Pinsot
Plantilla:Ficha de localidad de Francia
Pinsot es una localidad y comuna de Francia, en la región de Ródano-Alpes, departamento de Isère, en el distrito de Grenoble y cantón de Allevard.
Su población en el censo de 1999 era de 139 habitantes.
No está integrada en ninguna Communauté de communes.
Etimología
En el siglo XI, es designado como: ecclesia sancti mauritii que dedica así su iglesia a la protección de San Mauricio en la cual se encuentra siempre una estatua del Santo. En el siglo XIII, se hace " capellanus de pinceto ". 1339, encontramos ambas denominaciones de pingoto y de "pinczotz ". En 1400, se vuelve pinsotto antes de tomar en 1566 el nombre actual de "Pinsot".
Geografía
El municipio de Pinsot está situado en el hueco del valle del Alto Bréda en la cadena de Belledonne, al pie del macizo de Gleyzin (2 600 m) y próximo del de siete tipos de Laux. El pueblo está situado en el valle del Alto Bréda a la confluencia de los torrentes de Bréda, de Gleyzin y del Jalón. Su altitud es de 732 metros al nivel de la iglesia. Rodeado de bosques de piceas y de hojosos está dominado por el glaciar del Gleyzin y las primeras estribaciones de la cadena de Belledonne.
Río abajo y a 7 km se encuentra la ciudad de Allevard-les-Bains y a 5 km río arriba el pueblo de Ferrière-d'Allevard, nombre que hace referencia sin ambigüedad a la actividad minera y muy antigua. Se encuentra en una distancia de 45 km de la ciudad de Grenoble y a 41 km de la ciudad de Chambéry.
El municipio de Pinsot, sobre una superficie de cerca de 2 427 hectáreas, cubre ambas laderas de una parte del valle de Bréda y de la totalidad de la de Gleyzin. Los rastros de antiguos hoyos, de haldes y de hornos de varios tipos allí son todavía numerosos. La energía hidráulica allí es abundante y fue también una de las causas del establecimiento de cuchillerías y de molinos necesarios para la vida de sus habitantes y para el comercio. La población era allí de 73 fuegos, sea cerca de 292 habitantes 1339[1] y va a alcanzar un máximo de 1 120 1826[2] antes de desminuir hasta nuestros días.
Esta población que vive de la explotación de los hoyos va a determinar la localización de un gran número de aldeas y de casas aisladas entre las que algunos no son más que ruinas recubiertas por la vegetación.