El torneo se disputó en tres etapas, la primera fue una fase de grupos en la cual los 12 equipos se dividieron en dos zonas en la cual disputaron encuentros de ida y de vuelta frente a todos sus rivales grupales, los tres mejores equipos clasificaron a la zona campeonato y los últimos tres de cada grupo a la zona descenso.
En la segunda etapa se constituyeron dos zonas que fueron determinadas por los resultados de la etapa anterior, los cuatro mejores de la zona campeonato clasificaron a postemporada, mientras que el mejor de la Serie B igual obtuvo una plaza a la postemporada.
Los últimos dos equipos de la zona del descenso fueron relegados a la Serie B.