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A partir de 1992, aproximadamente, comenzó a evidenciarse un cierto distanciamiento entre quienes integrábamos INVESCIT. El distanciamiento, principalmente, de tipo teórico, fue creciendo con el transcurso del tiempo. El grupo de Valencia (Cerezo, Luján, el propio José Sanmartín Esplugues) estaba cada vez más interesado en una CTS en vertiente crítica, en línea con los planteamientos, principalmente, de Carl Mitcham o Riccardo Petrella. Otros grupos y, en particular, el liderado por Manuel Medina en Barcelona (en el que destacaba Eduardo Aibar) se inclinaron de manera decidida por el constructivismo social en línea con S. Woolgar, B. Bijker y, sobre todo, Bruno Latour. La ruptura se produjo hacia 1996.<br>
A partir de 1992, aproximadamente, comenzó a evidenciarse un cierto distanciamiento entre quienes integrábamos INVESCIT. El distanciamiento, principalmente, de tipo teórico, fue creciendo con el transcurso del tiempo. El grupo de Valencia (Cerezo, Luján, el propio José Sanmartín Esplugues) estaba cada vez más interesado en una CTS en vertiente crítica, en línea con los planteamientos, principalmente, de Carl Mitcham o Riccardo Petrella. Otros grupos y, en particular, el liderado por Manuel Medina en Barcelona (en el que destacaba Eduardo Aibar) se inclinaron de manera decidida por el constructivismo social en línea con S. Woolgar, B. Bijker y, sobre todo, Bruno Latour. La ruptura se produjo hacia 1996.<br>
=== ''La violencia y sus claves''. Creación del Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia ===
=== ''La violencia y sus claves''. Creación del Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia ===
Ya desde finales de los 80 y principios de los 90, José Sanmartín Esplugues venía compaginando su interés en CTS con una preocupación creciente por uno de los grandes problemas de nuestro tiempo (aunque, por supuesto, no exclusivo de él): la violencia. Una nueva estancia de investigación en el Instituto Max Planck -ahora en sus instalaciones de Etología Humana, dirigidas por I. Eibl-Eibesfeldt-, subvencionada nuevamente por la Fundación Alexander von Humboldt, le llevó a convertir el análisis de la conducta violenta como el objeto principal de sus estudios. En 1997 se creó el Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia, del que José Sanmartín Esplugues fue nombrado director, ocupando este cargo hasta 2009. El Centro se convirtió en uno de los principales agentes de dinamización de las investigaciones sobre las bases de la violencia y alguna de sus formas principales: la violencia contra la mujer, el maltrato infantil, violencia y psicopatía, radicalización terrorista,... Los estudios del Centro sobre violencia de género a escala mundial se han convertido con el tiempo en un referente obligado. José Sanmartín Esplugues recogió las ideas clave de las investigaciones del Centro reina Sofía en su libro ''La violencia y sus claves'', publicado en el año 200 por la editorial Ariel. Actualmente este libro ha sido reeditado (por sexta vez) en la colección Ariel Quintaesencia. Sus preocupaciones en torno a la violencia le han llevado a investigar estos últimos años una de sus formas más dañinas por sus fuertes impactos en casi todos los órdenes de la vida de la víctima: la violencia político-financiera, a la que ha dedicado su libro ''Bancarrota moral'', sin dejar de de interesarme por la problemática de la relación entre ciencia-técnica y ser humano. José Sanmartín Esplugues, aunque influido por Scheler y Ortega, he creído encontrar una vía propia de desarrollo, alejada del sentimiento de hostilidad hacia la naturaleza o la creencia en el carácter enfermizo del ser humano. A ello he dedicado dos de sus últimos libros: ''La filosofía desde la ciencia'' (2015) y ''Técnica y Ser Humano'' (2017).
Ya desde finales de los 80 y principios de los 90, José Sanmartín Esplugues venía compaginando su interés en CTS con una preocupación creciente por uno de los grandes problemas de nuestro tiempo (aunque, por supuesto, no exclusivo de él): la violencia. Una nueva estancia de investigación en el Instituto Max Planck -ahora en sus instalaciones de Etología Humana, dirigidas por I. Eibl-Eibesfeldt-, subvencionada nuevamente por la Fundación Alexander von Humboldt, le llevó a convertir el análisis de la conducta violenta como el objeto principal de sus estudios. En 1997 se creó el Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia, del que José Sanmartín Esplugues fue nombrado director, ocupando este cargo hasta 2009. El Centro se convirtió en uno de los principales agentes de dinamización de las investigaciones sobre las bases de la violencia y alguna de sus formas principales: la violencia contra la mujer, el maltrato infantil, violencia y psicopatía, radicalización terrorista,... Los estudios del Centro sobre violencia de género a escala mundial se han convertido con el tiempo en un referente obligado. José Sanmartín Esplugues recogió las ideas clave de las investigaciones del Centro Reina Sofía en su libro ''La violencia y sus claves'', publicado en el año 200 por la editorial Ariel. Actualmente este libro ha sido reeditado (por sexta vez) en la colección Ariel Quintaesencia -una Colección de Pequeñas Obras Maestras según la editorial-. <br>
Sus preocupaciones en torno a la violencia le han llevado a investigar estos últimos años sobre una de sus formas más dañinas, dados sus fuertes impactos en casi todos los órdenes de la vida de la víctima: la violencia político-financiera, a la que ha dedicado su libro ''Bancarrota moral''.<br>
Pese a su intenso trabajo teórico sobre violencia -acompañado de su labor como activista social (fue el creador de los Centros Mujer 24h. para prestar ayuda integral a las mujeres víctimas de violencia de género)- José Sanmartín Esplugues no ha dejado de interesarse por la problemática de la relación entre ciencia-técnica y ser humano, y, aunque influido por Scheler y Ortega, pàrece haber encontrado una vía propia de desarrollo, alejada del sentimiento de hostilidad hacia la naturaleza o la creencia en el carácter enfermizo del ser humano. A ello he dedicado dos de sus últimos libros en colaboración con Raúl Gutiérrez Lombardo (México): ''La filosofía desde la ciencia'' (2015) y ''Técnica y Ser Humano'' (2017).


