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Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos


Localización
País México México
Información general
Sigla CONALITEG
Tipo Descentralizado
Sede Querétaro, México y Ciudad de México
Organización
Dirección Joaquín Díez-Canedo Flores
Depende de Secretaría de Educación Pública
Presupuesto $2,400 millones MXN (2013)[1]
Historia
Fundación 1959
www.conaliteg.gob.mx


La Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (CONALITEG o Conaliteg) es un órgano público descentralizado dependiente de la Secretaria de Educación Pública (SEP) de México cuyo objetivo es proporcionar libros de texto de manera gratuita a los alumnos de educación preescolar, básica y secundaria tanto de escuelas públicas como privadas. También publica y distribuye los libros de texto gratuitos en cuarenta y dos lenguas indígenas, representativas de todo México, y en sistema braille y macrotipo para débiles visuales.

Historia[editar]

Antecedentes[editar]

Época colonial[editar]

El primer libro de texto gratuito en México se publicó en 1762[2]​. Se trataba de la biografía de Salvadora de los Santos Ramírez Martínez y llevaba el título de Carta edificante en la que el P. Antonio de Paredes de la Compañía de Jesús da noticia de la exemplar vida, sólidas virtudes y santa muerte de la Hermana Salvadora de los Santos, india otomí, donada del Beaterio de Carmelitas de la Ciudad de Querétaro. Se hizo su primera edición como libro para las escuelas de Tlatelolco y Tenochtitlan en 1784[3]​, auspiciada por los gobernantes de ambas ciudades, y hay constancia de que se siguió distribuyendo de manera gratuita en las escuelas del valle de México hasta 1821[4]​.

Periodo pre-revolucionario[editar]

No se tiene noticia de que durante el periodo posterior a la independencia de México haya habido intentos de distribuir libros de texto de manera gratuita. Tampoco se hizo así durante el Porfiriato (1876-1911), época en que la distribución y venta de los libros de texto oficiales estaba en manos de editoriales privadas. Lo que sí se hizo en esa época fue privilegiar a autores mexicanos para la redacción de libros de texto oficiales, entre estos se puede mencionar El método onomatopéyico sintético de lectura y escritura de Gregorio Torres Quintero y el Método Rébsamen de escritura-lectura de Enrique Rébsamen[5]​.

Posterior a la Revolución[editar]

Entre 1929 y 1939, auspiciados por el Plan Sexenal que iniciara el presidente Lázaro Cárdenas y que continuara Manuel Ávila Camacho la SEP publicó la serie de libros de texto gratuitos Plan Sexenal conocidos como los libros "de el sembrador" por la ilustración de la tapa. Esta serie la comprendieron tres volúmenes: Plan Sexenal Infantil, El sembrador y El porvenir. Los libros se distribuyeron únicamente en escuelas rurales y eran de la autoría del escritor Rafael Ramírez Castañeda que entonces fungía como Director del Departamento de Escuelas Rurales y, además de texto suyo, llevaban extractos de textos de Manuel José Othón, Salvador Díaz Mirón, Gabriela Mistral, José Santos Chocano y Amado Nervo, entre otros.[6]

Hacia mediados del siglo XX Jaime Torres Bodet, quien en aquel entonces ejercía su segundo ciclo como Secretario de Educación Pública, planteó la necesidad de crear un organismo que produjera y distribuyera libros de texto gratuitos en las escuelas de todo México. Torres Bodet había sido inspirado por las ediciones de distribución gratuita que al frente de la entonces llamada Secretaría de Instrucción Pública y de la entonces Universidad Nacional de México había realizado José Vasconcelos[7]​, ayudado por personajes como Julio Torri, Daniel Cosío Villegas, Eduardo Villaseñor, Carlos Pellicer, Alfonso Reyes y Samuel Ramos, y con el beneplácito del entonces presidente de México Álvaro Obregón.[8]

Creación: 1959-1976[editar]

A instancias de Torres Bodet, la Conaliteg fue creada el 12 de febrero de 1959 por decreto[9]​ del entonces presidente de México Adolfo López Mateos.

El objetivo de los libros de texto gratuitos era desde el inicio, según se planteó en el decreto: "Desarrollar a los educandos y capacitarlos para la vida práctica, fomentar la conciencia de solidaridad y las virtudes cívicas y, muy principalmente, inculcarles el amor a la patria, alimentado con el conocimiento cabal de los grandes hechos históricos que han dado fundamento a la evolución democrática de nuestro país."[10]​ El nombre original del organismo era "Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuitos"; el artículo señalado sería suprimido de su denominación oficial entre 1989 y 1999.[11]

El primer titular del organismo fue Martín Luis Guzmán y lo fue, incluso mientras fue senador, hasta su muerte en 1976. En aquel entonces, y hasta la década de 1980, el titular de la Comisión llevaba el cargo de Presidente de la misma, posteriormente[12]​ el nombre del cargo se cambiaría al de Director General. La Conaliteg entregó sus primeros ejemplares en 1960[13]​.

