Usuario:DaniUbu/Taller

El colegio público Padre Manjón es un colegio que se encuentra en Castilla y León, más concretamente en la provincia de Burgos destinado a la enseñanza pública primaria. Se terminó de construir en 1954, pero no se inauguró hasta 1956 de manos de Florentino Díaz Reig.

Historia

Memoria del lugar

El lugar en que se ubica el Colegio actual está situado en uno de los lados de un cuadrado casi perfecto que forman, por una parte las vías del ferrocarril, por el lado paralelo la calle Salas, cuya mitad ocupa el edifico actual, y los lados perpendiculares quedarían establecidos de un lado por la calle Madrid y por la calle San Julián, del otro. Los vértices vendrían determinados por dos fuentes: la de "La Terraza", del nombre de un bar existente en la rotonda actual; y la fuente de "San Julián", en la confluencia con la calle del Camino Mirabueno. Los otros dos vértices serían los pasos a nivel: de San Julián y de la Calle Madrid.

La vía del ferrocarril era la "frontera" de muchas cosas. Se hablaba "de vías para allá" y "de vías para acá", dos territorios distintos, aunque nada distantes. En esa frontera dos "pasos a nivel": el de San Julián​ y el de la calle Madrid. Entre éstos, con mucha frecuencia, un tren detenido acentuaba la sensación de separación, y a la vez obligaba a utilizar como pasillo los laterales de la vía, o, incluso, subir por los vagones para poder cruzar al otro lado cuando la espera se hacía insostenible.

En los años cincuenta, cuando los trenes funcionaban a vapor, con el encanto y el suplicio consiguientes; cuando el paso de la calle de Madrid era el paso de "La Bombilla", nombre de un bar muy cercano a la vía; la calle Madrid era la única de la zona que estaba adoquinada, pues era, junto con la calle Vitoria, Santander, y Valladolid las entradas y salidas principales de Burgos. En esta calle no había muchas cosas: a continuación de "La Bombilla" sólo estaba el Laboratorio Municipal y una tapia que recorría toda la calle de la Alhóngiga que entonces solo era eso: alhóndiga, o sea, almacenes municipales. El lado opuesto lo ocupaba el Hospital Provincial y la Escuela de Comercio. Y por el centro, adoquinado, el grueso de la circulación que procedía o se dirigía a Madrid.

La calle de San Julián eran entonces, probablemente, más transitada que la calle Madrid: las "barriadas" existentes desaguaban sus habitantes a todas horas, bien fuera para acudir al trabajo, bien a la compra. A la izquierda, según cruzamos el paso a nivel hacia el colegio, hubo siempre un taller de carrocería, a continuación un pequeño cuartel de automovilismo y la huerta de la señora Fernanda, donde ahora está el aparcamiento subterráneo. La acera de la derecha estaba ocupada por unas pocas viejas casas de viviendas en las que destacaba la tienda de ultrmarinos del señor Justo, la lechería de la señora Juliana y la taberna de la esquina, frente a la fuente.

El largo nacimiento oficial

Fachada del colegio público Padre Manjón en la actualidad

Ya en el año 1945, la Corporación Municipal prevé el crecimiento imparable de la zona y la necesidad de un centro educativo. Debido a esto, se acuerda la construcción de un grupo escolar el 7 de marzo de 1945; y el alcalde D. Carlos Quintana Palacios solicita al Director General de Enseñanza Primaria la creación de un grupo. Solicitud aprobada el 7 de diciembre de ese año.

Luego vino el proceso largo y tedioso de la ejecución. Se encarga del proyecto el arquitecto burgalés D. Marcos Rico y se subasta la construcción del mismo, pero quedó desierta; se anunció una nueva subasta que volvió a dar el mismo resultado. La Corporación municipal se hizo cargo de la construcción con la fórmula de administración por destajo, pero no sólo no adquiría un ritmo conveniente, sino que la demora hacía mayores los gastos y el deterioro era evidente, porque cuando llega mayo de 1954 el Ayuntamiento en un dictamen el 8 de mayo pone de manifiesto que se prodijo la paralización en la obre sin llegar a cubrir el edificio, debido a los aumentos de materiales y salarios.

