Señor grande de Ameca

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Señor Grande de Ameca

El señor grande es una hermosa escultura de Cristo crucificado hecha de pasta de caña de maíz. Mide casi dos metros de altura desde los pies a la cabeza. Su cuerpo y cara llenos de múltiples heridas sangrantes, rematando con el costado abierto. Actualmente se encuentra en el nicho principal de la parroquia de Santiago apóstol en Ameca, Jalisco. En el año de 1529 se levantó en el centro del poblado de Ameca un humilde Templo Católico de paredes de adobe y techo de zacate para celebrar los actos litúrgicos. Los sacerdotes Santiago Gómez y Pedro Bejarano desde 1570 recibieron el encargo de dirigir la comunidad parroquial y antes de 1600 trajeron la imagen del Señor grande, que adquirieron con los treinta pesos que reunieron de las ofrendas de los fieles, que era lo que costaba la hechura he dicho Cristo. La hechura constaba de una imagen grande de un Cristo michoacano, que fue elaborado en el taller que los señores Luis y Matías de la cerda tenían en Patzcuaro y de donde salieron la imágenes de Cristo que se veneran en Amacueca, Cocula y Magdalena, asimismo en este taller se elaboró la imagen de la Virgen de Zapopan. El 9 del mes de Marzo del año 1979 llegó a la parroquia de Santiago Apóstol de Ameca el señor obispo de Guadalajara Don Juan Santiago de León Garabito para hacer la visita pastoral a esa comunidad Cristiana y en el acta, que en las ultimas hojas del libro de bautismos No. 1 se escribió este hecho, el señor obispo afirma que en el altar mayor del Templo, entres seis lienzos de pincel de pinturas de santos se encuentra en una urna un Santo Cristo Grande muy devoto.

Después del humilde Templo de techo de zacate se edificó un Templo de tres naves que por ser insuficiente se demolió para dejar lugar al actual, que fue construido en los años 1723 a 1770 aproximadamente. En 1755 siendo párroco de Ameca el sacerdote Juan Antonio Dávalos originario de este valle, visitó a l pueblo de Ameca el Sr. Obispo de Guadalajara Fray Francisco de San Buenaventura Martínez de Tejada y reconoció la gran devoción de los vecinos al Santo Cristo y concedió especiales indulgencias a los que hicieran oración ante la imagen de Cristo, venerado en el templo parroquial.

El día 25 de Octubre del año 1798 murió el sacerdote Juan Antonio Dávalos y en el testamento escrito que se guarda en el archivo parroquial, ordeno que con sus bienes de la hacienda de Don Martín se cubrieran los gastos de la celebración de la santa misa Todos los viernes en honor al Santo Cristo del Altar Mayor de la parroquia de Ameca y que se nombrara un sacerdote Capellán especialmente encargado de cuidar e culto del Señor Crucificado. El 16 de Marzo del año 1835 se reunieron varios vecinos de la ciudad, de los antes llamados Indios del pueblo de Ameca y eligieron a los oficiales del Señor Grande y los anotaron en listas porque ellos se obligaron con muy fina voluntad a dar los pasos convenientes para formar un altar de piedra al Señor Grande y firmaron como prioste Hilario de Jesús López y sus fiadores: Felipe Quijas, Miguel Salazar, Jesús Neri y Avelino Cortés, como mayordomo José Ramírez, Nabor Vázquez, Gregorio Montes, Felipe Martínez, como diputado menor Felipe Uribe y sus fiadores Luciano Escobar, José María Lino, Luis González Y Guillermo López. El 8 de mayo de 1870 fue autorizado por el párroco Don Miguel Ignacio Izquierdo el reglamento de los oficiales del Señor Crucificado que se venera en la parroquia de Ameca y cuya festividad anual en l pascua data según la tradición, desde la comparecencia de la Bendita Imagen en esta parroquia.

Todas las generaciones de Amequenses han tributado especial Homenaje al Señor Grande y han aportado sus ofrendas para el mantenimiento y decoración del Templo parroquial. En el año 1932 angustiados por el fuerte temblor de tierra que se sintió en la región, el párroco Don Donaciano Ruvalcaba y muchos feligreses solemnemente juraron al Señor Grande como protector especialísimo en las calamidades públicas y prometieron no abandonar jama la religión católica.

El 16 de Julio de 1948 por manos dl Sr. Cardenal José Garibi Rivera en grandiosa celebración, Ameca le ofreció al Señor Grande una hermosa corona de metal precioso como prueba de su amor y gratitud.

El 14 de mayo de 1982 los fervorosos devotos por el ministerio del Sr. Arzobispo el Cardenal Dr. Don José Salazar López, nacido en Ameca(12-enero-1910), le pudieron presentar ya terminado el nuevo retablo de labrada cantera y artísticamente dorado, asimismo en ese memorable día se consagró el altar mayor que luce actualmente en la parroquia de Ameca. Actualmente se celebra al Santo Cristo el en la solemnidad del domingo de la Asención del Señor.

El Señor Grande de Ameca aun sigue atrayendo múltiples peregrinaciones y fieles, gracias a la concurrencia que tiene la parroquia de Ameca, por la imagen del bendito Cristo, la parroquia ha sido lugar para ganar indulgencias plenarias durante el Jubileo del año 2000 y recientemente durante el año paulino 2008-2009.