Diferencia entre revisiones de «Telepizza»
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El convenio fue firmado por UGT, y CCOO, en el año 2002. |
El convenio fue firmado por UGT, y CCOO, en el año 2002. |
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El contrato habitual de Telepizza es, desde la entrada al puesto, Contrato Indefinido |
El contrato habitual de Telepizza es, desde la entrada al puesto, Contrato Indefinido. |
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'''Turnos''' |
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Revisión del 07:24 28 abr 2009
| Telepizza | ||
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| Tipo | Sociedad Anónima | |
| ISIN | ES0105128005 | |
| Industria | gastronomía | |
| Forma legal | sociedad por acciones | |
| Fundación | 1986 | |
| Fundador | Leopoldo Fernández Pujals | |
| Sede central | Avda. Isla Graciosa 7 esq. Isla del Hierro San Sebastián de los Reyes, España | |
| Personas clave | Pedro Ballvé | |
| Productos | Restaurantes de Pizza | |
| Sitio web | [1] | |
Historia
Telepizza es una de las mayores pizzerías de países de lengua hispana. Fundada en 1987 con carácter de empresa familiar, se ha convertido en pocos años en el líder del mercado español de pizzas, y en el segundo grupo de comida rápida que opera en España detrás de McDonald's. La participación más significativa en la sociedad correspondía a Leopoldo Fernández Pujals (actual presidente de Jazztel), su fundador, que controlaba el 38,8% del capital. En esta su primera etapa, jamás repartió dividendos entre los accionistas.
La compañía tenía fábricas en Guadalajara, Barcelona, Móstoles, Alcobendas, pero posteriormente todas fueron vendidas y el grueso de la producción se centra en una única fábrica en Daganzo de Arriba, Madrid. En la fábrica se producen las bolas de masa de forma centralizada para luego distribuirlas por las diferentes tiendas. Ocurre lo mismo con el resto de los ingredientes necesarios, que se fabrican o compran de forma centralizada.
Telepizza nace del proyecto de Leopoldo Fernández Pujals quien, sensibilizado con el auge que había tomado el reparto a domicilio de alimentos en Estados Unidos, en especial de las pizzas, decidió arriesgarse y emprender este negocio por su cuenta. En 1986 inauguró su primera telepizza en el Barrio del Pilar de Madrid y en poco tiempo, la cadena se extendía por la ciudad. En 1996, la compañía era líder del reparto a domicilio de pizzas, con 233 establecimientos en España y presencia en Portugal, Polonia, Chile y México.
En este camino hacia el liderato, Pujals tuvo que empeñar su casa, pedir préstamos e, incluso, sufrir en octubre de 1995 un "golpe de mando" que, fraguado por su hermano Eduardo y otros pequeños accionistas, provocó su salida de la presidencia. A finales de junio de 1996 regresó a la dirección de telepizza de la mano del BBV, entonces el tercer gran accionista de la compañía. El 13 de noviembre de 1996 la empresa salió a la bolsa, siendo la primera en su género que empezaba a cotizar en el mercado nacional de valores.
A lo largo de 1999 Pujals fue vendiendo paulatinamente su participación en la empresa, provocando una caída acumulada de un 44,64%; hasta el 22 de octubre, cuando vendió fuera de mercado el 30,25% que le quedaba (más de 10 millones de acciones) un 15% más baratas, embolsándose 50.000 millones de pesetas. Unas horas antes, la cotización fue suspendida por la Comisión Nacional del Mercado de Valores porque se había filtrado la noticia.
El control de la empresa lo tomó Pedro Ballvé (Campofrío) y José Carlos Olcese (TeleChef, a su vez controlado por Campofrío). La justificación de la "espantada" de Pujals fue: "Poder dedicarse con plena libertad a la causa de la defensa de los Derechos Humanos y al hecho de que dicha actividad no pueda suponer, en ningún momento, ningún tipo de consecuencia negativa para telepizza".
Actualmente la empresa sigue a cargo de la familia Ballvé y Admira, fondo de Inversión, con un total de 822 tiendas en el mundo (más de 500 sólo en España) y volviendo a crecer a pasos agigantados gracias a sus nuevos modelos de negocio como "telepizza Room Service", dedicado a servicio de habitaciones en hoteles, "El rincón telepizza" o "Tiendas Corner", pequeñas tiendas con lo básico para el desarrollo de la actividad, dirigidas a poblaciones de menos de 30.000 habitantes, y su colaboración con Repsol para habilitar mini-tiendas telepizza dentro de sus gasolineras. Telepizza también ofrece sus servicios en pequeños establecimientos a bordo de los ferrys que cruzan el estrecho de Gibraltar.
Restaurantes a 22-13-08:[1]
| País | nº restaurantes |
| España |
559 |
| Polonia | 93 |
| Portugal | 81 |
| Chile | 61 |
| Guatemala | 51 |
| El Salvador | 28 |
| República Checa | 2 |
| Venezuela | 15 |
| TOTAL | 890 |
Curiosidades
- En el 2002 crearon el grupo Pizzoleto Y Pizzoleta para los socios de Telepizza.