== Obra ==
== Obra ==

Revisión del 11:06 25 nov 2017

José Sanmartín Esplugues (Valencia, 17 de marzo de 1948) es un filósofo y escritor español cuyas aportaciones se han realizado en el área de las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad, y en los estudios sobre violencia.

José Sanmartín Esplugues.

Biografía

Cursó el bachillerato en el Instituto Luis Vives de su ciudad natal y sus estudios universitarios de filosofía (1965-1970) en la Universidad de Valencia. Se especializó en lógica y teoría de la ciencia. En enero de 1975 se incorporó como becario de investigación de la Fundación Alexander von Humboldt al departamento dirigido por Christian Thiel (Escuela de Erlangen) en la Universidad Técnica de Aquisgrán (Aachen). Durante su estancia en Alemania, aunque sus intereses se centraban en tratar de entender y resolver algunos problemas relacionados con la hipótesis del continuo, su relación con Manuel Medina -profesor en la Universidad de Erlangen por aquel tiempo- despertó en él el interés por cuestiones que iban mucho más allá de ver la ciencia como un mero tinglado lingüístico al que aplicar el análisis lógico.

Nacimiento de INVESCIT

En 1984, tras obtener en concurso-oposición la cátedra de filosofía de la ciencia de la Universidad de Valencia, se inició una serie de contactos con Manuel Medina (Universidad de Barcelona) y Nicanor Ursua (Universidad del País Vasco) a fin de unir esfuerzos para tratar de contrapesar el dominio que la aproximación analítica tenía en la filosofía de la ciencia (caracterizada por sus intentos de reconstrucción lógica de las teorías científicas) mediante el desarrollo de un programa de investigación que, ante todo, tratara de clarificar las relaciones entre la ciencia, la técnica y sus impactos sociales y ambientales. En 1985 Manuel Medina, José Sanmartín Esplugues, José Antonio López Cerezo (Universidad de Valencia) y Esteban Requena (IES Guadix) fundaron en Almería el Instituto de Investigaciones sobre la Ciencia y la Tecnología “INVESCIT” y crearon como vía de exposición de sus desarrollos dos colecciones en la Editorial Anthropos de Barcelona: una de ellas dirigida por Nicanor Ursua (“Nueva Ciencia”) y otra por Manuel Medina (TECNAS). José Sanmartín Esplugues fue elegido director de INVESCIT.
El instituto creció, incorporándose a él, entre otros, Eduardo Aibar y Roberto Méndez (Universidad de Barcelona), José Luis Luján y Jesús Conill (Universidad de Valencia), Mari Carmen Sánchez Monserrate (Murcia) y, eventualmente, Javier de Lorenzo (Universidad de Valladolid) y Carlos Castrodeza (Universidad Complutense de Madrid).

