Usuario:LuisNugno/Taller

Torre Genoveva o antigua Torre Ezmir

Es un estimable ejemplo de edificio medio campestre y medio residencial, que proliferaron en las huertas zaragozanas, y este especialmente por el papel desempeñado en los Sitios de 1808. Se encuentra a la entrada de Juslibol, bien ostensible por su manifiesta verticalidad y su longevo Cupressus Sempervivens, de 28 m. de altura y de unos 370 años (edad de la Torre), catalogado por el Ayuntamiento y la D.G.A., entre los árboles monumentales de la Ciudad y de Aragón.

Arquitectura La Torre se levantan justamente en el lindero de la huerta, con espléndida visibilidad sobre el valle del Ebro, y rodeada a modo de foso por la acequia del Rabal, estando tapiada en su parte lindante a la carretera. Se accede al edificio a través de un portón o entrada adintelada, que se abre a la plazoleta situada delante de la fachada principal. Es una casa de campo de planta rectangular y compacta, de muros de carga y pilares de fábrica de ladrillo, reforzados en su principio con tensores que el tiempo hizo insuficientes, y ahora sujetados con una estructura metálica emparrillada bajo forjados. Bajo cubierta a dos aguas o vertientes este-oeste, se compone de bodega y tres plantas; baja con patio, despensa y servicios, principal con salón y dormitorios, y graneros con buardílla. La fachada ofrece noble aspecto, con balcones en la planta principal, y una galería de huecos adintelados, en la planta superior o granero. Su entrada principal al patio o zaguán, es una portada semicircular bajo rosca de ladrillo a sardinel, conservando el patio el forjado de vigas molduradas vistas y bovedillas de revoltón, al igual que el salón y hall de la planta principal; siendo también de resaltar en su interior, la escalera y baranda original de madera. Historia La torre es un edificio catalogado en el Archivo Municipal por su interés arquitectónico. El informe histórico artístico, basado en un estudio de María Isabel Oliván Jarque, nos informa que la vivienda aparece documentada desde el año 1639, siendo entonces propiedad de D. Victorián Esmir y Casañate, señor de Torregrosa y gobernador de Chile. Parece ser pues, que junto a las casas del Arzobispo Cebrián mandada construir en 1644 al final del Pueblo, son los dos edificios más antiguos del pueblo de Juslibol. En 1774 era propiedad de D. Ignacio Esmir Cavero, en cuyo año la Santa Sede le concede permiso para el culto en el oratorio que D. Victorián había ya construido en la Torre; siendo diez años después 1784, cuando el vicario Juan Marco Latassa termina la Iglesia del Pueblo. El linaje de los Esmir perduraba, cuando a mediados del S. XIX era restaurada por Manuel Esmir y Garcés de Marcilla, sustituyendo la imagen de la Virgen destrozada por los franceses en el saqueo de los Sitios (1808), por la actual esculpida en 1851. Los Esmir, tenían casa solariega en la plaza de San Bruno, frente a la casa del Deán y la de Lazán, donde por cierto nació Palafox, y siendo demolida hacia la mitad del S. XX. A principios del S. XX fue adquirida la Torre por el Secretario Judicial D. Fernando García Barsaga, casado con Dña. Genoveva Santandréu Herrando, siendo rebautizada como Torre Genoveva en honor de su esposa. Fue heredada en 1/3 por su hija Dña. Mª Pilar García Santandréu casada con Francisco Avilés Estero, y comprado a sus dos hermanos Fernando y Pascual los otros 2/3, siendo disfrutada durante años como residencia de verano junto a su hija Julia Mª Avilés García (después monja). Para su rentabilidad, Dña. Mª Pilar alquiló sus adjuntas dependencias a varias familias, donde vivían y a su vez usaban como secadero de embutidos en los graneros y bodega; invernadero floral y hortofrutícola en el jardín, algo de ganadería en las cuadras y corrales, además del cultivo y explotación de los huertos adjuntos a la Torre. En 1989 y en un estado deplorable que amenazaba ruina, fue adquirida por Luis Nuño Cólera, boticario enamorado de la Naturaleza, lo Rural y la Historia, que apoyado y ayudado por su mujer y compañera Carmen Llacer Cots, y tras casi 20 años de muchas vicisitudes y esfuerzos, han podido en este segundo centenario de Los Sitios de Zaragoza, terminar de restaurarla y en su medida ennoblecerla para disfrute de cuantos más mejor.

