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Oración de la Sagrada Llaga en el hombro de Jesús

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La Oración de la Santa Herida al Hombro de Jesús fue compuesta por San Bernardo de Claraval.

Historia

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En la oración, el santo preguntó a Jesús cuál había sido el mayor dolor que había sufrido en su cuerpo durante su Pasión, y recibió esta respuesta[1]​:

Tenía una llaga en el hombro, de tres dedos de profundidad, y tres huesos descubiertos para llevar la cruz. Esta llaga me dio mayor dolor y pena que todas las demás y no es conocida por los hombres. Pero fue revelada a los fieles cristianos y sepan que cualquier gracia que me pidan en virtud de esta herida les será concedida, y a todos aquellos que por amor a ella me honren con tres Padre Nuestro, Ave María y Gloria al Padre al día, les perdonaré los pecados veniales, no me acordaré más de los mortales y no morirán de muerte súbita y a punto de morir serán visitados por la Santísima Virgen y alcanzarán aún la gracia y la misericordia.[2]

Oración

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La oración compuesta es la siguiente:

Amado Señor Jesucristo, mansísimo Cordero de Dios, yo, pobre pecador, adoro y venero tu Santísima Herida, que recibiste en tu hombro al llevar al Calvario la pesadísima Cruz en la que se descubrieron tres sacratísimos Huesos, soportando en ella inmensos dolores: Te suplico que, en virtud y por los méritos de dicha Herida, te apiades de mí perdonándome todos mis pecados, tanto mortales como veniales, y me asistas en la hora de mi muerte, y me conduzcas a tu bendito Reino. Amén.

Luego se reza tres veces la siguiente secuencia de oraciones: Padre Nuestro, Ave María, Gloria al Padre.[2]

Revelaciones del Padre Pío

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El Padre Pío también veneraba la Santa Herida en el hombro de Jesús y la sufrió en su propio cuerpo como un estigma.[3]​ Según Stefano Campanella, autor de El Papa y el Fraile[4]​ El papa Juan Pablo II visitó al Padre Pío cuando era sacerdote y le preguntó qué herida era la más dolorosa. El padre Wojtyla esperaba que fueran los estigmas de su lado. Pero el santo respondió: Es mi herida en el hombro, que nadie conoce y nunca ha sido tratada.

Referencias

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  1. «Gesù a San Bernardo: ‘Ogni grazia concederò per la piaga della mia spalla’». Consultado el 01 giugno 2020. 
  2. a b Suor Maria Gabriella Turrin dell'Annunciazione. «"Pregate, pregate, pregate"». En Editrice Shalom, ed. Preghiere tradizionali e bibliche (Imprimatur del 07.05.2007. Arcivescovo di Ancona-Osimo, S.E. Mons. Edoardo Menichelli). p. 122. ISBN 9788886616003. 
  3. «San Pio e la piaga alla spalla». Consultado el 01 giugno 2020. 
  4. Stefano Campanella (2005). Edizioni Padre Pio da Pietrelcina, ed. Il papa e il frate. ISBN 978-88-499-00-637.