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La capea rayana (Capeia arraiana en portugués) es una corrida de toros originaria de las tierras de Riba-Coa, aldeas de la frontera con España.
La Capea Rayana constituyó el primer registro del catálogo portugués del Patrimonio Cultural Inmaterial. Considerada patrimonio etnográfico, la capea rayana es conocida por ser una corrida de toros con características únicas en el mundo.
Historia[editar]
El origen de la capea rayana no está bien determinado en el tiempo, siendo conocida por la tradición oral y por la memoria colectiva de la población de los municipios. La referencia escrita más antigua se remonta a 1886 en el cuento Uma Corrida de Toiros no Sabugal, del escritor Abel Botelho, y en 1893 ya hay referencias a la Capea con el empleo del forcão.
La capea se originó en el pago que los ganaderos españoles de Salamanca harían anualmente a las aldeas de Riba-Coa, cediendo por un día algunas vacas bravas, por los daños causados por el ganado que atravesaba la raya, invadiendo los fangos y huertos. La palabra viene del castellano capea, relacionada con el acto de torear con una capa.
Rituales de la Capea rayana[editar]
Ir a buscar los toros[editar]
La fiesta comienza por la mañana cuando la gente se presenta en el lodo de donde serán escoltados los toros hasta la plaza.
Comienza un auténtico éxodo en los campos cercanos a la frontera española. El objetivo es ir a buscar los toros, que son alquilados para el evento. Los jinetes experimentados demuestran sus habilidades en el arte de la caballería y de escoltar los toros hasta la plaza del pueblo (encierro). El tiempo de la escolta varía con la habilidad de los jinetes y la reacción de los toros.
Encierro[editar]
La entrada de jinetes y toros en la plaza o a lo largo del recorrido es acompañada de los vítores de los espectadores. Momentos de incertidumbre, cuando todos entran todos en el monte y las pesadas puertas se cierran a la llegada de los toros. Un coro de palmas y gritos de ánimo suena tanto para los jinetes como para los toros.