Los Nuevos Redentores

En 1986, José Sanmartín Esplugues realizó una estancia de investigación en el Instituto Max Planck de Fisiología de la Conducta (Seeviesen) donde escribió el libro que contendría, con carácter embrionario, ideas desarrolladas en sus posteriores textos y artículos hasta el más reciente (Técnica y ser humano, México, 2017). El libro, publicado en 1987 por la Editorial Anthropos, lleva por título Los Nuevos Redentores, con un subtítulo muy largo pero clarificador: reflexiones sobre la ingeniería genética, la sociobiología y el mundo feliz que nos prometen. En este ensayo el autor trata de clarificar las relaciones entre ciencia y técnica en el complejo denominado comúnmente “tecnología”: tradicionalmente se sostiene que la ciencia (entendida en su visión moderna) identifica las causas sobre las que luego incide la técnica, intentando controlarlas (reducirlas —incluso, erradicarlas— o potenciarlas según nuestros intereses). En Los Nuevos Redentores, José Sanmartín Esplugues intenta poner de manifiesto que ese control —que pensadores como Scheler u Ortega consideran que ha sido el elemento clave en el proceso de humanización al permitirnos dejar de ser individuos menesterosos o necesitados (un ser enfermo, llega a decirse; un verdadero callejón biológico sin salida— ha superado las dos grandes fronteras que impedían al ser humano entrar en el sancta sanctorum de la realidad física (el interior del átomo) y de la biología humana (el interior de la célula y, en particular, en su genoma). La ingeniería genética, que hacia 1985 estaba todavía en sus inicios, se convierte en Los Nuevos Redentores en objeto de reflexión filosófica para poner de manifiesto que la era de la producción de prótesis complementarias de lo humano empezaba a dejar paso a la reconstrucción del propio ser humano desde dentro, librándole de aquellos aspectos que, sobre todo los filósofos de la primera mitad del siglo XX, se habían empeñado en ver como grandes defectos: enfermedades varias e, incluso, la muerte.
En este sentido, Los Nuevos Redentores, hace ya 30 años, comenzó a plantear los problemas tan en boga hoy en día en el ámbito de la reflexión trans y posthumanista. El escándalo que Los Nuevos Redentores causó entre los filósofos analíticos y, en particular, entre célebres biólogos de la época, fue tremendo. Algún filósofo llegó a aseverar que era imposible, incluso estúpido, intentar hacer filosofía de la máquina de fotografiar; menos aún, pues, de técnicas tan refinadas como las genéticas. En el caso de buena parte de los biólogos, la crítica se redujo a la pura descalificación: ¿cómo podía atreverse un filósofo de la ciencia a demandar la necesidad de realizar una evaluación de los impactos sociales y medioambientales de la ingeniería genética previamente a su desarrollo o aplicación práctica? ¿Cómo se podían poner en duda las mejoras que la ingeniería genética humana, a través del diagnóstico y de la terapia génica, iba a producir librándonos de múltiples desórdenes?

Revista Anthropos: José Sanmartín. Filosofía crítica de la ciencia

La revista Anthropos contribuyó a animar el debate, dedicándole en 1988 un número doble, bajo el título de “José Sanmartín. Filosofía crítica de la ciencia”. En esta revista diversos miembros de INVESCIT desarrollaron ideas cruciales del instituto, en particular: 1.

