Fàbrica de Bombas de Aviaciòn. Argentina.[editar]

Bomba PG 125 Kg. BK-BR
Tipo	Propósitos Generales
País de origen	Argentina
Calibre	219 mm.
Explosivo	TNT
Peso del explosivo	50 Kg.

FABRICA DE ARMAMENTO - Area Material Córdoba - Fuerza Aèrea Argentina[editar]

El origen de la Planta de Carga de Bombas de Aviación, situada en la Provincia de Córdoba, se remonta a la década del 80, cuando luego de la Guerra de Malvinas la Fuerza Aérea Argentina decidió impulsar la creación de una fábrica nacional con capacidad para la fabricación de Bombas Aéreas, cohetes y proyectiles de artillería.

Es así como en año 1983 el Estado Nacional contrató a la empresa sudafricana NASCHEM para el diseño de las instalaciones, provisión de las maquinarias especificas,la capacitación del personal y la entrega llave en mano de una Planta de Carga de Explosivos Militares para la fabricación de armamento aerolanzable, creándose entonces la FABRICA DE ARMAMENTO del AREA DE MATERIAL CORDOBA.

La Planta de Carga fue diseñada para la fabricación de bombas de aviación de 50 a 1.000 Kg., con la posibilidad de ser adaptada para el llenado de proyectiles de artillería, granadas de morteros, cabezas de cohetes y minas submarinas y demás artefactos explosivos de uso militar, de acuerdo con las especificaciones del MIL-STD.

Sus instalaciones tenían una capacidad de fundición de 600 Kg./Hora de explosivos tales como el TNT y realizar mezclas para su posterior carga como el RDX/TNT, TRITONAL , TORPEX, H-6; y para la etapa final de llenado se encontraba equipada para que sea posible realizar la carga simultáneamente con explosivos en estado líquido y en estado sólido lo cual permitía obtener una carga homogénea de explosivo de la más alta calidad.

SITEA S.A. (Sistemas Tecnològicos Aeronautcos S.A.)[editar]

En el año 1987, mediante Decreto Nacional 1.869/1987 ^[1] se aprobó la constitución de la sociedad Sistemas Tecnológicos Aeronáuticos S.A. (SITEA S.A.), la cual estaba conformada por la Fuerza Aérea Argentina y las Empresas Explosivos Alaveses (EXPAL) e Industria Química Altos Explosivos de Seguridad de Santa Fe (IQAES).

Diez años después de su constitución, en el marco de un contrato suscrito con la empresa israeli ELBIT Ldt, la Comisión Nacional de Exportaciones Sensitivas y Material Bélico (CONCESYMB) le denegò la autorización para exportar un lote de Bombas MK-82 y MK-83 a Rumania y Sri Lanka, lo que màs tarde concluyò con el inició de una causa por contrabando agravado de armas,^[2] en el Juzgado en lo penal y económico a cargo del Dr. Guillermo Tiscornia.

En junio de 1997, la Asamblea General extraordinaria de SITEA SA, decidió la no continuidad de la sociedad, lo que implicó su declaración de quiebra.^[3]

T.A.L.A. S.A. (Talleres Armas Livianas Argentinas S.A.)[editar]

Durante el proceso de quiebra, la Fuerza Aérea Argentina solicitó mediante diversas presentaciones en el expediente judicial, que se vea la posibilidad de preservar la unidad de la Planta de Carga, en atención a que producía material estratégico que hacía a la capacidad de defensa de la Nación. Finalmente, el Juzgado autorizó al llamado a Licitación Pública para adquirir en bloque la totalidad de la instalaciones, maquinarias y bienes muebles que constituían la ex fábrica SITEA y poner en funcionamiento nuevamente la Planta de Carga.

Fue así como en el año 2001, para evitar que la Planta sea desmantelada, la Fuerza Aérea Argentina toma contacto con la empresa Talleres Armas Livianas Argentinas S.A. (T.A.L.A. SA), para que se presente en el expediente judicial de la quiebra y adquiera la totalidad de dichos bienes.

En Diciembre del año 2002, en el marco del proceso licitatorio llevado a cabo por el Juzgado Nacional en lo Comercial Nro. 16, Secretaria Nro. 31 en los autos caratulados: “Sistemas Tecnológicos Aeronáuticos S.A. s/ Quiebra s/ Incidente de Realización de bienes”, la empresa Talleres Armas Livianas Argentinas S.A. resultó adjudicataria y puesta en posesión de la totalidad de las maquinarias, herramientas, polvorines, matricería, y todos los bienes muebles afectadas a la actividad de la denominada Planta de Carga de Bombas que utilizaba la quebrada SITEA; y suscribió con la Fuerza Aérea Argentina un contrato de concesión para la utilización del predio e inmuebles donde estaban instaladas las maquinarias que conformaban dicha Planta de Carga.

Al tomar posesión del predio, T.A.L.A. S.A. debió poner en condiciones operativas las instalaciones de la Planta que habían estado abandonadas durante más de una década, tiempo que duro el proceso de quiebra de la ex SITEA SA. Para ello fue necesario descontaminar de explosivos las maquinarias, tuberías y herramental utilizado para la fundición y carga de explosivo; y realizar tareas de mantenimiento y limpieza de los edificios.

