Congregación del Oratorio de san Felipe Neri Oratorianos

Construido a partir de 1747 por iniciativa de José Manuel Sardaneta, primer marqués de Rayas, quien costeó casi toda la construcción, se concluyó en 1765. En una roca tallada sobre el templo se señala que realizó su traza Fray José de la Cruz, pero que quien dirigió los trabajos fue el arquitecto y constructor de retablos Felipe de Ureña.

Considerado como el templo de mayores dimensiones de la ciudad, la fachada, tallada en piedra rosa, es de estilo barroco churrigueresco. La cúpula es neoclásica, de 1883; la original se desplomó ochenta años antes.

Tras la expulsión de los jesuitas de Nueva España, la iglesia pasó a la Congregación del Oratorio de San Felipe Neri y fue reabierta en 1794. Su sacristía contiene una excelente colección de pintura virreinal, con obras de Miguel Cabrera, Baltasar Echave Orio o José Ibarra.