Incaparina
La incaparina es una mezcla de harina de maíz y harina de soja utilizado como complemento alimenticio. Su composición también incluye vitaminas y minerales. Fue desarrollada por el bioquímico guatemalteco Ricardo Bressani en 1959.
Información nutricional
Una cucharada de incaparina (18.75g) brinda 300 kJ (70 kcal).[1] Según la página oficial de Incaparina una porción (18.75g) posee:
- Grasa Total: 1g
- Grasa Saturada: 0g
- Colesterol: 0mg
- Sodio: 0mg
- Carbohidratos: 12g
- Proteína 4g
Composición
- Harina de maíz
- Harina de soja
- Vitamina A
- Vitamina B
- Ácido Fólico
- Niacina
- Hierro
- Zinc[2][3]
Historia
Durante los años 50 el Instituto de Nutrición de Centroamérica y Panamá –INCAP- inició una serie de investigaciones para aumentar la disponibilidad de proteínas a través del consumo de alimentos de origen vegetal. Se buscaba desarrollar un alimento que consistía en una mezcla vegetal a base de harina de maíz y harina de algodón, con proteínas de alto valor biológico comparable con la proteína de origen animal, teniendo un precio más accesible para las personas de escasos recursos.
A esta mezcla se le agregó una serie de vitaminas y minerales. Particularmente vitamina A, Calcio y Riboflavina. Debido a la escasez del algodón, Incaparina fue reformulada hasta llegar a la mezcla actual de harina de maíz y harina de soja fortificada con vitaminas y minerales.
En 1959, el INCAP presentó el proyecto de INCAPARINA al consejo directivo de Corporación Castillo Hermanos para ofrecer una licencia de producción y distribución a largo plazo. El proyecto fue considerado de suma importancia como una solución integral al problema de malnutrición de la población guatemalteca.[4]