Proclamación de Rimini

La Proclamación de Rimini fue un recurso por el cual el 30 de marzo de 1815, Joaquín Murat, instalado en el trono de Nápoles por Napoleón, después de declarar la guerra a Austria se dirigió a los italianos llamándoles a las armas contra los invasores, presentándose como el abanderado de la lengua italiana, en un intento de encontrar aliados en su lucha desesperada por conservar el trono.