diferencia del patrón seguido por las imágenes del Nazareno con la cruz a cuestas, el de Chinchilla lleva la cruz sobre su hombro derecho, no sobre el izquierdo, como suele ser habitual en la iconografía.

La imagen se venera en su capilla de la Iglesia Arciprestal de Santa María del Salvador de Chinchilla, en el lado de la Epístola, donde recibe durante el año las visitas de sus cofrades y devotos. Al ser una imagen de cuerpo entero, se presenta durante el año con la talla descubierta, decorada con rica policromía y dorados. Para las salidas procesionales se viste, siguiendo la tradición, con una túnica de terciopelo morado. La túnica actual fue bordada por Mercedes Tortosa en el año 2003, y reproduce el diseño de la que fue destruida en 1.936. En ella están representados todos los anagramas de la Pasión de Cristo.

La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno procesiona el Viernes Santo por la mañana, en la Procesión del Encuentro.


Santísima Virgen del Rosario

La Virgen del Rosario es especialmente venerada por todos los cofrades de Chinchilla, sea cual sea la hermandad a la que pertenezcan. La advocación del Rosario fue promovida en la ciudad por los frailes dominicos, que establecieron su convento en Chinchilla durante la segunda mitad del siglo XIII.

La Virgen del Rosario es una talla en madera de cuerpo entero de escuela valenciana realizada en 1.955 por un autor anónimo. Esta imagen fue adquirida por la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno mediante suscripción popular, con un coste de 6.150 pesetas.

La imagen tiene varias pelucas de pelo natural, la mayoría realizadas con pelo donado por las propias chinchillanas. La última peluca, que es la que la imagen utiliza durante las procesiones de Semana Santa, se confeccionó en el año 2004. Asimismo, se conservan varios vestidos y alhajas que utiliza la Virgen en Semana Santa y que pertenecieron a la imagen que fue destruida en 1936, entre las que destaca el Collar de la Orden del Toisón de Oro.

El vestido y manto que la imagen luce actualmente durante la Semana Santa fue confeccionado en el año 2004 por su camarera, Isabel Campos, y bordado por Mercedes Tortosa. Está realizado en terciopelo de color blanco y muestra quince escenas con todos los misterios del Rosario.

La imagen recibe veneración durante todo el año en la Capilla del Rosario de la Iglesia Conventual de Santo Domingo de Guzmán. Procesiona el Sábado Santo por la tarde (sin niño), en que es trasladada a la Iglesia Parroquial, y en la Procesión de Pascua el Domingo de Resurrección. Especialmente emotivo es el momento del Encuentro, en que se coloca a la imagen el niño Jesús tras el cruce con el Resucitado, así como el desfile que cierra la Semana Santa al finalizar la Misa de Resurrección, en que todas las cofradías acompañan a la Virgen hasta su capilla en el Convento de Santo Domingo.


Santísimo Cristo de la Misericordia

El Santísimo Cristo de la Misericordia es el titular de la Hermandad de las Cruces y, por tanto, cotitular de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Es una talla en madera de cuerpo entero realizada en 1.998 por Luis Salmerón Verdú en Socuéllamos (Ciudad Real). Pertenece a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y fue adquirida mediante suscripción popular. Su coste fue de 600.000 ptas.

La imagen está inspirada en la que antiguamente perteneció a la Cofradía, del siglo XVI, destruida en 1936. Representa a Nuestro Señor Jesucristo en la cruz en el momento inmediatamente posterior a Su muerte. Se caracteriza por el uso de tonelete (falda corta hasta las rodillas), típica de los cristos medievales.

El Santísimo Cristo de la Misericordia procesiona el Viernes Santo por la noche, en la Procesión del Santo Entierro. Durante el año, se expone a la veneración de los fieles en su capilla de la Iglesia Parroquial, frente a la entrada de la Capilla de la Comunión en la antesacristía. Es extraño entrar a la Iglesia y no encontrar varios cirios encendidos a los pies de la imagen.


Santísimo Cristo Ecce-Homo

La imagen del Ecce-Homo es una talla de madera de cuerpo entero realizada en 1.958 en los talleres de Pelegrín Gaspar y Pérez Sánchis de Valencia, a través de las gestiones del representante artístico José Espuig. La decoración y policromía de la imagen es obra de José Castellanos, también de Valencia. Fue adquirida a expensas de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y costó 6.375 pesetas. La imagen fue restaurada en el año 2004 por María Dolores Barnuevo.

La imagen del Ecce-Homo muestra a Cristo en pie, atazo y coronado de espinas en el instante posterior a la flagelación, en que Pilatos lo muestra al pueblo.

El Ecce-Homo se encuentra expuesto a la veneración de los fieles en la Iglesia Arciprestal de Santa María del Salvador de Chinchilla, en la hornacina inferior derecha del retablo mayor del baptisterio. Procesiona el día de Jueves Santo cerrando la Procesión del Prendimiento.