   	“Deus lo Bol”. “Dios lo Quiere”.  Juslibol   21 Junio 2008  

CITAS HISTÓRICAS Uno de los lugares citados durante los Sitios de Zaragoza por diversos cronistas, es la Torre de Ezmir. Faustino Casamayor la nombra el día 11 de julio de 1808 durante las acciones de tendido del puente francés: El general Palafox salió inmediatamente al Arrabal a animar gentes, y mandó conducir la artillería a la torre llamada de Ezmir, desde cuya altura podía incomodar mucho a los enemigos y dio otras providencias para el resguardo de dichos terrenos, haciendo ir tropas a Juslibol si fuese necesario. Análogamente Alcaide la cita varias veces al relatar los sucesos de esos días. Luego que comenzó la acción, don Francisco Palafox que acababa de llegar con su primer tercio, fue a reforzar el punto de Ranillas, e hizo conducir por la horca de Ganaderos un obús y dos cañones de a ocho, que situó en el alto de la torre de Ezmir, enfilando los fuegos al paso de los barcos. El choque continuó con tesón, y por la tarde fue el general Palafox con el brigadier don Antonio Torres, el inspector don José Obispo y otros varios a la torre de Ezmir, y observando que el punto de Ranillas iba a ser ocupado por los franceses, se retiraron, y encargaron a los paisanos del Arrabal y Juslibol procurasen cortar por la noche las acequias e inundar los campos, como lo ejecutaron con la mayor exactitud. A la mañana siguiente volvió a trabarse el choque. Colocaron las tres piezas indicadas en la torre de Ezmir, y viendo que los cañones de a ocho no alcanzaban al vado, habiéndose presentado al mediodía don Francisco en aquel punto, le pidieron remitiese uno de a doce; pero todo fue infructuoso por cuanto el enemigo con cautela hizo pasar el vado por frente a la tejería de Almozara, a una porción de caballería, llevando cada uno a un infante en la grupa. A este tiempo se le dio aviso a la torre de Ezmir, de que detrás de las alturas de San Gregorio se divisaban tropas enemigas, pues la división francesa Gazán había cruzado el Ebro por Tauste, y estaba bajando por Castejón y Zuera, aproximándose a San Gregorio para tomar el Arrabal y cerrar el cerco. Como consecuencia del fracasado ataque de la División Gazán al Arrabal (noche del 20 al 21 de diciembre se 1808), defendida heroicamente al mando de D. José Maria Manso, se provocó por parte de los franceses que buscaban refugio tras el descalabro la ocupación de Juslibol; siendo entonces ocupada Torre Ezmir y convertida en Cuartel General del mando francés por el general Charles Lefevre-Desnouttes. Siendo entonces cuando la imagen de la Virgen de la fachada fue destruida, ya que la actual data como dijimos de 1851. Las fuentes francesas nos describen, a partir del 25 de diciembre, el parte de novedades que diariamente tenía lugar a las 8 de la noche mediante el movimiento de un farol. Desde la Torre Nueva el vigía español podía confirmar la totalidad del bloqueo, ya que las luces de los franceses rodeaban a la ciudad: Bernardona – Ranillas - Torre de Ezmir -Soto de Mezquita - Molino del Pilar - Torre del Arzobispo - Puente del Gállego - Molino del Mosnillo… El cerco de la ciudad estaba terminado.