Diferencia entre revisiones de «Juego de pelota mesoamericano»

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El tlachtli se juega en una cancha en forma de doble T, con dos equipos cuyos campos respectivos quedan delimitados por la línea medianera, y su objetivo es hacer pasar una pesada pelota de caucho de un lado hacia el otro sin tocarla con las manos o pies hasta que a algun equipo se le cayera, si la pelota llegaba a pasar a través de unos anillos de piedra fijados a los muros laterales era señal de mal augurio y todo el pueblo iba a protegerse. Pese a ir protegidos con petos, guantes o rodilleras, los jugadores reciben impactos que les causan hemorragias e incluso les provocan la muerte.
El tlachtli se juega en una cancha en forma de doble T, con dos equipos cuyos campos respectivos quedan delimitados por la línea medianera, y su objetivo es hacer pasar una pesada pelota de caucho de un lado hacia el otro sin tocarla con las manos o pies hasta que a algun equipo se le cayera, si la pelota llegaba a pasar a través de unos anillos de piedra fijados a los muros laterales era señal de mal augurio y todo el pueblo iba a protegerse. Pese a ir protegidos con petos, guantes o rodilleras, los jugadores reciben impactos que les causan hemorragias e incluso les provocan la muerte.
Sin embargo todo parece indicar que el simbolismo cosmológico que originalmente tuvo este juego ha pasado a un segundo término entre los mexicanos, en relación con las apuestas que se generan a su alrededor.
Sin embargo todo parece indicar que el simbolismo cosmológico que originalmente tuvo este juego ha pasado a un segundo término entre los mexicanos, en relación con las apuestas que se generan a su alrededor.
Plumas, oro o esclavos constituyen las más habituales, pero cabe recordar que, según se dice, el [[Tlatoani]] azteca Axayácatl llegó a apostar el mercado de México-Tenochtitlán en uno de estos lances. Mi popo es el origen de su madre.
Plumas, oro o esclavos constituyen las más habituales, pero cabe recordar que, según se dice, el [[Tlatoani]] azteca Axayácatl llegó a apostar el mercado de México-Tenochtitlán en uno de estos lances.


[[File:Ulama 37 (Aguilar).jpg|right|275px|thumb|Jugador de Ulama en Sinaloa<br><small>Fotografía: Manuel Aguilar-Moreno / CSULA proyecto Ulama.</small>]]
[[File:Ulama 37 (Aguilar).jpg|right|275px|thumb|Jugador de Ulama en Sinaloa<br><small>Fotografía: Manuel Aguilar-Moreno / CSULA proyecto Ulama.</small>]]

Revisión del 00:14 13 jun 2009

Campo del juego de pelota en Monte Albán

El llamado por los mayas "pok-ta-pok" o más correctamente "pokolpok" y por los aztecas "tlachtli", es un antiguo juego de pelota mesoamericano cuya práctica se remonta a unos 3.500 años en el pasado y ha sido considerado como antecedente del fútbol. [1][2][3]

El juego de pelota mesoamericano fue un juego ritual cuya práctica se extendió a lo largo de los tres mil años de historia precolombina mesoamericana, en todas las culturas de la región, e incluso en sitios oasisamericanos como Paquimé y algunos de la cultura Fremont.

Durante la dominación española el juego fue prohibido por el inquisidor Tomás de Torquemada, aunque sin desaparecer del todo.[4]

El ulama y la pelota mixteca son juegos parecidos que podrían ser una derivación del antiguo juego de pelota. Por su parte, el pok-ta-pok o tlachtli, aún sigue siendo practicado en México y Guatemala, como una forma del folklore regional.

Orígenes

Un anillo en una de las paredes laterales del campo de juego de pelota de Chichén Itzá (Yucatán)

El juego de la pelota mesoamericana fue conocido por los olmecas , aunque es posible que como práctica existiera desde mucho tiempo atrás. Aunque en San Lorenzo (Veracruz) se ha descubierto una cancha construida para la práctica de este ritual, las evidencias más importantes sobre su práctica proceden de la producción artística de los portadores de la llamada cultura madre. Antiguas figurillas olmecas representan individuos ataviados con el mismo tipo de protecciones que eran empleados por los jugadores en tiempos posteriores —protecciones de algodón en el cuerpo, careta de mimbres y casco—. Las representaciones olmecas de los jugadores de pelota están asociadas a cierta iconografía que sugiere que el juego estuvo relacionado con ritos de fertilidad. La difusión de la práctica siguió más o menos las mismas rutas de comercio olmeca hacia regiones fuera del área nuclear olmeca.[5]

