Angelica keiskei

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Ashitaba
Taxonomía
Reino: Plantae
División: Angiosperma
Orden: Apiales
Familia: Apiaceae
Género: Angelica
Especie: A. keiskei

Angelica keiskei, comúnmente conocida por su nombre en japonés ashitaba (アシタバ o 明日葉?), literalmente "hoja del mañana", es una especie de planta de la familia Apiaceae. Es nativa de Japón, donde habita en la costa del Pacífico.[1]​ Es endémica de las zonas de la península de Bōsō, península de Miura, península Izu, y las islas Izu. Ha sido ampliamente cultivada en otras zonas.

Descripción[editar]

Es una planta perenne, que alcanza entre 50 a 120 cm de alto. Al igual que la mayoría de los miembros de la familia de las zanahorias, produce amplias umbelas de flores blancas y posee hojas disectadas.

Angelica keiskei se asemeja mucho a Angelica japonica, pero se las puede distinguir por su periodo de floración, el cual va de mayo a octubre, mientras que el periodo de floración de A. japonica's abarca de mayo a julio. Otro indicador es el color característico de su savia.[2]

Taxonomía[editar]

Su denominación hace honor a Keisuke Ito, un médico y botánico japonés de la era Meiji. El nombre japonés Angelica keiskei, "ashitaba", hace referencia a las cualidades de regeneración que presenta luego de haber sufrido un daño.

Cultivo[editar]

Hojas de Angelica keiskei

La ashitaba es una especie que abunda en los jardines y macetas en Japón. Ello se debe a que no requiere de condiciones especiales para su cultivo y crece con rapidez. Es una planta resistente al frío, sus temperaturas óptimas de cultivo se encuentran entre 12 y 22 °C. Al cortar una hoja por la mañana muchas veces a la mañana siguiente se puede observar el comienzo de un nuevo brote.

Usos[editar]

Gastronomía[editar]

El uso principal de sus tallos, hojas, y raíces es en la gastronomía. Se los utiliza para preparar soba, tempura, shōchū, té, helado, pasta, etc. La variedad 'Mikura-jima' es especialmente apreciada ya que es menos amarga que otras.[3]

Medicina[editar]

A partir de resultados obtenidos mediante estudios “in vitro” se ha sostenido que A. keiskei posee propiedades citotóxicas, antidiabéticas, antioxidantes, antiinflamatorias, antihipertensivas, y antimicrobianas, pero la eficacia de dichas cualidades no ha sido confirmada aún por estudios in vivo.[4]

Uso histórico[editar]

Tradicionalmente, se ha considerado que esta especie posee propiedades que mejoran la salud y extienden la vida de las personas que la consumen, posiblemente debido a los chalconoides que son un componente específico de estas especies de Angelica. Durante el período Edo, la savia amarilla del tallo se utilizó con efectividad en el tratamiento externo de la viruela, lo cual indujo a que Kaibara Ekken describiera la hierba en su Yamato honzō (大和本草), con el nombre de ashitagusa (鹹草), como una "poderosa droga tónica." La medicina tradicional japonesa sostiene que es un diurético, tónico, digestivo, y cuando se le aplica como tópico aumenta la velocidad de cicatrización de heridas y previene el desarrollo de infecciones.

Por razones similares, es ampliamente utilizada como pastura del ganado, afirmándose que mejora la calidad de la leche, su cantidad y la salud del ganado. Sin embargo ello no ha podido ser demostrado aún por ensayos, algunos estudios indican que varios de los compuestos de estas plantas poseen furocoumarinos. Se sabe que la furanocumarina aumenta la sensibilidad de la piel a los rayos del sol y puede causar dermatitis.

