Batalla de Beotíbar

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La batalla de Beotíbar (19 de septiembre de 1321) fue una confrontación armada entre tropas guipuzcoanas, del Reino de Castilla, frente un numeroso ejécito navarro en las proximidades de Tolosa en la localidad denomimando Beotíbar. En la tradición de la épica guipuzcoana el triunfo en esta sangrienta batalla estaría en paragón a la batalla de Roncesvalles para Navarra o la batalla de Covadonga para Asturias.

Contexto histórico: la frontera de los malhechores

Desde de la conquista castellana del Duranguesado, de Álava y de Guipúzcoa en 1199-1200 se empezó a gestarse la llamada en las crónicas como "frontera de los malfechores".[1]​ Desde entonces, hasta mediados del siglo XIII se continuó una nueva ordenación de este territorio de la frontera, por parte de los reyes castellanos, dotando a varias localidades situadas en la misma de fueros al mismo tiempo que se levantaron varios castillos. Por contra, en el lado navarro no se observa esfuerzo similar al castellano.[2]​ Desde tan tempranas fechas[3]​ afloran los delitos en la frontera constituidos por el robo de ganado, asaltos a arrieros y apresamientos con rescate.

Entre 1280-1350 proliferan las expediciones de saqueo y campañas de represión obligando a nombrar hasta dos merinos en la merindad de la Montaña (Pamplona) ante la necesidad de afrontar un problema tan exigente, llegando a ser eliminados los merinos como resultado de algunos de los enfrentamientos. Las acciones de pillaje, que incluían agresiones violentas e incluso asesinatos, crearon un clima de temor, de miedo, en las comarcas afectadas más frecuentemente por tales depredaciones. En ocasiones los ataques de los guipuzcoanos contra los navarros eran incluso legales. Esto se producía cuando estallaban las guerras entre los reinos de Castilla y Navarra, como sucedió en 1335 al asaltar los Lazcano y los Oñaz los castillos de Ataun y de Ausa. A uno y otro lado se dieron varias batallas que ganaron alternativamente unos y otros sin solucionar una guerra continuada y basada en este endémico problema que se mantuvo hasta el siglo XIV.[4][5][6]

Descripción del encuentro

Los guipuzcoanos oñacinos habían ocupado el castillo de Gorriti en 1321. En respuesta, el entonces gobernador de Navarra, Pons de Mortagne, vizconde de Aulnay, organizó una importante operación con la finalidad recuperarlo y, al mismo tiempo, proporcionar un escarmiento a los guipuzcoanos “malfechores”. En esta expedición, además de una numerosa hueste que iba encabezada por el merino de la Montaña, Juan López de Urroz, y el merino de Estella, Dru de Saint Pol, junto al alférez real, Martín de Aibar acompañado de su hijo, Martín de Eusa. Respecto al contigente armado, el merino de Pamplona movilizó a su compañía de 10 hombres a caballo y 160 peones, contando con el refuerzo de 6 caballeros de la tierra junto con 220 efectivos; por su parte el merino de Estella, acudió con 9 jinetes y 55 peones. A ello se añadieron mesnadas de varios ricoshombres y gentes de concejos.

Tras recuperar el castillo de Gorriti, la expedición navarra remontó los puertos de Urto y San Antón y, ya en tierras guipuzcoanas, incendió el lugar de Berástegui. Se disponía a desembocar en el valle de Oria cuando fue sorprendida en el desfiladero de Beotíbar por los hombres de Gil López de Oñaz, descalabro le ocasionaron un gran descalabro (1321, septiembre). Perecieron en el desastre el alférez del reino (Martín de Aibar) y dos de sus hijos, así como los merinos de las Montañas y de Estella, junto con otros muchos navarros y franceses.

Consecuencias

El impacto de la derrota navarra en Beotíbar fue tan relevante que varias buenas villas navarras pleitearon contra el gobernador francés, Pons de Mortagne, por la supuesta negligencia en la conducción de dicha incursión en Guipúzcoa. En el enfrentamiento, entre otros muchos, perdieron la vida el alférez real y su hijo, los dos merinos, y el hijo de Enrique I de Navarra, Juan Enríquez de Lacarra, padre de Martín Enríquez de Lacarra.[7]

Así hablaba en vascuence el llamado Cantar de Beotíbar,[8][9]​ conservado por Esteban de Garibay:

"Mila urte ygarota

Vra vere videan.
Guipuzcoarroc sartu dira
Gazteluco echean,
Nafarroquin batu dira

Beotibarren pelean.”
“Pasados mil años

el agua sigue su curso.
Los guipuzcoanos han entrado
en la casa de Gaztelu,
con los navarros se han topado

en la batalla de Beotíbar.”

Este texto, según afirma Luis Michelena, sería mucho más reciente a los acontecimientos de 1321 ya que “quipuzcoar” fue un voz utilizada posteriormente siendo común su uso en los tiempos en los que escribía Garibay.[9]

Cada año, el día de San Juan en Tolosa se baila la “Bordon-dantza” o “pordondantza” conmemorando esta batalla. Según el Padre Donostia, es similar a una ezpatandantza, aunque se ejecuta con largas pértigas.

Referencias

  1. «Nos requieron que como una bastida sea en la tierra de Araynas en la frontera de los malfechores, que es clamada Echerri, e la devantdicha poblada fuest seria a grant defendimiento et pro de la tierra, e pro e honrra de nuestro Seynnor el Rey e del Regno...» (Archivo General de Navarra, Comptos, Caj. 5, nº 53). Citado en Leroy et al., 1974, p. 162
  2. Díaz de Durana Ortiz de Urbina et al., 2005, pp. 175-177
  3. «El primer texto referente a los efectos del bandolerismo es de 1261» (GARCÍA ARANCÓN, Raquel. Archivo General de Navarra (1253-1270). Tomo II. Comptos y Cartularios Reales. San Sebastián, 1996, doc. n.º 46.) Citado en Díaz de Durana Ortiz de Urbina et al., 2005, p. 177
  4. Díaz de Durana Ortiz de Urbina et al., 2005, pp. 177-180
  5. Zabalo Zabalegui et al., 2004, p. 477
  6. Mugueta Moreno et al., 2000, p. 49
  7. Yanguas y Miranda expresa que Juan Enríquez de Lacarra, padre de Martín [y de Juan II Enríquez de Lacarra (f. 1337)], murió en una expedición contra los guipuzcoanos en 1323. Véase en Yanguas y Miranda, José (1840). «LACARRA (Martín Enríquez, señor de». Diccionario de Antigüedades del Reino de Navarra. Diccionario de antigüedades del reino de Navarra. Volumen II. Pamplona: Imprenta de Francisco Erasun. pp. 157-166. 
  8. Juaristi Linacero, Jon (1986). «El Cantar de Beotibar, ¿Un romance noticiero vasco?». Anuario del Seminario de Filología Vasca Julio de Urquijo: International journal of basque linguistics and philology 20 (3): 845-856. ISSN 0582-6152. doi:10.1387/asju.7809. Consultado el 5 de agosto de 2023. 
  9. a b Michelena, Luis; Sarasola, Ibon (11 de enero de 1989). «Textos arcaicos vascos. Contribución al estudio y edición de textos antiguos vascos». Anuario del Seminario de Filología Vasca "Julio de Urquijo": 66-69. ISSN 2444-2992. doi:10.1387/asju.8577. Consultado el 5 de agosto de 2023. 

Bibliografía

Enlace externos