Se hizo un proyecto parcial para evitar los daños que la falta de cubierta produjera en las obras en curso y se dedica atención a esta partida; pero el Municipio se queja. Generosamente la Caja de Ahorros Municipal se ofrece a patrocinar las obras, se aprueba el proyecto, puesto al día, del arquitecto Marcos Rico,​ y se vuelven a subastar las obras; ahora ya a mejor ritmo, porque en febrero de 1955, próximo a terminarse se aprueba por el Ayuntamiento la creación de "doce grados" que se instalarán en el grupo escolar de la calle Salas. A continuación se solicita ayuda al Estado.

Ese año 1954 parece que termina el calvario de la construcción. Pero la recepción definitiva de las obras se produce el 11 de abril de 1956 en que el regidor D. Florentino Díaz Reig, en nombre de la Corporación se hizo cargo de las referidas obras e instalaciones.

El grupo

Este ansiado proyecto de tan larga gestación, aún tiene que esperar para su funcionamiento. Hay varias subastas para dotación de mobiliario, pero la ciudad está en plena ebullición de Centros escolares y el Ayuntamiento no puede atender a todos a la vez. La Inspección Provincial urge para que se resuelva el problema, cada vez más acuciante, de la escolarización en una zona que está creciendo con pujanza, y en marzo de 1956 pide a Madrid la creación definitiva de las Escuelas.

El 20 de marzo de 1956 se reúnen las Inspectora Jefe D.ª Concepción Salvador Aldea y el Alcalde don Florentino Díaz Reig en relación con el Grupo Escolar de niñas con seis secciones, una de ellas de párvulos, y Directora sin grado en la calle Salas del casco de esta capital creado provisionalmente por Orden Ministerial el 25 de marzo de 1955, y después de oír el informe de Jefe de Sanidad y del Arquitecto Provincial, el Ayuntamiento de compromete a asegurar el alojamiento de las maestras que se nombren. La Inspectora hizo constar que el Grupo Escolar de que se tarta reúne condiciones pedagógicas excelentes y que el material y mobiliario adquiridos son suficientes.

El 23 de marzo de 1956. En un acta fechada en este día se lee: "El Inspector de Enseñanza Primaria visitó en Grupo Escolar de la calle Salas. Venía decidido a abrir las Escuelas (sección de niñas) con el material existente en el mismo de las Colonias Escolares, y después de haberle dado a concoer el interés que el Ayuntamiento tenía de crear Patronato, se puedo conseguir que se aplazase su idea".

Luego de un cambio de impresiones se acordó -otra vez- crear el tan traído y llevado Patronato, de lo cual se dio cuenta a la Caja de Ahorros Municipal que colaborara económicamente. Pero las cosas de palacio, van despacio, además parece que existió una cierta descoordinación entre las administraciones. Porque en un informe a la alcaldía el concejal pertinente explica: que en los primeros días de octubre llamó a esra Sección la Inspectora Jefe de Enseñanza Primaria indicando que quería que diesen comienzo las clases de la calle Salas inmediatamente, por lo menos el Grupo de Niñas, contestándosele que el Jefe de Sección se encontraba fuera de vacaciones.

Esto, naturalmente, suena a obstáculo premeditado. La Inspección seguía presionando y envió a alguien para que asumiera provisionalmente la dirección del citado Grupo. Se la advirtió que hasta primeros de noviembre no hiciese nada, ya que para esas fechas estaría próximo a llegar el material escolar por haberse celebrado unos días antes la subasta y quedó en convencer a la Inspectora Jefe, que es quien tenía gran interés en abrir rápidamente las escuelas.

Cincuenta años no es nada

Por fin, el Colegio echa a andar. El Grupo Escolar de la calle Salas, así se llamaba, estaba formado por cinco grados de niños, cinco grados de niñas más dos de párvulos, con sus dotaciones correspondientes, así como director y directora sin grado. En realidad, son dos Grupos.

Los maestros, que finalmente han sido nombrados provisionalmente, se reúnen en los despachos de los respectivos directores, reparten los grados y reciben las instrucciones pertinentes para iniciar el curso 1957-58.

Lo primero que resalta, aunque parezca raro en estos días, es que eran en la práctica dos escuelas: la parte izquierda del edifico, la más cercana a Calderón de la Barca, era de niñas, mientras que la derecha era de los niños.