En septiembre de 2005, mediante Resolución Nro. 1052 del Ministerio de Defensa, se le otorgó la habilitación como Fábrica de Materiales de Carácter Esencialmente Militar Controlados por Ley Nacional de Armas y Explosivos, de las instalaciones de la Planta; y obtuvo los permisos y habilitaciones del ex RENAR (ANMaC) en los diferentes rubros, como ser los certificados de Inscripción como Exportador, Fabricante, Importador, vendedor de Materiales de carácter esencialmente militar; Usuario con Polvorines Tipo A, B, C o E; Habilitación de Fábrica de Materiales de carácter esencialmente militar controlados por Ley Nacional de Armas y Explosivos Nro. 20.429 y por Ley Nro. 12.709; Habilitaciones de 4 Polvorines Tipo A con capacidad hasta 75 Tn. de Altos Explosivos; Habilitación Municipal y Certificado de Gestión de Calidad ISO 9001:2000.

Durante los años 2002 al 2007, la Planta se encontraba plenamente operativa y repotenció un lote de Bombas Aérea MK-84 y MK-82; y fabricó un lote de Bombas PG 125 Kg y cohetes ASPID para los Pucará de la Fuerza Aérea Argentina; y a pedido de la actual Fábrica de Aviones (Fadea), fabricó y entregó, un lote de Bombas PG 125 Kg. inertes, bajo las más estrictas especificaciones técnicas, para el “Proyecto IA-63 Pampa”, con el fín de calibrar su Sistema de Tiro con el mencionado armamento aerolanzable.^[4]

En octubre del año 2006, la empresa T.A.L.A. S.A. participó y resultó adjudicataria en una Licitación Internacional de la Fuerza Aérea de Colombia para la provinsión de bombas aéreas MK-81 y MK-82, sin embargo una vez iniciada la producción, la Comisión Nacional de Exportaciones Sensitivas y Material Bélico (CONCESYMB), denegó la autorización de exportación por razones humanitarias.

A partir de entonces la Planta quedó privada de ingresos; y la empresa recurrió a la Secretaría de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa del Ministerio de Defensa, a la Direcciòn General de Material de la Fuerza Aèrea Argentina y a la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados de la Nación solicitando su colaboración. ^[5]^[6] Sin contar con el apoyo necesario y al no poder ya afrontar los pagos de los cánones, la Fuerza Aérea Argentina rescindió el contrato de concesión por el uso del predio y edificios; imposibilitandose de esta manera continuar con la explotación de la Planta.

T.A.L.A. S.A. inició entonces la desinstalación de las maquinarias de su propiedad a fin de devolver el predio, por lo que la Fuerza Aérea Argentina, solicitó a la empresa suspender temporalmente las tareas de desmantelamiento e inició conversaciones con la Dirección General de Fabricaciones Militares para que ésta adquiera las maquinarias.

Sin embargo, el día 26 de junio de 2019, previo a las PASO (Elecciones primarias de Argentina de 2019), la ex Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, montó un operativo mediático y llevó a cabo un allanamiento en la Planta de Córdoba, citando para la ocasión a gran cantidad de medios, a pesar del secreto de sumario que regía por orden del Juez interviniente. El operativo denominado “Operación Palak” ^[7], fue anunciado rápidamente en gran cantidad de medios como el descubrimiento de una fábrica clandestina de bombas de aviación que se encontraba dentro de un predio de Fuerza Aérea Argentina, que tenía por objeto el contrabando de armas.

Este intento por involucrar a T.A.L.A. S.A. y a sus titulares en una causa de contrabando de armas, fue desestimado posteriormente por la Cámara en lo Penal Económico, y tanto su Presidente Arnaldo C. Bollati, como su hijo Diego Martín Bollati fueron sobreseídos definitivamente de la causa.

El daño que causó la indiferencia de las autoridades, el allanamiento mediático, la difamación en los medios y el desapoderamiento arbitrario de los bienes de la empresa por más de tres años, condujo a que T.A.L.A. S.A., en el año 2022 retome las tareas de desmantelamiento definitivo de las maquinarias e instalaciones que aún permanecían en el predio de lo que alguna vez fue la “Única Planta de Carga de Explosivos Militares en Bombas de Aviación de la República Argentina”.

Producción[editar]

Bomba PG 125 Kg. BK-BR[editar]

Es una Bomba de propósitos generales y baja resistencia aerodinámica. El cuerpo es forjado y la cola estampada en acero. El sistema de suspensión es NATO, con càncamo modificado. Se provee, cuerpo y cola, embalados en forma independiente, preparados para ser ensamblados antes de su montaje en el avión. La carga explosiva, TNT, es el 40% del peso total. Esta bomba utiliza espoleta de nariz con alambre armador y clips de seguridad.Puede utilizar espoletas ARM EIN M1, M-904, MK 669(SSQ) o Espoleta de ojiva 709.105 (MU).

Esta bomba está compuesta por las siguientes partes:

Cuerpo: Construido en acero forjado. Se trata de una bomba de baja resistencia aerodinámica, apta para aviones de alta velocidad. La rosca de ojiva, permite fijar el compartimiento que hermetiza la carga y enroscar la espoleta.

Cola: Construida en chapa de acero estampado, consta de un cuerpo cónico y cuatro aletas estabilizadoras de forma trapezoidal. La cola se fija al cuerpo de la bomba atreves de los tornillos de blocaje.

Cáncamos: La bomba, es provista con dos cáncamos de acero forjado tipo NATO modificado.

Tipo de Carga explosiva: La carga explosiva es TNT, elemento de gran poder y baja sensibilidad, lo que permite un seguro manipuleo.