Retrato de fray Hortensio Félix Paravicino

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Fray Hortensio Félix Paravicino
Año 1609
Autor El Greco
Técnica Óleo sobre lienzo
Estilo Manierismo
Tamaño 112,1 cm × 86,1 cm
Localización Museo de Bellas Artes (Boston), Bandera de Estados Unidos Estados Unidos

Fray Hortensio Félix Paravicino es un retrato pictórico de el Greco, realizado en 1609 durante su último período toledano. Se conserva en el Museo de Bellas Artes de Boston.

Temática de la obra

Hortensio Félix Paravicino, predicador y poeta del Siglo de Oro, era íntimo amigo de el Greco. El año 1641 se publicó póstumamente una obra suya en la cual aparecían cuatro sonetos dedicados a El Greco. Uno de ellos se titulaba "Al mismo Griego, en un Retrato que hizo del Autor", donde muy probablemente se refiere a este retrato. [1]

En ocasión de la muerte del pintor, le dedicó un poema que incluye la famosa frase: "Creta le dio la vida y los pinceles/Toledo mejor patria donde empieza/a lograr con la muerte eternidades" [2]

Análisis de la obra

Firmado con pequeñas letras cursivas griegas, cerca del libro; Óleo sobre lienzo; 112 x 86 cm.; Un poema de Fray Hortensio Félix Paravicino relaciona su propio retrato pictórico a la edad de 29 años. Por lo tanto, esta obra se puede datar en el año 1609.

El Greco representa al fraile trinitario casi de cuerpo entero, sentado en un sillón de madera con respaldo de cuero negro azulado. Viste el hábito de su orden religiosa, blanco y negro, con una cruz azul y roja. La tensión interna de su rostro y la inteligencia de sus ojos contrastan con la laxitud de su postura. El personaje tiene dos libros en la mano izquierda: uno más bien pequeño, y debajo de él, descansando principalmente en el apoyabrazos de su asiento y en el regazo, un gran misal. La figura está construida a base de pinceladas fuertes y rápidas, y se recorta sobre un fondo neutro detrás del cual aparece la preparación rojiza típica de última etapa de El Greco, y que armoniza todas las tonalidades, que no están sometidas a ningún marcado efecto de luz. [3]

Este es uno de los retratos más famosos de este gran artista, donde demuestra el gran aprecio que sentía por su amigo, quien, al verse en el cuadro, afirmó que dudaba dónde viviría su alma, si en su cuerpo o en el retrato. [4][5]

Procedencia

Referencias

  1. Àlvarez Lopera, José. El Greco, La Obra esencial. p. 266. 
  2. Gudiol, José. Obra citada. p. 283. 
  3. Gudiol, José. Obra citada. p. 283. 
  4. Cámara, Alicia (2014). «El Greco, el extranjero que retrató el alma de Toledo». Historia National Geographic (Barcelona) (125): 8-11. ISSN 1696-7755. 
  5. Álvarez Lopera, José. El Greco, La Obra esencial. p. 265-266. 
  6. Wethey, Harold E. Obra citada. p. 109. 

Bibliografía

  • Álvarez Lopera, José, El Greco, Madrid, Arlanza, 2005, Biblioteca «Descubrir el Arte», (colección «Grandes maestros»). ISBN 84-955503-44.
  • Wethey, Harold Edwin; El Greco y su Escuela (Volumen-II) ; Ediciones Guadarrama; Madrid-1967.
  • Scholz-Hänsel, Michael, El Greco, Colonia, Taschen, 2003. ISBN 978-3-8228-3173-1.
  • Gudiol, José; Doménikos Theotokópoulos, El Greco ; Ediciones Polígrafa, S.A.; Barcelona-1982; ISBN 84-343-0031-1
  • Àlvarez Lopera, José; El Greco, La Obra esencial ; Ediciones Sílex S.L.; Madrid-2014; ISBN 978-84-7737-8600

Enlaces externos