También ha variado ligeramente el proyecto original: el arquitecto había previsto que la tercera planta fuese abierta y dedicada a patio de recreo "para que los niños estuvieran protegidos de las inclemencias del tiempo" decía en su proyecto original; sin embargo introdujo algunas modificaciones de última hora entre las que me parece reseñable la conversión del piso superior en Salón de Actos, o, más bien de usos múltiples.

El primer director del Grupo de niños se llamaba D. Teodoro Morquillas. Fue nombrado de forma provisional, el primer año de funcionamiento y fue el encargado de poner en marcha el Grupo de niños, para lo que contó con cinco maestros, nombrados también provisionalmente, para el primer curso de funcionamiento. Reunió en su despacho a estos el 4 de junio de 1957 y comenzó a "echar a andar": asignando los distintos grados y dando las instrucciones pertinentes para la matriculación y otros asuntos de urgencia, así como el anuncio, en septiembre, de "exámenes para la obtención del Certificado de Estudios Primarios a partir del curso actual".

Mientras tanto, el Grupo de las niñas, por su lado, debía llevar algún camino andado porque, aunque la primera reunión reflejada en acta es del 17 de septiembre de 1957, su directora Dª. Lucila Martínez Acitores convoca a sus maestras y les hace saber de manera tajante que en los primeros días de curso ha quedado cubierta a la matrícula en todos los grados. Añade, además, que hay gran número de párvulos que no pueden ser admitidos por la falta de local.

Probablemente la ventaja del Grupo de niñas se debía a la reiterada utilización de una parte del edifico como sede de estas Colonias, que durante un mes de verano eran ocupadas por niñas procedentes de otras escuelas, probablemente de Cataluña, porque en mis recuerdos entra aquello de "ya han venido las catalanas", referido a las niñas que ocupaban el colegio.

Las niñas, cuando el colegio no era mixto, llevaban su bata blanca y su chalina verde. La directora instaba para que siempre fuesen impecables. Por otra parte los niños recuerdan lo "rectos" que eran algunos maestros con ellos en aquella época haciendo memoria de aquella época.

Así pues, todo son recuerdos para los sucesos extraordinarios. Pero, ¿lo común? ¿el día a día?. Eso parece que se da por hecho; cuesta más recordarlo. Como un río que fluye sin parar y sólo se delata en los inopinados desniveles. Esta puede ser la imagen del colegio: ríos de vidas que fluyen constantemente, el agua de los niños que pasan. Y así durante cincuenta años y los vendrán...

Objetivos prioritarios

• Que el alumnado de Educ. Infantil alcance el desarrollo físico, intelectual, afectivo, social y moral propio de los niños de esta etapa.
• Facilitar al alumnado de EPO los aprendizajes de la expresión y comprensión oral, la lectura, la escritura, el cálculo, y la adquisición de nociones generales de cultura y hábitos de convivencia, estudio y trabajo.
• Que todos los niños y niñas asuman como propios los valores de una sana y democrática convivencia en paz y los que le lleven al conocimiento y respeto del patrimonio histórico, cultural y ecológico en el que está inmerso.

Compromisos del centro

• Potenciar un buen clima de convivencia, colaboración y participación entre todos los sectores de la Comunidad Educativa.
• Preparar a nuestros alumnos para integrarse con buenas posibilidades de éxito en la siguiente etapa educativa.
• Contribuir a que nuestros alumnos adquieran valores sociales e individuales que les faciliten su integración en la sociedad con espíritu crítico y actitud positiva.
• Potenciar los hábitos de lectura y familiarizar al alumno con el uso de las bibliotecas escolares y públicas.
• Fomentar el conocimiento y uso de las Nuevas Tecnologías de la Información.
• Facilitar al alumno técnicas de trabajo individual (técnicas de estudio) adecuadas a su grado de madurez.
• Información a las familias puntual y transparente.
• Gestión administrativa sencilla y eficaz.
• Publicación de los resultados de las encuestas.
• Buzón de sugerencias permanentemente abierto.
• Construir una comunidad educativa abierta al exterior.
• Ofertar un plan de actividades complementarias, conmemorativas y extraescolares que enriquezcan la formación del alumno.
• Atención a la diversidad

Fuentes

Referencias

• 1. Documentos oficiales colegio público Padre Manjón
• 2. Revista informativa del colegio público Padre Manjón
• 3. Libros de actas de constitución del centro escolar
• 4. Página web del colegio público Padre Manjón

Enlaces externos

• Página web del colegio público Padre Manjón