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'''Nota:''' Hablar de "alienígenas" no es totalmente correcto, pues Asimov es muy cuidadoso en describir los hábitos y pensamientos de los "seres blandos", cuyo número decrece y apenas quedan 10000. Los "seres duros", por su parte, son apenas 300 y necesitan de los blandos para su perpetuación. Asimov, cabe mencionarlo, considera este segundo capítulo como su mejor texto.{{cita requerida}}
'''Nota:''' Hablar de "alienígenas" no es totalmente correcto, pues Asimov es muy cuidadoso en describir los hábitos y pensamientos de los "seres blandos", cuyo número decrece y apenas quedan 10000. Los "seres duros", por su parte, son apenas 300 y necesitan de los blandos para su perpetuación. Asimov, cabe mencionarlo, considera este segundo capítulo como su mejor texto.{{cita requerida}}

Se ve la relacion de una raza externa de todas estas, no solo buscando supervivencia sino la realizacion y la buasqueda de nunevos poderes que los capaciten para el desarrollo y logro de su poderio en el arsenal.
son los llamado casnis de la tierra antigua en donde eran los ams sobresalientes por su poderio fisico y con gran inventiva, lo que dio envidia alos dioses y los sepulñtaron en un mundo adverso, tan fuerte este que fueronborradois de la historia y se creo otra lo cual el mundo conocio como incas peruanos, con similitudes a los casnis pero de una gran diferencia.


=== Tercera parte: ...Luchan en vano ===
=== Tercera parte: ...Luchan en vano ===

Revisión del 21:11 17 jul 2010

Los Propios Dioses
de Isaac Asimov
Género Ciencia Ficción
Subgénero Ciencia ficción Ver y modificar los datos en Wikidata
Ambientada en Luna y para-universo Ver y modificar los datos en Wikidata
Idioma Inglés
Título original "The Gods Themselves"
Editorial Doubleday
País Estados Unidos
Fecha de publicación 1972
Páginas 288
Premios
Premio Hugo
Premio a A la mejor novela
Cronología
A vuestros cuerpos dispersos de Phillip José Farmer Premio Hugo Cita con Rama de Arthur C. Clarke
Premio Nébula
Premio a A la mejor novela
Cronología
Tiempo de cambios de Robert Silverberg Premio Nébula Cita con Rama de Arthur C. Clarke

Los propios dioses es una novela de ciencia ficción publicada en el año 1972 por Isaac Asimov. Esta novela recibió los premios Hugo, Locus y Nebula.

Argumento

Esta novela se divide en tres secciones ubicadas en diferentes tiempos y lugares, incluso en dos universos diferentes. Originalmente fue publicada en revistas como tres historias consecutivas.

El título, así como cada una de las partes de la novela fueron tomadas de la frase "Contra la estupidez, los mismos dioses luchan en vano" , de la cita original "Mit der Dummheit kämpfen Götter selbst vergebens." de Friedrich Schiller (17591805).

La trama principal es una conspiración de alienígenas que habitan un universo paralelo moribundo, con el propósito de convertir el Sol en una supernova y poder colectar la energía resultante para su propio uso y continuidad de su forma de vida (curiosamente en su novela "El fin de la Eternidad" el sol se convierta en una nova, no en una supernova, cuya energía es utilizada con provecho para los viajes transtemporales).

Primera parte: Contra la estupidez...

La primera parte se desarrolla en la Tierra, donde un proceso de transferencia de energía (electrones y positrones) entre universos se realiza para obtener energía barata y en grandes cantidades. El joven físico idealista Peter Lamont descubre que dicho proceso conlleva resultados colaterales indeseables que ponen en riesgo al sol y en consecuencia la vida en el Sistema Solar. Sus intentos de advertir sobre el peligro son totalmente ignorados por el "padre" del invento, un físico de tercera fila.

Segunda parte: ...Los propios dioses...

La segunda parte toma lugar en el universo paralelo. Esta parte es totalmente memorable, pues Asimov casi siempre ha tenido preferencia en desarrollar historias con humanos, o robots. En esta novela especifica con bastantes detalles la raza alienígena. En estos alienígenas existen tres sexos, cada uno con roles definidos bastante rígidos, el racional (izquierdo), el paternal (derecho), y la emocional (central). Al ser de forma etérea pueden co-penetrar (ocupando el mismo lugar en el espacio) a los demás de su especie, principalmente con motivos sexuales. Se alimentan de energía solar en un universo donde su sol envejece y cada vez hay menos estrellas, y menos de ellos mismos.

Existe una segunda forma de vida alien, los "Duros", quienes al ser físicamente corpóreos son los únicos que poseen acceso a tecnología y manipulación de materiales, y quienes ofrecen su única esperanza, un nuevo invento, "comida" fabricada, energía obtenida directamente de un universo paralelo, el nuestro. Lamentablemente es muy poca, así que deciden convertir nuestro sol en una supernova para obtener mayores cantidades y así garantizar su propia supervivencia. La joven emocional Dua, descubre el complot y en su lucha en contra del régimen establecido descubre con ayuda de sus compañeros que al unirse sexualmente los tres, dan forma a un "duro". Después de que Dua prácticamente acabase con su existencia, agotada por su lucha por detener dicho complot, sus compañeros blandos deciden unirse a ella en forma permanente para salvarla, renunciando a su existencia individual, y en consecuencia a su propia vida, sólo para descubrir en el último segundo que ellos mismos son el nuevo líder "duro", creador del plan de destrucción.

Nota: Hablar de "alienígenas" no es totalmente correcto, pues Asimov es muy cuidadoso en describir los hábitos y pensamientos de los "seres blandos", cuyo número decrece y apenas quedan 10000. Los "seres duros", por su parte, son apenas 300 y necesitan de los blandos para su perpetuación. Asimov, cabe mencionarlo, considera este segundo capítulo como su mejor texto.[cita requerida]

Tercera parte: ...Luchan en vano

La tercera parte transcurre en una sojuzgada Luna con ánimos independentistas de la Tierra. Donde el cínico estudioso de la parafísica, Denison, encuentra una solución que no dañará a nadie y beneficiará grandemente a la humanidad: buscar otro universo paralelo no habitado, contactar con él y realizar el mismo proceso que los alienígenas realizan con este universo, para nivelar el flujo de cambios en las leyes físicas (en particular, de la intensidad de la fuerza nuclear fuerte) que amenaza al Sistema Solar, restableciendo el equilibrio.

Bibliografía

  • Isaac Asimov, Los propios dioses. Tercera edición. Editorial La Factoría de Ideas (Colección Solaris Ficción 65): Madrid, 2007. ISBN 978-84-9800-354-3
  • —, Los propios dioses. Editorial Debolsillo: Barcelona, 2005. ISBN 84-9793-824-0

Véase también