En 1963 el entonces presidente de México Adolfo López Mateos inaugura en Tijuana el Monumento al Libro de Texto Gratuito. En aquel entonces la educación que garantizaba la constitución era sólo la primaria, por lo que los libros entregados entonces correspondieron a los cursos de primero a quinto grado de educación básica; los libros para el sexto grado fueron entregados en 1970.[14]​ Desde entonces y hasta la fecha los libros se entregan tanto en escuelas privadas como públicas, al igual que en telesecundarias que comenzaron a operar en 1968[15]​.

Desde su creación la inciativa de crear libros de texto gratuitos estuvo rodeada de controversias, en la década de 1960 "el punto central del conflicto estribó en determinar de quién es el 'derecho legítimo' para definir los contenidos pedagógicos y orientaciones ideológicas de los libros de texto gratuitos."[16]​ Las partes enfrentadas eran por un lado el estado mexicano, a través de la SEP y la Conaliteg, y por otro la Unión Nacional de Padres de Familia, miembros del clero, militantes del Partido Acción Nacional y empresarios y organizaciones de inspiración cristiana.

1977-1994[editar]

Al fallecer Martín Luis Guzmán, los titulares que le sucedieron comenzaron a renovar los libros de texto, primero con nuevas portadas para todos los volúmenes. En 1977 la Conaliteg comenzó a publicar otras colecciones, además de los libros de texto, como las Antologías de Educación Normal.[17]

En 1972 había dado comienzo una reforma educativa en México, que tendría como primer alcance, en 1978, la creación del Consejo de Contenidos y Métodos Educativos de la SEP, y en 1980, el decreto de descentralización de la Conaliteg.[18]​ Las consecuencia directa de la descentralización de la Comisión fueron varias y van desde la capacidad aumentada para convocatorias y licitaciones públicas hasta el cambio de sede que se concretaría en 1998.

Para 1982 la Conaliteg creó su serie de monografías de los estados de la república mexicana y, a instancias de la SEP, se renovaron los libros de texto, comenzando con los de primer y segundo año de primaria.[19]​ En 1987 la Comisión buscó a artistas plásticos cuyas obras pudieran ilustrar los volúmenes para renovar aquellas que se habían encargado entre 1962 y 1972.

El terremoto de México de 1985, aunque no causó daños sustanciales a las instalaciones de la Conaliteg, sí dio inicio al proceso de cambio de sede, que aunado a la descentralización del organismo, aumentó su amplitud y presencia en México. Se eligió la ciudad de Querétaro, en específico sus alrededores, para conformar la nueva sede, que albergaría la planta de producción, "por el clima de la ciudad y de la región y por estar en lo que se podría considerar el centro geográfico del país"."[20]

En 1989 el gobierno federal, a través de la SEP, le encargó a la Conaliteg que todos los libros de texto se rehicieran por completo, como parte del programa de Modernización Educativa.[21]​ Además, en 1992 la reforma educativa a nivel nacional incrementó la producción de libros del organismo. "A pesar de la magnitud del encargo y de pasar por tres cambios de Director General en 1994, para el final de ese año la Conaliteg había cumplido por completo con los encargos hechos tanto en 1989 como en 1992." [22]

La edición de los libros de historia de 1992 se vio envuelta en polémica[23]​ puesto que grupos de académicos y de la sociedad civil criticaron "la justificación ideológica que los libros hacían del régimen salinista, así como la interpretación positiva del porfiriato y la ausencia de los 'héroes nacionales'" como los Niños Héroes.[24]​ Estas críticas fueron atendidas con la una nueva edición de estos libros en 1994 y subsecuentes, aunque se sigue criticando la ausencia de menciones a la época colonial y a la conquista de México.[25]

1995-2005[editar]

Hacia mediados de la década de 1990 la producción del organismo tuvo que aumentar para cubrir las necesidades del programa de modernización educativa y adquirió nueva maquinaria para la impresión de libros. En 1997, y a partir de la reforma constitucional en materia de educación, se amplió el programa de libros de texto gratuitos a la educación secundaria. Este programa, que paulatinamente alcanzaría a todo el territorio de México,[26]​ inicialmente benefició a los alumnos de secundaria de los 1,743 municipios de México con mayor índice de marginación.