  1. que habitualmente la técnica va primero y que la ciencia suele tratar de identificar las causas sobre las que la técnica, de manera en ocasiones casual que no causal, ha estado incidiendo previamente; ´
  2. 2. que la ciencia, pues, no puede ni debe reducirse a su parte articulada en forma de teorías científicas, siendo entonces la tarea principal del filósofo de la ciencia la reconstrucción lógico-axiomática de las mismas;
  3. 3. que la ciencia —desde la Modernidad— ha tenido por objetivo el control de la naturaleza (en el sentido amplio del término) y que, en ese objetivo, han coincidido racionalistas como Descartes o empiristas como Bacon;
  4. 4. que la conexión ciencia-técnica (generando lo que ha dado en llamarse “tecnología”) no es inocua: al percibirse la técnica como un elemento que nos libera de los dictados de una naturaleza hostil, al librarnos en suma de satisfacer necesidades básicas como lo hacen el resto de los animales y propiciarnos de este modo la posibilidad de invertir el proceso evolutivo haciendo que sea la naturaleza quien se adapte a nosotros y no al revés;
  5. 5. que la tecnología nos está permitiendo ya no sólo complementarnos externamente, sino reconstruirnos desde dentro.

Como se observa todas estas ideas, de una u otra forma, han estado presentes en el panorama filosófico durante estas últimas décadas.

En 1989, de nuevo la revista Anthropos dedicó un número doble (uno con contribuciones originales y otro con lecturas) al instituto INVESCIT. En esta revista se ahondó en la visión propia que el Instituto estaba cultivando en Filosofía de la Tecnología en línea principalmente con los desarrollos de Carl Mitcham y la Society for Philosophy and Tecnology. Se pusieron así las bases de lo que, con el tiempo, se convertiría en una línea de investigación y docencia potentes en España: los estudios CTS, en una vertiente esencialmente crítica. Sobre esta base, se propuso un programa de doctorado (TECNAS: Tecnología, Ciencia, Naturaleza y Sociedad) interuniversitario —aunque centralizado en la Universidad de Valencia— que tendría un gran éxito, atrayendo además estudiantes latinoamericanos que, con el tiempo, han jugado un papel crucial en el desarrollo de este tipo de estudios en sus respectivos países (por ejemplo, María Teresa Santander en Chile o Raúl Gutiérrez Lombardo en México).

Tecnología y futuro humano

En 1990, José Sanmartín Esplugues publicó un libro que sigue citándose (de hecho, es su segunda obra más citada según Google Scholar): Tecnología y Futuro Humano. Una de las ideas cruciales que en él se desarrollan es que, desde los años 80, estamos inmersos en una tercera fase del proceso de humanización. En la primera, sólo éramos un elemento más de la naturaleza, sujeto a los mismos mecanismos evolutivos que los restantes seres vivos. La segunda se iniciaría con el nacimiento y desarrollo de técnicas que nos han permitido la liberación de lo que a menudo se denomina “la dictadura de la naturaleza”. Tal liberación se produce mediante el desarrollo de elementos mecánicos fácilmente identificables como artificiales. En la tercera fase la característica más destacada quizá sea que el ideal de síntesis (de lo que existe o no existe en la naturaleza), propio en un principio de la química, se ha extendido a otros ámbitos científico-técnicos y, muy en particular, a la biología —a la denominada “biología sintética”, tan de moda actualmente—. De nuevo, una idea que está dando mucho que hablar y que escribir hoy en día (la biología sintética) estaba ya presente en uno de mis escritos iniciales. Entre 1992 y 1994, el Instituto INVESCIT realizó numerosas publicaciones, cada vez más escoradas hacia el complejo CTS . Influyeron en ello varios hechos: primero, la creciente colaboración con Carl Mitcham, L. Winner, Paul Durbin, S. Cutcliffe, y un largo etcétera de filósofos y sociólogos de la ciencia y de la técnica de EE.UU. Este proceso de acercamiento se consolidaría con la elección en 1995 de José Sanmartín Esplugues como Vicepresidente/Presidente de la Society for Philosophy and Technology (SPT) a la que pertenecían los autores citados; segundo, el nombramiento de José Sanmartín Esplugues como vicepresidente de la European Association on Society, Science and Technology, radicada en Bruselas con el apoyo de la Comisión Europea; tercero, el encargo por parte de dicha Comisión Europea de que actuase como contractor de un proyecto de investigación-docencia dentro del Programa Tempus para Hungría y Checoslovaquia (que entonces existía como tal) tras la caída del ‘muro’. El proyecto versaba sobre Evaluación Social de la Ciencia y la Tecnología.

