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Usuario:Naiara Ayestarán/Taller/Miguel Sanz y Benito

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Miguel Sanz y Benito (7 de Mayo de 1794-1864), fue un pintor nacido en Soria que acabó estudiando en Tudela, convirtiéndose así en el maestro de arte más caracterizado en la Pamplona del segundo tercio del Siglo XIX. Su obra es bastante breve, quedando constancia de aproximadamente 10 obras de un estilo que oscila entre el realismo y el romanticismo.

Biografía

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El pintor Miguel Sanz y Benito nació en la localidad soriana de Valdeavellano, el 7 de mayo de 1794. Estuvo casado con Francisca Tarazona, natural de Tudela, donde se asentó desde aproximadamente 1815. Fruto de dicho matrimonio nacieron sus hijos Francisco, Alejandra, Mariano, José e Ignacia. Los hijos varones siguieron la vocación artística de su padre y tuvieron puestos de relevancia dentro de la enseñanza de las Bellas Artes en Navarra durante el XIX, sobre todo su hijo Mariano, siendo su obra más importante el retrato de Isabel II para el Ayuntamiento de Pamplona. A Miguel Sanz y Benito hay que considerarlo navarro de adopción, puesto que vivió en esta Comunidad cincuenta años, desarrollando allí toda su carrera artística y docente.

Miguel Sanz se formó en la Academia de San Fernando de Madrid, con Mariano Salvador Maella. Establecido en Tudela, abrió una academia particular que alcanzó mucho reconocimiento, gracias a la cual en 1818, fue nombrado socio de la Real Sociedad Tudelana de Amigos del País. Permaneció en Tudela hasta 1822, cuando se trasladó a Pamplona. En la capital navarra abrió al público la Escuela de dibujo del Ayuntamiento de Pamplona, puesta en marcha en el curso 1827-28. En febrero del año 1828 se le nombra profesor de la misma, pero se cerró en 1838. En el año 1840 se reabre la institución con el nuevo nombre de Academia de dibujo. Miguel Sanz y Benito continuó desempeñando el puesto de profesor y director de dicha Academia hasta 1863, cuando se jubiló. Le sucedió el cargo uno de sus hijos, Mariano Sanz y Tarazona, que ocupará el puesto hasta la clausura de la escuela. Un año después de su jubilación, Miguel Sanz y Benito fallecía en Pamplona a la edad de 70 años.

Obra

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Miguel Sanz y Benito fue el maestro de arte más caracterizado en la Pamplona del segundo tercio del Siglo XIX. Desde los inicios de la Escuela de Dibujo, se puede apreciar que existe una clara tendencia hacia el dibujo artístico, la anatomía y la figura humana. Sobre ello puede verse un artículo de José Javier Azanza y Mikel Sanz Tirapu, donde aparece abundante información del método de enseñanza que practicaba, a través de una “cartilla” de enseñanza que se ha conservado. Como dice el citado artículo, el propósito de esta escuela era “enseñar el dibujo desde sus rudimentos hasta copiar el modelo antiguo de estatua; el de arquitectura y adorno con los ligeros principios de ésta y geometría necesarias en esta clase de delineación; y el colorido”. Para desarrollar estos objetivos, planteaba la enseñanza en tres niveles o salas: Una primera sala de dibujo desde ojos hasta cabeza; una segunda de figuras, dibujo de arquitecturas y adorno; y una tercera sala de yeso y colorido. Los métodos de enseñanza en la citada escuela se basaban en la copia de modelos, normalmente láminas.

En 1842 se creaba en Pamplona el Instituto Provincial. A partir del curso 1859-60 el propio Miguel Sanz y Benito comienza a impartir lecciones de Dibujo, aunque fuera de manera extra académica. Su labor permanece hasta el curso 1863-1864, cuando fue sustituido por su hijo Mariano Sanz y Tarazona, con quien la asignatura pasó a llamarse Dibujo de figura y paisaje. De su importancia en Pamplona hablan los encargos que le fue haciendo el Ayuntamiento de la ciudad; con motivo de la visita de los reyes Fernando VI y María Josefa Amalia de Sajonia.

  • En 1828, se erigió un magnífico arco triunfal a la entrada de la Plaza del Castillo, decorado con pinturas de Miguel Sanz.
  • En 1841 fue comisionado para realizar un informe sobre las labores de decoración del interior del Teatro Principal de Pamplona, que ejecutaba el pintor Andrés Lavilla.
  • En 1848 fue el encargado de plantear y proyectar la restauración de la imagen de  la Virgen de Nuestra Señora del Camino.

Por estos años en Pamplona debió de ser también uno de los pioneros de la fotografía en nuestra Comunidad. De él se conservan algunos daguerrotipos, como el guardado en la colección Fernández Rivero.

Durante toda su vida estuvo Miguel Sanz y Benito ligado a la pintura. Alternando con su trabajo de enseñanza de la Bellas Artes ejerció una destacada labor como pintor. Entre sus obras conocidas actualmente podemos enumerar:

  • Dos cuadros conservados en Ayuntamiento de Pamplona:
  • Bombardeo del general O´Donnell (1845).
  • Procesión del Corpus Christi (1849).
  • Retrato de San Fermín (1849) en una parroquia de Irañeta.
  • Un dibujo con un árbol genealógico de los Reyes de Navarra de 1835, conservado en el archivo de Navarra.
  • Retrato femenino, elaborado como una miniatura con gusto y oficio, muy al estilo académico decimonónico, colorista y que demuestra el dominio que el autor tenía del dibujo y la propia técnica. Es un retrato de Señorita (c. 1850), de la colección Muruzábal.
  • Blasón de Tudela. Ayto. de Tudela.
  • Retrato de Manuel Castel Ruiz. Ayto. de Tudela.
  • San Fermín. Colección Particular (documentado por Azanza).
  • Martirio de San Fermín. Colección Huarte.
  • Retrato en daguerrotipo. Colección particular
  • Cartilla para la enseñanza. Colección particular (documentada Azanza).


Este conjunto de obras resulta de gran interés para documentar la pintura que se hacía en Navarra en aquella época. Estamos ante obras herederas de la pintura de historia, religiosa y retratística imperante en España en buena parte del Siglo XIX. En estas obras, Miguel Sanz demuestra ser un artista muy apegado a la tradición, basando sus obras en composiciones muy estudiadas y un dibujo serio y profundo. Estos cuadros resultan sumamente interesantes por la iconografía, y por el valor histórico y documental que poseen para nuestra Comunidad. Con todo, parece tratarse de un pintor con oficio, pero de calidad más o menos discreta. Sería deseable que, sobre su figura y obra, se abordarse un estudio riguroso, acompañado de una exposición antológica, que pudiera mostrar su auténtica valía como artista. Este sería el reto para empezar a recuperar a alguno de nuestros olvidados artistas.

Bibliografía

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  • Sanz Tirapu, M. y Azanza López, J. J. "Aproximación al método de enseñanza en escuela de dibujo de Pamplona: la Cartilla de Miguel Sanz y Benito", en Anuario del departamento de historia y teoría del arte, Universidad Autónoma de Madrid, año 2002, nº 14, pg. 231-273.
  • Guijarro Salvador, p. La enseñanza del dibujo en Tudela durante el Siglo XIX, en Príncipe de Viana, 246 (2009), pg. 67 a 104