Diferencia entre revisiones de «Dandi»

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La definición de un dandi podría ser la de un hombre de andares preciosos, original y rebuscado, y de lenguaje escogido. Pero el dandismo no es una estética fija, sino más bien proteica. Se le suele considerar como un ejemplo de elegancia, saber estar, clase, porte, estilo, buenas maneras, una persona educada y cultivada.
La definición de un dandi podría ser la de un hombre de andares preciosos, original y rebuscado, y de lenguaje escogido. Pero el dandismo no es una estética fija, sino más bien proteica. Se le suele considerar como un ejemplo de elegancia, saber estar, clase, porte, estilo, buenas maneras, una persona educada y cultivada.


El dandismo constituye también una disciplina [[metafísica]], una postura particular respecto a la cuestión del ser y del aparecer, así como a la modernidad. Numerosos autores, la mayoría de las veces ellos mismos dandys, se interrogaron sobre su sentido. Así, en un contexto de decadencia, [[Baudelaire]] identifica el dandismo como la última hazaña posible, una búsqueda de distinción y de nobleza, de una ''[[aristeia]]'' ('excelencia') de la apariencia. A menudo identificado, sin razón, como una simple frivolidad, antes bien el dandismo es concebido por sus practicantes, sobre todo en el [[siglo XIX]], como una [[ascesis]] y una disciplina extremadamente rígida y exigente.
El dandismo constituye también una [[metafísica]], una postura particular respecto a la cuestión del ser y del aparecer, así como a la modernidad. Numerosos autores, la mayoría de las veces ellos mismos dandys, se interrogaron sobre su sentido. Así, en un contexto de decadencia, [[Baudelaire]] identifica el dandismo como la última hazaña posible, una búsqueda de distinción y de nobleza, de una ''[[aristeia]]'' ('excelencia') de la apariencia. A menudo identificado, sin razón, como una simple frivolidad, antes bien el dandismo es concebido por sus practicantes, sobre todo en el [[siglo XIX]], como una [[ascesis]] y una disciplina extremadamente rígida y exigente.


Si bien durante la [[época victoriana]] este tipo de mentalidad ya había sido concebida por el movimiento artístico y cultural de los [[Prerrafaelita]]s (entre cuyos exponentes cabe destacar al pintor [[Dante Gabriel Rossetti]]), el dandi más famoso fue Georges Brummell, también llamado «''[[beau Brummell]]''» ('bello Brummell'), árbitro de la elegancia en la corte inglesa. Sus más conocidos herederos fueron [[Barbey d'Aurevilly]] y [[Baudelaire]] en Francia, y [[Oscar Wilde]] en la misma Inglaterra.
Si bien durante la [[época victoriana]] este tipo de mentalidad ya había sido concebida por el movimiento artístico y cultural de los [[Prerrafaelita]]s (entre cuyos exponentes cabe destacar al pintor [[Dante Gabriel Rossetti]]), el dandi más famoso fue Georges Brummell, también llamado «''[[beau Brummell]]''» ('bello Brummell'), árbitro de la elegancia en la corte inglesa. Sus más conocidos herederos fueron [[Barbey d'Aurevilly]] y [[Baudelaire]] en Francia, y [[Oscar Wilde]] en la misma Inglaterra.

Revisión del 20:07 11 ago 2010

Dandy también es la abreviatura científica del botánico inglés James Edgar Dandy.
Dandis franceses de la década de 1830.

Un dandi (del inglés dandy)[1][2]​ es un hombre que se considera elegante y refinado, y cuya actitud ante la vida se caracteriza por la falta de deseo, la desgana, el aburrimiento y el desprecio por los gustos del vulgo.[3]​ La corriente asociada al dandi se denomina «dandismo» y tuvo su origen en la sociedad inglesa de finales del siglo XVIII.

El movimiento dandi es una doctrina de la elegancia, de la finura y la originalidad. Su estilo afecta sobre todo al lenguaje y la vestimenta.

La definición de un dandi podría ser la de un hombre de andares preciosos, original y rebuscado, y de lenguaje escogido. Pero el dandismo no es una estética fija, sino más bien proteica. Se le suele considerar como un ejemplo de elegancia, saber estar, clase, porte, estilo, buenas maneras, una persona educada y cultivada.

El dandismo constituye también una metafísica, una postura particular respecto a la cuestión del ser y del aparecer, así como a la modernidad. Numerosos autores, la mayoría de las veces ellos mismos dandys, se interrogaron sobre su sentido. Así, en un contexto de decadencia, Baudelaire identifica el dandismo como la última hazaña posible, una búsqueda de distinción y de nobleza, de una aristeia ('excelencia') de la apariencia. A menudo identificado, sin razón, como una simple frivolidad, antes bien el dandismo es concebido por sus practicantes, sobre todo en el siglo XIX, como una ascesis y una disciplina extremadamente rígida y exigente.

Si bien durante la época victoriana este tipo de mentalidad ya había sido concebida por el movimiento artístico y cultural de los Prerrafaelitas (entre cuyos exponentes cabe destacar al pintor Dante Gabriel Rossetti), el dandi más famoso fue Georges Brummell, también llamado «beau Brummell» ('bello Brummell'), árbitro de la elegancia en la corte inglesa. Sus más conocidos herederos fueron Barbey d'Aurevilly y Baudelaire en Francia, y Oscar Wilde en la misma Inglaterra.

Véase también

Referencias

  1. Definición de la Real Academia Española de la Lengua
  2. Entrada en el Diccionario Panhispánico de Dudas
  3. Cf. Laura Freixas, «El dandi, el incorruptible y el famoso», Revista de Libros, 161, mayo de 2010, pág. 27.

Enlaces externos