Carlos Mario Londoño

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Carlos Mario Londoño Mejía (1918-1991) fue un banquero colombiano. Ejerció brevemente la Gerencia del Banco de la República en 1957, tras el fallecimiento de Luis Ángel Arango. Anteriormente había sido gerente del Banco Central Hipotecario.

Referencias

El Dr. Carlos Mario Londoño Mejía nació en Envigado (Antioquia) el 4 de noviembre de 1918, hijo de don Julio Londoño, militar y finquero, y doña Rosa Mejía. Bachiller académico en 1939, del Colegio San José de Medellín (Antioquia). Doctor en Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín en 1945. Estudios de Ciencias Económicas y Administrativas en el Instituto de Estudios Superiores de la Empresa IESE, de Barcelona (España).

Demostró sin respetos humanos su visión cristiana en el ejercicio de numerosas y variadas actividades: 1- Cargos más notables en el sector privado: Director de: Banco Cafetero, Flota Mercante Grancolombiana, Avianca, Compañía Central de Seguros, Banco Panamericano, Banco de Asunción (Paraguay), Representante del Banco Atlántico y de otras entidades comerciales de España; Secretario General de la ANDI, Presidente de la Fundación Educativa Centralseguros. Promotor y cofundador de empresas: Compañía Central de Seguros, Banco Cafetero, Banco de los Trabajadores, Banco de Asunción (Paraguay), Banco Popular del Ecuador, Seguros La Equidad, FINANCIACOOP, Promotora de Vivienda cooperativa. 2- Cargos más notables en el sector público: Concejal del Municipio de Envigado, Diputado a la Asamblea de Antioquia, Secretario de Gobierno de Antioquia, Representante a la Cámara, Secretario General de la Presidencia de la República. 3- Director de: Banco de la República, Banco Central Hipotecario, Corporación Financiera Popular, Embajador de Colombia en Portugal (1957), y Miembro de varias Juntas.

4-Actividades más notables en Cooperativismo: Promotor de numerosos Centros Cooperativos, Promotor y miembro de Congresos Cooperativos Nacionales e Internacionales, del Instituto Nacional de Financiamiento y Desarrollo Cooperativo FINANCIACOOP, Consejero Regional en Cooperativas de la OIT, Consultor de Desarrollo Social de la OEA. 5- Actividades más importantes en Educación: Promotor y directivo del Instituto Superior de Educación INSE que dio origen a la actual UNIVERSIDAD DE LA SABANA, del Instituto de Educación e Investigación Cooperativa de la U. Santo Tomás, de la Escuela de Administración Cooperativa ESACOOP. Profesor de diversas cátedras en varias Universidades del país. Condecorado por los Gobiernos de Colombia, Ecuador y Bolivia. Vive sus últimos años en una casa campestre en Guaymaral a las afueras de Bogotá, con su esposa e hijos, y allí mismo fallece el 3 de julio de 1991. Autor de 15 libros, numerosos artículos y ensayos, muchos de ellos publicados en el exterior.

Dotado de una gran prudencia y habilidad para conocer y tratar a las personas, era como un signo de justicia y de elevada moral, social e intelectual, que daba prioridad a las personas por encima de rivalidades y banderías. Demostraba con hechos su preocupación real por ayudar a las personas más necesitadas, sin alardes. Respetaba mucho la libertad personal y la postura política de cada uno pues no era nada partidista ni sectarista, lo cual le ganó el aprecio de muchos que valoraban su lealtad y rectitud, y la incomprensión de otros que no toleraban su independencia y autonomía.

Lo que más admirable de su pensamiento es el principio - explícito en sus obras- de que el dinero y su productividad no pueden ser el móvil más importante de la actividad económica. Propone para ésto colocar en primer lugar la motivación al LOGRO humano y social, y luego el ánimo de LUCRO material y económico, distinto a su vez del afán salvaje de lucro -ya sea personal, institucional o estatal- que propician algunos modelos económicos.

En su caso se aplican ejemplarmente varias propuestas del Santo Padre, como la del n. 47: "En las iniciativas para el desarrollo debe quedar a salvo el principio de la CENTRALIDAD de la persona humana, que es quien debe asumirse en primer lugar el deber del desarrollo". Y también: "Hay que esforzarse incesantemente para favorecer una orientación cultural personalista y comunitaria, abierta a las trascendencia del proceso de integración planetaria" (n. 42). Y otras en las que el Dr. Carlos Mario se anticipó: "Es oportuno hacer un llamamiento a las organizaciones sindicales de los trabajadores, desde siempre alentadas y sostenidas por la Iglesia, ante la urgente exigencia de abrirse a las nuevas perspectivas que surgen en el ámbito laboral" (n. 64). "La experiencia de la microfinanciación, que hunde sus raíces en la reflexión y en la actuación de los humanistas civiles (.) ha de ser reforzada y actualizada sobre todo en los momentos en que los problemas financieros pueden resultar dramáticos para los sectores más vulnerables de la población" (n. 65).

En 1994 se realizó un homenaje póstumo a su vida y obra en la Universidad de La Sabana, con la asistencia de muchos parientes y amigos; en una de las presentaciones se resaltó lo siguiente: Londoño Mejía fue socialista en lo económico, progresista en lo social, independiente en lo político, aperturista en lo humano, artista en lo cultural, renovador en lo espiritual, y antetodo un cooperativista y solidario institucional.