A partir de 1992, aproximadamente, comenzó a evidenciarse un cierto distanciamiento entre quienes integrábamos INVESCIT. El distanciamiento, principalmente, de tipo teórico, fue creciendo con el transcurso del tiempo. El grupo de Valencia (Cerezo, Luján, el propio José Sanmartín Esplugues) estaba cada vez más interesado en una CTS en vertiente crítica, en línea con los planteamientos, principalmente, de Carl Mitcham o Riccardo Petrella. Otros grupos y, en particular, el liderado por Manuel Medina en Barcelona (en el que destacaba Eduardo Aibar) se inclinaron de manera decidida por el constructivismo social en línea con S. Woolgar, B. Bijker y, sobre todo, Bruno Latour. La ruptura se produjo hacia 1996.

La violencia y sus claves. Creación del Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia

Ya desde finales de los 80 y principios de los 90, José Sanmartín Esplugues venía compaginando su interés en CTS con una preocupación creciente por uno de los grandes problemas de nuestro tiempo (aunque, por supuesto, no exclusivo de él): la violencia. Una nueva estancia de investigación en el Instituto Max Planck -ahora en sus instalaciones de Etología Humana, dirigidas por I. Eibl-Eibesfeldt-, subvencionada nuevamente por la Fundación Alexander von Humboldt, le llevó a convertir el análisis de la conducta violenta como el objeto principal de sus estudios. En 1997 se creó el Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia, del que José Sanmartín Esplugues fue nombrado director, ocupando este cargo hasta 2009. El Centro se convirtió en uno de los principales agentes de dinamización de las investigaciones sobre las bases de la violencia y alguna de sus formas principales: la violencia contra la mujer, el maltrato infantil, violencia y psicopatía, radicalización terrorista,... Los estudios del Centro sobre violencia de género a escala mundial se han convertido con el tiempo en un referente obligado. José Sanmartín Esplugues recogió las ideas clave de las investigaciones del Centro Reina Sofía en su libro La violencia y sus claves, publicado en el año 200 por la editorial Ariel. Actualmente este libro ha sido reeditado (por sexta vez) en la colección Ariel Quintaesencia -una Colección de Pequeñas Obras Maestras según la editorial-.
Sus preocupaciones en torno a la violencia le han llevado a investigar estos últimos años sobre una de sus formas más dañinas, dados sus fuertes impactos en casi todos los órdenes de la vida de la víctima: la violencia político-financiera, a la que ha dedicado su libro Bancarrota moral.
Pese a su intenso trabajo teórico sobre violencia -acompañado de su labor como activista social (fue el creador de los Centros Mujer 24h. para prestar ayuda integral a las mujeres víctimas de violencia de género)- José Sanmartín Esplugues no ha dejado de interesarse por la problemática de la relación entre ciencia-técnica y ser humano, y, aunque influido por Scheler y Ortega, pàrece haber encontrado una vía propia de desarrollo, alejada del sentimiento de hostilidad hacia la naturaleza o la creencia en el carácter enfermizo del ser humano. A ello he dedicado dos de sus últimos libros en colaboración con Raúl Gutiérrez Lombardo (México): La filosofía desde la ciencia (2015) y Técnica y Ser Humano (2017).

Obra

Tras una fase inicial dedicado a la investigación y publicación en Teoría de Conjuntos y de Modelos, ha orientado su actividad hacia dos áreas bien definidas, en las que se ha caracterizado por impulsar y desarrollar proyectos pioneros:

A) Ciencia, tecnología y sociedad. En línea con los planteamientos críticos de la Society for Philosophy of Technology (de la que fue Vicepresidente y Presidente en 1995), ha investigado sobre todo la diferencia entre técnica y tecnología, y la aplicación de la tecnología -en particular, de la ingeniería genética- al ser humano, habiendo desarrollado a este respecto diversas iniciativas en el marco de un programa de evaluación social. Desde un punto de vista filosófico, ha estado fuertemente influido por las ideas de Ortega y Gasset sobre las interacciones entre ser humano y técnica, línea de pensamiento en la que viene desarrollando en los últimos tiempos sus investigaciones acerca del papel de la cultura y de la técnica en el proceso de humanización.

