Banderas e insignias del Imperio bizantino

De Wikipedia, la enciclopedia libre

Durante la mayor parte de su historia, el Imperio romano de Oriente (bizantino) no conoció ni utilizó la heráldica en el sentido europeo occidental de motivos permanentes transmitidos a través del derecho hereditario.[1]​ Varias grandes familias aristocráticas emplearon ciertos símbolos para identificarse;[1]​ el uso de la cruz y de los íconos de Cristo, la Theotokos y varios santos también está atestiguado en los sellos de los funcionarios, pero estos eran a menudo emblemas personales más que familiares.[2]​ Asimismo, varios emblemas (en griego: σημεῖα, romanizadosēmeia) se utilizaban en ocasiones oficiales y con fines militares, como estandartes o escudos con diversos motivos como la cruz o el crismón.[3]​ A pesar de la abundancia de símbolos preheráldicos en la sociedad bizantina del siglo x, sólo a través del contacto con los cruzados en el siglo xii (cuando la heráldica se estaba sistematizando en Europa Occidental),[4]​ y particularmente después de la cuarta cruzada (1202-1204) y el establecimiento de principados francos en suelo bizantino a partir de 1204, los usos heráldicos penetraron en Bizancio.[5]​ Una heráldica nativa bizantina comenzó a aparecer en los peldaños medios y bajos de las familias aristocráticas en el siglo xiv, coincidiendo con el declive de la autoridad imperial y con la fragmentación del poder político bajo los últimos emperadores paleólogos. Sin embargo, nunca logró la amplitud de adopción o la sistematización de sus análogos occidentales.[6]

Referencias[editar]

  1. a b Cernovodeanu, 1982, p. 409.
  2. Kazhdan, 1991, "Coats of arms" (A. Kazhdan), pp. 472-473.
  3. Kazhdan, 1991, "Insignia" (A. Kazhdan), pp. 999-1000.
  4. Crouch, 2002, p. 28.
  5. Cernovodeanu, 1982, pp. 409-411.
  6. Cernovodeanu, 1982, pp. 411-412.

Bibliografía[editar]