Tiempo de retorno energético

El tiempo de retorno energético es el tiempo necesario para recuperar la energía invertida en la fabricación de un aprovechamiento energético renovable. Por ejemplo, según algunos estudios (no existe consenso al respecto), la energía invertida en un célula fotovoltaica se recupera aproximadamente entre los 2 y los 7 años de utilización. Si una célula fotovoltaica deja de funcionar antes de esa fecha, habrá supuesto un gasto energético en vez de una fuente de energía: habría sido mejor no haberla fabricado.

Este concepto está íntimamente relacionado con la tasa de retorno energético de un aprovechamiento energético renovable, que compara el tiempo de retorno energético de un dispositivo frente a vida útil estimada de dicho dispositivo, para determinar su eficiencia energética real.

Lamentablemente, el cálculo de los tiempos y tasas de retorno energético es extremadamente complejo, por lo que no es infrecuente encontrar resultados que difieren incluso en un orden de magnitud.

- MEDIDA DE AHORRO ENERGÉTICO GENERAL. AHORRO DEL QUE SE VENEFICIARÁ LA CIUDAD Y SUS POBLADORES. El ahorro al que se hace referencia; se consigue con energía solar. Es decir, energía limpia y por tanto ecológica. Dada la privilegiada posición geográfica de Marbella. De sus horas anuales de sol, uno de los mayores de nuestro país. Y por fin, la adecuada infraestructura con la que ya cuenta la ciudad. El plan es tremendamente sencillo. Consiste, tan solo, en intercambiar el calor solar que se acumula en el asfalto o pavimento de la autopista del mediterráneo, por poner un ejemplo. Ya que hay varias más, dignas de estudio, como son la Av Canovas del Castillo y la nacional N-340. Por ejemplo. La especial disposición estratégica de esta autopista, E-15, que pasa sobre la mayor parte de la ciudad. Esta vía es un gigantesco colector solar de alto rendimiento, llaga a calentarse con facilidad, en verano, a temperaturas cercanas a los 60º C. Una idea atrevida, pero sin duda eficaz, sería hacer pasar una o varias tuberías especialmente diseñadas para la ocasión, junto a la autopista durante kilómetros de recorrido. Formada por el asfalto e intercambiadores térmicos especiales cada cierta distancia. El calor de la superficie del asfalto de las carreteras pasa, en parte, a la tubería de agua que corre a su costado. El objetivo es calentar el agua de consumo público que corre por la/s tuberías desde los 14º C actuales, hasta los 18º C. Dado que la actividad humana exige cada vez más energía y mucha de esta energía la consumimos en nuestros quehaceres diarios como son: la ducha, el baño, la higiene en general. En hostelería el consumo (de agua caliente) es especialmente notable por muchas razones. En definitiva un aumento de 4º C en el agua de consumo público. Es decir, la que sale por el grifo o ducha de casa. Estos 4º C suponen un ahorro considerable de energía. Suponiendo que la media del agua que se calienta para uso hogareño es de 36º C. (36º C es quizá una media muy elevada, lejos de la realidad, puesta a propósito por exceso) supondría un ahorro en cada hogar del 18,2 %. Lo que es realmente interesante. Un simple calculo, nos dirá que cantidad de metros cuadrados de asfalto son necesarios para calentar 4º C una cantidad determinada de agua en un tiempo determinado. El tiempo; sería aquel que el agua esté junto a la vía intercambiando calor. Esto daría una idea de la dimensión del proyecto. El proyecto “PLAYA DE AGUA CALIENTE” consiste en calentar agua marina. La cual se transporta, por bombeo, de una parte de la playa a otra. Haciéndola pasar a lo largo del paseo marítimo, que hará de colector térmico en este caso. El alquitrán es una sustancia muy adiabática. También tiene la propiedad de ser, por su color y composición (orgánica) un perfecto colector térmico solar. Es decir tiene un alto rendimiento en transformar la energía solar en energía térmica.

Esta cualidad intrínseca a toda vía pública, es apta para ser aprovechada en todas y cada una de las vías públicas, de la ciudad y su entorno.

- TUBOS DE ESCAPE MIRANDO HACIA EL SUELO. Para calentar asfalto y este calienta agua de consumo general. Idea especialmente indicada para las zonas de la ciudad con gran densidad de tráfico, atascos y semáforos. El propósito consiste en aprovechar junto al calentamiento que el sol produce en el asfalto. A ello le sumamos en aquellas vías o zonas de la ciudad donde el tráfico es especialmente lento, para transferir parte del calor que emiten los coches al medio ambiente por medio del tubo de escape al asfalto de la calzada. Y esto se hace tan sencillamente como hacer girar los gases de escape hacia el asfalto directamente. La solución es ideal, aprovecha como fuente de energía lo que ahora es tan solo contaminación térmica y atmosférica ya que se aprovecha un desecho. Utilizada de forma imaginativa, esta idea puede brillar por su eficacia térmica y por la auto publicidad que generará “la proposición de unos acoplamientos de quita y pon, de muy fácil instalación a todo vehiculo que lo desee gratuitamente”. El ejemplo debe comenzar por los servicios públicos. También será necesario plantearse nuevas formas de diseñar las infraestructuras, como el diseño de una nueva distribución de la red pública de aguas. En fin, esto último, son decisiones políticas. Saludos de nuevo. Bartolome Luque Cebaquebas