Diferencia entre revisiones de «Suma Qamaña»

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Contenido eliminado Contenido añadido
T2dcris (discusión · contribs.)
Sin resumen de edición
m Revertidos los cambios de T2dcris (disc.) a la última edición de Amanuense
Línea 1: Línea 1:
{{sinrelevancia|29|septiembre}}
{{wikificar|t=20090929112039}}
La indianidad boliviana tiene una cosmovisión del mundo a la que llama '''Suma Qamaña'''. Está relacionada con el concepto muchik de la '''"Vida Dulce"''' que es una vivencia interactiva y cotidiana de tener a mano lo necesario y suficiente dentro de un modo de vida austero y diverso, lubricado por el cariño, que no excluye a nadie.
La indianidad boliviana tiene una cosmovisión del mundo a la que llama '''Suma Qamaña'''. Está relacionada con el concepto muchik de la '''"Vida Dulce"''' que es una vivencia interactiva y cotidiana de tener a mano lo necesario y suficiente dentro de un modo de vida austero y diverso, lubricado por el cariño, que no excluye a nadie.


Línea 5: Línea 7:
Esta concepción de la Vida Dulce es posible porque la cosmovisión andina no es antropocéntrica ni newtoniana; es ecológica y cuántica.
Esta concepción de la Vida Dulce es posible porque la cosmovisión andina no es antropocéntrica ni newtoniana; es ecológica y cuántica.



== Civilización occidental y oriental ==
Según Javier Medina[http://lareciprocidad.blogspot.com/search/label/Javier%20Medina], la humanidad, como sociedad, está formada por dos civilizaciones contrapuestas que conforman un todo: la civilización occidental (cultura portuguesa, italiana, inglesa, holandesa...) y la oriental (china, tibetana, aymara, guaraní, schuar, nahua, hopi...)
Según Javier Medina[http://lareciprocidad.blogspot.com/search/label/Javier%20Medina], la humanidad, como sociedad, está formada por dos civilizaciones contrapuestas que conforman un todo: la civilización occidental (cultura portuguesa, italiana, inglesa, holandesa...) y la oriental (china, tibetana, aymara, guaraní, schuar, nahua, hopi...)


Línea 13: Línea 13:
''"El problema boliviano es que sus élites quieren que una civilización animista (cuyos valores son simbiosis, cooperación, equilibrio, crianza, conversación, equivalencia, agrocentrismo) funcione como una civilización monoteista (cuyos valores son la separación Dios/Hombre/Naturaleza, libertad, progreso, desarrollo, individuo, acumular, subjetividad, competir, dominar, razón instrumental, llevar su verdad hasta los confines del mundo y convertir a los infieles a su verdad" para que el mundo sea uno como tu eres Uno")
''"El problema boliviano es que sus élites quieren que una civilización animista (cuyos valores son simbiosis, cooperación, equilibrio, crianza, conversación, equivalencia, agrocentrismo) funcione como una civilización monoteista (cuyos valores son la separación Dios/Hombre/Naturaleza, libertad, progreso, desarrollo, individuo, acumular, subjetividad, competir, dominar, razón instrumental, llevar su verdad hasta los confines del mundo y convertir a los infieles a su verdad" para que el mundo sea uno como tu eres Uno")


La Vida Dulce no es el mundo del saber, pues los amerindios no pretenden ni quieren transformar el mundo (como los revolucionarios) sino amarlo tal y como es (como los místicos)"
La Vida Dulce no es el mundo del saber, pues los amerindios no pretenden ni quieren transformar el mundo (como los revolucionarios) sino amarlo tal y como es (como los místicos)
''(p. 108)
(p. 108)
''


== Ecología y Suma Qamaña ==
Pachamama[http://es.wikipedia.org/wiki/Pachamama] y Gaia[http://es.wikipedia.org/wiki/Hip%C3%B3tesis_de_Gaia] son seres vivos y auto-organizados. El cosmos debe tener un orden y un equilibrio.

== Referencias ==
Javier Medina, Suma Qamaña. Por una convivialidad postindustrial

Revisión del 11:46 29 sep 2009

La indianidad boliviana tiene una cosmovisión del mundo a la que llama Suma Qamaña. Está relacionada con el concepto muchik de la "Vida Dulce" que es una vivencia interactiva y cotidiana de tener a mano lo necesario y suficiente dentro de un modo de vida austero y diverso, lubricado por el cariño, que no excluye a nadie.

En este modelo de austeridad, equilibrio y suficiencia de lo bueno, bello y necesario, nadie está excluido, ni los dioses ni la naturaleza.

Esta concepción de la Vida Dulce es posible porque la cosmovisión andina no es antropocéntrica ni newtoniana; es ecológica y cuántica.

Según Javier Medina[1], la humanidad, como sociedad, está formada por dos civilizaciones contrapuestas que conforman un todo: la civilización occidental (cultura portuguesa, italiana, inglesa, holandesa...) y la oriental (china, tibetana, aymara, guaraní, schuar, nahua, hopi...)

Según Javier Medina, en su libro "Suma Qamaña. Por una convivialidad postindustrial", plantea el conflicto boliviano de la siguiente manera:

"El problema boliviano es que sus élites quieren que una civilización animista (cuyos valores son simbiosis, cooperación, equilibrio, crianza, conversación, equivalencia, agrocentrismo) funcione como una civilización monoteista (cuyos valores son la separación Dios/Hombre/Naturaleza, libertad, progreso, desarrollo, individuo, acumular, subjetividad, competir, dominar, razón instrumental, llevar su verdad hasta los confines del mundo y convertir a los infieles a su verdad" para que el mundo sea uno como tu eres Uno")

La Vida Dulce no es el mundo del saber, pues los amerindios no pretenden ni quieren transformar el mundo (como los revolucionarios) sino amarlo tal y como es (como los místicos) (p. 108)