Martinico
El martinico es un duende de la mitología castellana.
Hay testimonios de ellos desde la Edad Media. Goya los representa como enanos de gran cabeza o cabezudos, con manos grandes y ataviados con hábito frailuno o franciscano. Suelen burlarse de los humanos -sobre todo doncellas- haciendo ruidos en las alacenas, apagando súbitamente candiles o candilejas, tirando pucheros o engañando a los humanos de varias maneras. Feijoo combatió esta superstición en sus ensayos.