B) Biología, psicología y sociología de la agresividad y de la violencia. En este último ámbito, ha tratado de clarificar las diferencias entre la agresividad (reacción ante determinados estímulos) y la violencia (acción u omisión intencional y dañina), investigando las bases neurobiológicas que subyacen a una y otra así como las interacciones entre dichas bases e inputs ambientales. En el año 2000 publicó su libro La violencia y sus claves, que, incorporado en 2013 a la Colección QUINTAESENCIA de la editorial Ariel -una Colección de Pequeñas Obras Maestras-, se ha convertido en un long-seller, habiendo sido reeeditado y actualizado seis veces hasta 2016. Además, ha realizado estudios muy citados sobre maltrato infantil, violencia contra la mujer y terrorismo. Actualmente ha ampliado su esfera de investigación a la violencia económico-financiera.

Defensor a ultranza de la existencia de una naturaleza humana, una de cuyas características cruciales es para él la compasión, [1] ha analizado críticamente las bases culturales de la generación de la doctrina del ser humano como naturalmente egoísta, doctrina al servicio de ideologías economicistas que, particularmente en las últimas décadas, han tratado de minar la necesidad y la credibilidad de la filosofía como reflexión radical, promoviendo su consiguiente desaparición del curriculum educativo.

Además de su producción científica sobre los temas acabados de citar, José Sanmartín Esplugues ha promovido diversas iniciativas sociales en defensa, en particular, de los derechos de la mujer y del menor. Así, en 1996 fundó los Centros Mujer 24 horas, dedicados a dispensar ayuda integral a la mujer víctima de violencia de género, institución pionera en España.

Nombramientos

  • 1991-1993. Vicepresidente de European Inter-university Association on Society, Science and Technology (ESST).
  • 1993-1995. Vice-Presidente y Presidente de The Society for Philosophy and Technology(SPT)[2].
  • 1997-2009. Director del Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.
  • 1998-2001. Director de la Sede de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Valencia.
  • 2007-. Miembro del Pleno del Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar como personalidad de reconocido prestigio.
  • 2008-2011. Rector de la Universidad Internacional Valenciana (Universidad online, actualmente propiedad del Grupo Planeta)
  • 2014-. Miembro Honorario del Centro de Estudios Filosóficos, Políticos y Sociales "Vicente Lombardo Toledano", dependiente de la Secretaria de Educación Pública del Gobierno de México y codirector de la revista Ludus vitalis.

Lista de libros de autor por orden cronológico

Lista de libros y números monográficos de revista como coordinador

  • 1987. La sociedad naturalizada. Genética y conducta. Valencia: Tirant lo Blanch.
  • 1990. Ciencia, Tecnología y Sociedad. Barcelona: Anthropos. ISBN 84-7658-223-4.
  • 1991. Gen-Etica: el impacto social de la ingeniería genética humana. Madrid: Arbor. ISSN 0210-1963.
  • 1992. New Worlds, New Technologies, New Issues. London and Toronto: Associated Univ. Presses. ISBN 0-934223-24-6.
  • 1992. Estudios sobre sociedad y tecnología. Barcelona: Anthropos.
  • 1994. Superando fronteras. Barcelona: Anthropos.
  • 1997. Violence: From Biology to Society. Amsterdam: Elsevier. ISBN 0 444 82572X.
  • 1998. Violencia, televisión y cine. Barcelona: Ariel. ISBN 84-344-7465-4.
  • 1999. Violencia contra niños. Barcelona: Ariel.
  • 2000. Violencia y psicopatía. Barcelona: Ariel. ISBN 84-344-7470-0 [2001.Violence and Psychopathy. New York: Kluwer Academic. ISBN 0-306-46669-4]
  • 2004. El laberinto de la violencia. Barcelona: Ariel. ISBN 84-344-7475-1.
  • 2006. ¿Qué es esa cosa llamada violencia? México: Diario de Campo. [4]
  • 2007. Los escenarios de la violencia. Barcelona: Ariel. ISBN 978-84-344-7484-0.
  • 2010. Reflexiones sobre la violencia. México: Siglo XXI.ISBN 978-607-03-0173-5.
  • 2014. La filosofía desde la ciencia (coord. juntamente con Raúl Gutiérrez Lombardo). México: Centro Lombardo Toledano. ISBN 978-607-466-067-8.[5]
  • 2017. Técnica y ser humano (coord. juntamente con Raúl Gutiérrez Lombardo). México: Centro Lombardo Toledano. ISBN 978-607-466-093-7.[6]