Trabajo en Telepizza
Telepizza, pese a su enorme éxito entre el público de todas las edades, tiene fama de ser una empresa con unas terribles condiciones laborales. Es un puesto de trabajo muy habitual entre los jóvenes, y los estudiantes, que precisan de algún dinero extra, por lo que es bien sabido que los sueldos son bajos, las condiciones de salario, relativamente pobres, y el material disponible para el empleado, de baja calidad.
El convenio fue firmado por UGT, y CCOO, en el año 2002.
El contrato habitual de Telepizza es, desde la entrada al puesto, Contrato Indefinido.
Turnos
Normalmente suelen tener horarios flexibles, que si a priori puede parecer una ventaja, a la larga puede ser una tediosa desventaja.
No son nada raros los llamados Turnos Partidos. Estos turnos constan de horarios de 13:00 horas a 16:00 horas, un descanso, y luego volver a entrar de 20:00/21:00 a 23:00/00:00, o incluso cierre. Son turnos muy mal planificados, pues te encadena durante el resto del día, y te impide hacer nada. No se tienen en cuenta los horarios de ida y vuelta al domicilio, y obligan a muchos trabajadores a quedarse en el local, o en las inmediaciones, imposibilitados por la falta de tiempo de poder ir a su casa a descansar.
Los Turnos Puente consisten en horarios de siete u ocho horas, habitualmente de entrada a las 16:00 horas, y salida a las 23:00 horas. Debido a la habitual falta de trabajo en dichos turnos, pueden resultar tediosos, pero sin embargo, haciendo una comparativa con los anteriores, son mucho más adecuados.
Los turnos normales, suelen ser intervalos de 3 o 4 horas, habitualmente por la noche, y a partir de las 20:00, dependiendo del trabajo estimado para el día.
Los horarios de trabajo se modifican todas las semanas, y solo se dan a conocer el domingo por la noche, lo que imposibilita hacer planes a largo plazo.
Si bien es cierto, los locales tiene una gran flexibilidad en sus horarios, y atienden a las peticiones de los trabajadores.
Salarios
Los salarios de telepizza constan de algo más de 4 euros la hora, más incentivos. Los incentivos de los auxiliares son en función de pedidos realizados por teléfono, mientras que los de los repartidores son los pedidos transportados. En principio, un repartidor que trabaje con la moto ganará 0,70 centimos por pedido, mientras que uno que lo haga en coche recibirá entre 1.20 y 1.50 por pedido, dependiendo de la tienda, y de la antigüedad.
Los repartidores en coche trabajan con su vehículo propio. El ascenso del pago por pedido es para cubrir, en parte el coste de gasolina, ya que esta corre a cuenta del repartidor. Todos los gastos del vehículo, seguros, posibles averías, accidentes en horario laboral, revisiones, y cambios de piezas de desgaste, corren a cuenta del repartidor. Todo ello está establecido en el convenio.
Las pagas extra están prorrateadas.
No se pagan pluses, entre los cuales deberían figurar: Peligrosidad, horario nocturno, festividad.
Ahorro Económico
Es bien sabido que la cadena tiene una malsana costumbre, pese a su magnitud, de ahorrar dinero.
Cuando viene el camión de productos, este solo trae al conductor, y es obligación de los trabajadores el descargar la carga y meterla en el local.
Los ingredientes dobles, pese a que cobran cerca de 2 euros por el añadido extra, no cubre un cuarto de la proporción real, lo que ha originado quejas de parte de muchos clientes descontentos. El extra de queso no son más que unos granitos de queso más, por encima de la pizza.
Las masas finas son: Una masa pequeña, estirada para que sea una mediana, y una masa mediana estirada para que tenga el tamaño familiar.
Clientela
Los trabajadores de telepizza tiene que soportar el maltrato de muchos clientes. El hecho de ser un popular servicio de comida rápida, y a domicilio, y un alimento muy conocido entre la población infantil, hace que no se considere al trabajador de telepizza como un auténtico trabajador.
Son habituales las bromas telefónicas a los auxiliares, y los pedidos falsos. Las bromas telefónicas conllevan una pérdida de tiempo innecesaria para el trabajador. Los pedidos broma, si los efectua un repartidor en coche, le suponen una pérdida de gasolina que corre a cuenta de su bolsillo, y la pérdida de tiempo correspondiente que le impide hacer un pedido real, con la consiguiente pérdida de dinero.
También es habitual que se permita a los niños pequeños hacer el pedido, para diversión de la familia, y molestia del empleado.
Existen clientes abusivos que normalmente pagan su descontento con el repartidor, con notables muestras de falta de respeto, e insultos al mismo. La política de Telepizza es mantener al cliente contento, y se prohibe la defensa al repartidor, por lo que el trabajador tiene que soportar los desplantes de algunos clientes.
La queja más habitual de la clientela es la tardanza del pedido. Lo habitual en Telepizza es que la fecha de entrega se cumpla correctamente, pero en noches de intenso trabajo se pueden llegar a producir retrasos de 10 o 15 minutos, de los que es avisado previamente al cliente. Algunas veces, dicho retraso se produce por la propia falta de información del mismo cliente, al dar una dirección incompleta, y un teléfono de contacto inactivo, o no disponible, que impide al trabajador confirmar la dirección.