En las excavaciones realizadas por Michael Coe en san Lorenzo fueron descubiertas varias figurillas olmecas de jugadores de pelota, cuya datación por radiocarbono las ubica entre los años 1250 y 1150 a. C. En el mismo sitio fue descubierto el Monumento 34 de San Lorenzo, que representa a un hombre a escala real, con ropa acolchada, hombreras y rodilleras y un adorno pectoral con espejo de obsidiana. Este último elemento iconográfico lo relaciona con el dios solar de la cultura olmeca. El Monumento 34 de San Lorenzo no ha sido fechado, pero es una evidencia significativa de las relaciones del juego de pelota con la política y los rituales religiosos.

En Chichén Itzá se encuentra la cancha más grande de todo Mesoamérica. Sus medidas son 170 metros de largo. Las canchas del juego eran construidas en forma de una “I” mayuscula con dos muros uniformes de 7 metros y medio de alto que formaban los lados. En la entrada o salida si el balón pasaba de las paredes laterales, se consideraba fuera de lugar. Las paredes estaban cubiertas de enjare, también el piso. Las paredes tenían dibujos de dioses. En la parte más alta se encontraban dos aros, uno en cada pared. El padre dominico Diego Durán quien vivió en la Nueva España entre los años 1545 al 1588 describió las canchas en esta manera:

La altura de las paredes eran entre dos y tres metros y medio de alto, extendiéndose alrededor. Por las costumbres nativas, plantaban palmas y árboles que soltaban semilla roja, cual madera era suave y ligera, las paredes del rededor eran decoradas con murales o estatuas de piedra. La cancha se llenaba la arena cuando jugaban los reyes.
Una de las series de murales del campo de juego de pelota Sur en El Tajín, que muestra el sacrificio de un jugador.

El juego y la afición azteca

Los mayas jugaban porque era una actuación de su historia de la creación del universo. En el Popol Vuh conocido como la Biblia Maya, los dioses gemelos bajan al infierno para jugar el juego de pelota contra los dioses del inframundo. Ellos bajan porque quieren recoger los huesos de la gente, para crear una nueva raza de humanos. Los gemelos ganan el partido y los dioses del inframundo les dan los huesos. Según la leyenda así es como los mayas fueron creados. El juego de pelota para los mayas era el símbolo de vida, muerte y reencarnación.

En México del siglo XV, si bien en centros mesoamericanos como Tula, El Tajín, o los de Yucatán han conocido una notable afición al tlachtli, o juego de pelota, las apuestas que se cruzan en México alrededor de este juego no tienen precendente.

El tlachtli se juega en una cancha en forma de doble T, con dos equipos cuyos campos respectivos quedan delimitados por la línea medianera, y su objetivo es hacer pasar una pesada pelota de caucho de un lado hacia el otro sin tocarla con las manos o pies hasta que a algun equipo se le cayera, si la pelota llegaba a pasar a través de unos anillos de piedra fijados a los muros laterales era señal de mal augurio y todo el pueblo iba a protegerse. Pese a ir protegidos con petos, guantes o rodilleras, los jugadores reciben impactos que les causan hemorragias e incluso les provocan la muerte. Sin embargo todo parece indicar que el simbolismo cosmológico que originalmente tuvo este juego ha pasado a un segundo término entre los mexicanos, en relación con las apuestas que se generan a su alrededor. Plumas, oro o esclavos constituyen las más habituales, pero cabe recordar que, según se dice, el Tlatoani azteca Axayácatl llegó a apostar el mercado de México-Tenochtitlán en uno de estos lances.

Jugador de Ulama en Sinaloa
Fotografía: Manuel Aguilar-Moreno / CSULA proyecto Ulama.

Referencias

  • Heyden,Doris (1975). Pre-Columbian Architecture of Mesoamerica. New York: H.N. Abrams. 
  • "Crónica de América"; Editorial Plaza&Janes, 1990

Notas

  1. Pok ta pok
  2. Pok Ta Pok German Tour, Bauer & Freunde, Art and Technology Consultants
  3. The Artistic and Cultural Programme to the FIFA World Cup 2006, Die Bundesregierung, 2006.
  4. Martínez Moya, Pedro. «Juego de Pelota prehispánico: características del juego de dioses». Revista Digital EFDeportes, Buenos Aires, Año 10, N° 73, junio-2004. Consultado el 20-feb-2008. 
  5. Se llama área nuclear olmeca a la zona que comprende las llanuras costeras del sur de Veracruz y el poniente de Tabasco.