Santa Verónica

La imagen de la Verónica es una talla en madera de escuela valenciana de cuerpo entero, realizada en 1.959 por un autor anónimo. Su compra fue gestionada a través del representante artístico José Espuig, de Valencia. Es propiedad de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que la adquirió con un coste de 10.320 pesetas.

Inspirada en la Verónica que Salzillo realizó para la Cofradía de Jesús de Murcia en el siglo XVIII, sostiene en sus brazos la Santa Faz, impresa en la toca con la que enjugó el rostro del Señor. Aunque la anterior imagen fue destruida en 1936, afortunadamente se conserva el velo del siglo XVIII que ésta usaba en las procesiones, actualmente expuesto en el museo de la Iglesia Parroquial, realizado en blonda bordada con todos los símbolos de la Pasión. Además de este, la imagen posee otros tres velos. Durante el año alterna los pintados por Ramón Navalón Jiménez y por Pedro Juan Cebrián Belmonte. En el año 2004 estrenó un nuevo velo, pintado por Pedro Vergara, que es el que la imagen usa en las procesiones. La Verónica procesiona en la Procesión del Encuentro, el Viernes Santo por la mañana.

Fue restaurada en 1.974 por José Zamorano en Hellín, con un coste de 5.000 pesetas.

La imagen se presenta a la veneración de los fieles durante el año en el Baptisterio de la Iglesia Parroquial, en una hornacina al lado derecho, junto al Retablo de la Resurrección.


Santísimo Cristo Resucitado

El Resucitado es la única imagen que procesiona con la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y no es de su propiedad, pues fue donada a la Iglesia Parroquial por Domingo García, que la adquirió en el taller “Las Artes Religiosas” de Olot (Gerona), en 1.943, antes de la refundación. La Diócesis de Albacete, propietaria de la imagen, tiene reconocidos oficialmente los derechos de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús para procesionar con esta imagen en sus Estatutos, aprobados por Mons. Francisco Cases Andréu, Obispo de Albacete, en 2.002.

La imagen muestra a un Cristo triunfal que ha vencido a la muerte, sosteniendo con la mano derecha un banderín bordado con el escudo de la Resurrección. Son muy características las campanillas que cuelgan de los candelabros del paso, así como los pebeteros humeantes instalados en el trono que perfuman con incienso el paso del Señor en la Procesión. La imagen procesiona en la mañana del Domingo de Pascua, en la Procesión del Resucitado. Antes de la Procesión se lleva a cabo el Encuentro en la Plaza Mayor con la Virgen del Rosario, que es uno de los momentos más emotivos de la Semana Santa chinchillana.

La imagen fue restaurada en el año 2003. La Cofradía encargó su restauración a María Dolores Barnuevo.

El Resucitado se encuentra expuesto a la veneración de los fieles en su camarín del Baptisterio de la Iglesia Parroquial, en el lado izquierdo del Retablo de la Resurrección.


Vestimenta de la Cofradía

Los Cofrades visten túnica de tela de color morado, cordón amarillo a la cintura con nudo y caída a la izquierda, medalla de la Cofradía al cuello, capuz morado con cruz amarilla bordada, zapato negro y guantes blancos.

En la Procesión del Santo Entierro se utiliza capuz negro sin bordar, en señal de luto.

En la procesión del Resucitado se suprime el capuz y se añade una banda amarilla al hombro izquierdo y anudado al lado derecho de la cintura, con cruz morada bordada.

Otras secciones de la Cofradía visten con otros hábitos o uniformes, como se describe a continuación.


Sección de las Cruces y la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo

Utilizan el hábito de la antigua Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia, compuesto por túnica de tela morada con una cruz metálica en el hombro derecho, cordón blanco a la cintura con nudo y caída a la izquierda, pequeño crucifijo al cuello y banda de color marrón al hombro izquierdo anudada al lado derecho de la cintura, con la imagen de Jesús Nazareno.


Sección de Armados Alabarderos

El uniforme de Armado Alabardero está compuesto por calzas negras, casaca de terciopelo morado con el anagrama de la cofradía bordado en oro a la altura del pecho y las mangas acuchilladas con raso de seda dorado, calzón acuchillado en terciopelo morado y raso de seda dorado, cinturón de raso dorado con hebilla de bronce en el que figura el anagrama de la cofradía, guantes blancos, gola al cuello y capacete de acero sobre la cabeza. Los miembros del piquete llevan una alabarda de acero grabado, excepto el Jefe, que lleva la espada de Carlos V


Sección Infantil del Resucitado

Túnica de tela blanca, cordón amarillo a la cintura con nudo y caída a la izquierda, banda amarilla al hombro izquierdo y anudada al lado derecho de la cintura y pañuelo hebreo a la cabeza. Cada uno de ellos porta una bandera con el emblema del Resucitado.



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