Fuente de vitamina B12[editar]

Si bien a menudo se ha indicado que A. keiskei es una fuente vegetal de vitamina B12 (cobalamina), las publicaciones recientes en revistas científicas con revisión de pares sobre investigaciones de farmacología y fitoquímica de sus constituyentes de interés no han podido determinar nada que avale dicha aseveración.[5][6]​ Los métodos tradicionales para medir la presencia de vitamina B12 en alimentos se ven afectados por contaminantes (tierra, bacterias, etc.) que contiene cantidades detectables de análogos inactivos de B12, lo cual explica el origen de esta aseveración.[7]​ Estudios más recientes indican que ciertos hongos y algas son las únicas fuentes naturales de B12 aparte del reino animal.[8]​ De estos, sólo el alga Chlorella ha demostrado tener la habilidad de reducir los niveles de ácido metilmalónico (MMA por sus siglas en inglés) (producto de la deficiencia de B12) en los seres humanos.[9]

Efectos sobre procesos de envejecimiento[editar]

Investigaciones realizadas sugieren que esta especie contiene un compuesto que podría retardar el envejecimiento. Los investigadores han identificado al flavonoide 4,4'-dimetoxicalcona (DMC), que describieron como un "compuesto natural con propiedades antienvejecimiento" en la planta. En un estudio[10]​ los investigadores han manifestado que desacelera el proceso de degeneración lo que podría ser un enfoque importante para abordar enfermedades relacionadas tales como la enfermedad cardíaca.[11]

En pruebas en células humanas, los científicos descubrieron que la DMC parece ralentizar la senescencia, el proceso por el cual las células dejan de dividirse y comienzan a crecer de forma permanente, que se ha relacionado con el cáncer. Las pruebas en animales también mostraron resultados prometedores. Cuando los científicos alimentaron gusanos y moscas de la fruta con el compuesto, su vida pareció extenderse en un 20 por ciento. También protegió los corazones de los ratones cuando se bloqueó el flujo de sangre. El equipo cree que DMC podría funcionar al desencadenar la autofagia, un proceso de reciclaje de las células en el que se eliminan las células dañadas.[11]

Referencias[editar]

  1. Ohwi, Jisaburo (1965). Flora of Japan. Smithsonian Institution. pp. 683-684. 
  2. «Information on Angelica japonica». Archivado desde el original el 26 de febrero de 2019. Consultado el 20 de febrero de 2019. 
  3. Mikura-jima variety
  4. Ceasar, L.K.; Cech, N.B. (11 de julio de 2016). «A Review of the Medicinal Uses and Pharmacology of Ashitaba». Planta Med 82: 1236-45. PMID 27399234. doi:10.1055/s-0042-110496. 
  5. Yao, Y.Z.; Li, S.H. (August 2015). «Chemical Constituents from Angelica keiskei». Zhong Yao Cai 38 (8): 1656-1660. PMID 26983239. 
  6. Correa, Camila R.; Chen, C-Y Oliver; Giancarlo, Aldini; Rasmussen, Helen; Ronchi, Carlos F.; Berchieri-Ronchi, Carolina; Cho, Soo-Muk; Blumberg, Jeffrey B. et al. (Oct 2014). «Bioavailability of plant pigment phytochemicals in Angelica keiskei in older adults: A pilot absorption kinetic study». Nutr. Res. Pract. 8 (5): 550-557. PMC 4198969. PMID 25324936. doi:10.4162/nrp.2014.8.5.550. 
  7. Norris, RD, Jack. «Measuring B12: Why the Confusion?». VeganHealth.org. Consultado el 22 de septiembre de 2016. 
  8. Watanabe, Fumio; Yabuta, Yukinori; Bito, Tomohiro; Teng, Fei (May 2014). «Vitamin B12-Containing Plant Food Sources for Vegetarians». Nutrients 6 (5): 1861-1873. PMC 4042564. PMID 24803097. doi:10.3390/nu6051861. 
  9. Norris, RD, Jack. «B12 in Plant Foods». VeganHealth.org. Archivado desde el original el 3 de noviembre de 2008. Consultado el 30 de diciembre de 2016. 
  10. The flavonoid 4,4′-dimethoxychalcone promotes autophagy-dependent longevity across species in Nature Communications
  11. a b Secret of longevity could be found in traditional Japanese plant that appears to slow aging in Newsweek

Enlaces externos[editar]