Eugenio (emperador)

Flavius Eugenius (¿345? - 6 de septiembre de 394) fue un usurpador romano (392-394) contra el emperador Teodosio I. Representó el último resurgir de la tradición pagana contra el cristianismo que prevalecía como fe oficial del Estado.

Vida

Aunque anteriormente había sido profesor de gramática y retórico, así como magister scrinorum, Eugenio conocía del magister militum y gobernante de facto del Imperio Romano de Occidente, Arbogastes.

Ascenso al poder

Después de la muerte de Valentiniano II, Arbogastes, que había sido probablemente el causante del asesinato o suicidio de Valentiniano, elevó a Eugenio a la púrpura el 22 de agosto de 392. La elección de Eugenio ofrecía a Arbogastes dos grandes ventajas: Eugenio, un romano, era más conveniente que Arbogastes, un franco, como emperador; además, el Senado romano habría sido más proclive a apoyar a Eugenio que a Arbogastes.

Política administrativa, militar y religiosa

Tras su elección, Eugenio cambió a funcionarios imperiales. Cuando Teodosio había dejado la mitad occidental del imperio a Valentiniano II, había puesto a sus propios hombres en los cargos civiles más altos, para guardar un control fuerte sobre imperio entero. Eugenio substituyó a estos administradores por otros leales, procedentes en su mayoría de la clase senatorial. Nicómaco Flaviano el anciano se convirtió en Prefecto Pretorio de Italia, su hijo Nicómaco Flaviano el joven recibió el título de Prefecto de Roma, mientras que el nuevo praefectus annonae fue Numerio Proiectus.

Eugenio era nominalmente cristiano, y por lo tanto era renuente a aceptar un programa de ayuda imperial al paganismo. Sus hombres, sin embargo, lo convencieron para que utilizara el dinero público para financiar proyectos paganos, tales como la reedeficación del templo de Venus y Roma y la restauración del Altar de la Victoria en la sede del Senado. Esta política religiosa provocó tensión con Teodosio I y el poderoso e influyente obispo de Milán, Ambrosio.

Eugenio fue acertado en el campo militar, con la renovación de viejas alianzas con los alamanes y francos. Arbogastes, que era franco y tenía también alamanes y soldados francos en sus filas, marchó a la frontera del Rin, donde impresionó y pacificó a las tribus germánicas haciendo desfilar su ejército delante de ellas.

Caída de Eugenio

Cuando le eligieron emperador, Eugenio envió embajadores a la corte de Teodosio, pidiendo el reconocimiento de su elección. Teodosio, los recibió, pero comenzó a reclutar a tropas para derrotar a Eugenio. También promovió a su hijo Honorio de dos años de edad a Augusto del oeste en enero de 393.

Teodosio se dirigió desde Constantinopla con su ejército, y venció a Eugenio y a Arbogastes en la batalla del Frígido (en la moderna frontera de Italia-Eslovenia) el 6 de septiembre de 394. La sangrienta batalla duró dos días, y fue marcada por acontecimientos astronómicos y meteorológicos inusuales, pero Teodosio ganó in extremis. Arbogastes se suicidó inmediatamente después de la derrota, mientras que Eugenio fue capturado y ejecutado como criminal. Su cabeza fue exhibida.

Legado

El reinado de Eugenio marcó el final de una era y el principio de una nueva. Un año después Teodosio murió, dividiendo su imperio entre sus dos hijos, Honorio y Arcadio. Esto había sucedido muchas veces antes en los dos siglos anteriores, pero este vez que fue definitiva, el imperio romano nunca se reunificó, y la mitad occidental pronto cayó. Eugenio también representó la última oportunidad para que los paganos y la clase senatorial se opusieran a la cristianización del imperio. La batalla del Frígido fue el paradigma de una tendencia ascendente en usar tropas bárbaras, especialmente en el oeste, donde condujo al debilitamiento del imperio mismo.

Enlaces externos

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Genealogía de los emperadores romanos (Dinastía Teodosiana 379-457 a. C.)

Datos: Q313058
Multimedia: Flavius Eugenius / Q313058