Lista de informes de los que ha sido (co)autor

  • La ciudad de Valencia ante la violencia contra la mujer en la pareja, Serie Documentos del Centro Reina Sofía, nº. 7, 2005.
  • Costes de la violencia de género en las relaciones de pareja, Serie Documentos del Centro Reina Sofía, nº. 10, 2007.
  • Problemas de conducta en escolares, [7] Serie Documentos del Centro Reina Sofía, nº. 12, 2007.

Lista de informes de los que ha sido director

  • Ética y Televisión, Serie Documentos del Centro Reina Sofía, n°. 1, 1998.
  • Maltrato Infantil en la familia. España (1997-1998), Serie Documentos del Centro Reina Sofía, nº. 4, 2002.
  • Informe Internacional. Violencia en las relaciones de pareja: estadísticas y legislación, Serie Documentos del Centro Reina Sofía, n°. 5, 2003.
  • II Informe Internacional. Violencia en las relaciones de pareja: estadísticas y legislación,[8] Serie Documentos del Centro Reina Sofía, n°. 11, 2006.
  • III Informe Internacional. Violencia en las relaciones de pareja: estadísticas y legislación, [9] Serie Documentos del Centro Reina Sofía, 2010.
  • Maltrato infantil en la familia en España, [10] Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, 2011.

Algunos artículos

  • "Somos monos, pero menos"[11]. Theoria: Revista de teoría, historia y fundamentos de la ciencia, vol. 2, nº. 4, 1986-1987 , 157-178.
  • (con José A. López Cerezo y Marta González)"Filosofía actual de la ciencia". Diálogo filosófico, nº. 29, 1994 , 164-208.
  • "La tecnología en la sociedad de fin de siglo"[12]. Teorema: Revista internacional de filosofía, vol. 17, nº. 3, 1998,71-86.
  • "¿Qué es violencia? Una aproximación al concepto y a la clasificación de la violencia"[13]. Daimon, nº. 42, 2007, 9-21.
  • "¿Hay violencia justa? Reflexiones sobre la violencia y la justicia basada en los derechos humanos [14]. Daimon, nº. 43, 2008, 7-14.
  • "Éticas teleológicas y terrorismo islamista"[15]. Isegoria, nº. 46, 2012, 17-47.
  • "Claves para entender la violencia en el siglo XXI"[16]. Ludus Vitalis, vol. XX, nº. 38, 2012, 145-160.
  • "Huyendo de los extremos. Conciliación (Consilience) en la explicación del comportamiento violento humano"[17].Contrastes. Suplemento, nº. 18, 2013, 269-286
  • "Ensayo de filosofía impertinente"[18]. "SCIO", nº 10, 2014, 145-166.
  • "La técnica y el proceso de humanización. En diálogo con José Ortega y Gasset". "Investigación y Ciencia", nº 490, julio 2017, 50-51.

Sobre José Sanmartín Esplugues

  • 1988. José Sanmartín. Filosofía crítica de la ciencia. Revista Anthropos, nº. 82-83.
  • Gonzalo Diaz Diaz (2003). Hombres y documentos de la filosofía española, vol. 7, 157-164. Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas. ISBN 978-84-00-08145-4.
  • Perfil [19] de José Sanmartín Esplugues en Google Scholar.
  • Entrevista en [20].
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