Los contenidos de los libros de texto de ciencias naturales en materia de educación sexual, que ya habían sido polémicos en décadas pasadas volvieron a estar en el punto focal entre entre 1995 y 2006: "el libro de Ciencias Naturales para quinto año de primaria fue criticado por el contenido sobre la reproducción humana".[27]​ Autoridades de la iglesia católica y representantes de sociedades de padres de familia no avalaron se incluyeran métodos anticonceptivos (entre otras quejas) y estos se omitieron en el texto publicado.[28]

En 2001 la Conaliteg recibió el encargo de producir los libros que integrarían los seleccionados por los programas Bibliotecas de Aula y Bibliotecas Escolares. A partir de 2005 la Conaliteg amplió su oferta a otros países, como Honduras y Guatemala, a los que ha brindado asesorías o producción de libros de texto gratuitos[29]​.

En este periodo los titulares de la Conaliteg se vieron envueltos en escándalos de desvío de recursos y corrupción. De acuerdo con lo reportado en diversos diarios, en la Comisión "anualmente, de 1994 a 2000, se desviaron por lo menos 400 millones de pesos, al pagar sobreprecios en la impresión de libros de texto gratuitos."[30]​ Las anomalías que se detectaron fueron "actos ilícitos en las licitaciones para la adjudicación de contratos, convenios para servicios de transporte inexistentes o a precios muy altos y entrega incompleta de libros o en mal estado"[31]​ en el período 1994-2001. Esto mientras que entre 2001 y 2006, con otra administración, "se presume que la Conaliteg erogó en exceso 23 millones 2 mil 487 pesos, lo que contravino los artículos 134 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 30 de la entonces Ley de Adquisiciones y Obras Públicas."[32]

Los titulares de la Comisión implicados en los hechos se defendieron ante los tribunales y en la prensa, argumentando que los costos pagados eran los reales.[33]​ No obstante su defensa, un juez federal ordenó la suspensión de los derechos políticos y dictó acto de formal prisión[34]​ a Jorge Velasco y Félix, Director General del periodo 2000-2006, y a otros trece funcionarios públicos de la Conaliteg. De estos trece inculpados Jorge Velasco y Félix primero se ampararía con éxito ante la decisión del juez y luego obtendría en marzo de 2013, "un sobreseimiento de la causa penal en su contra"[35]​; otro de los funcionarios acusados saldría libre poco después del primer fallo por falta de pruebas[36]​. Por otra parte las indagatorias contra los ex Directores Generales Miguel Antonio Meza Estrada (1994-2000) y Humberto Blanco Pedrero (2000) y sus colaboradores siguen abiertas.[37]

2006-presente[editar]

En 2006 asume la dirección de la Comisión el editor Miguel Agustín Limón Macías. Es en esta época que la Comisión asume también la tarea de producir los libros de Bibliotecas de Aula y Escolares y los libros de texto en lengua inglesa[38]​. Al terminar la gestión de Limón Macías asume la Dirección General Joaquín Díez-Canedo Flores, que antes había sido Director General del Fondo de Cultura Económica, organismo también descentralizado adscrito a la SEP.

En septiembre de 2013 el Secretario de Educación Emilio Chuayffet dio a conocer que las ediciones 2013 de los libros de texto gratuitos de educación primaria producidos por la Conaliteg hay "117 errores ortográficos que nos e podían resarcir sin incumplir la entrega de libros a tiempo para el inicio de clases".[39]​ El secretario aclaró que los errores no corren a cargo de la Conaliteg sino del personal que estuvo a cargo de la Dirección General de Materiales e Informática Educativa de la SEP durante el sexenio 2006-2012 quienes editaron los libros.[40]

Entrevistado al poco de asumir la titularidad de la Comisión, Díez-Canedo refirió que "la Conaliteg cuenta con un presupuesto de dos mil 400 millones de pesos de recursos fiscales y le cuesta al Estado menos de 100 pesos por cada niño dotarlos de libros de todas las materias en todas las escuelas del país."[41]

Presidentes y Directores Generales[editar]

A pesar de que, al haber sido creada, la Comisión nombraba a sus directivos como Presidentes[42]​, la designación actual para los titulares del organismo es la de Director General.

Independientemente de su designación, las personas que han estado al frente de la Conaliteg han sido, en orden cronológico: Martín Luis Guzmán (1959-1976), Agustín Yáñez (1977-1979), Enrique González Pedrero (1979-1982), Miguel Huerta Maldonado (1982-1983), María Lavalle Urbina (1983-1984), Javier Wimer Zambrano (1984-1991), Fernando Elías Calles Álvarez (1991-1994), Francisco Javier Osornio Corres (1994), Miguel Antonio Meza Estrada (1994-2000), Humberto Blanco Pedrero (2000), Jorge Velasco y Félix (2000-2006), Miguel Agustín Limón Macías (2006-2013) y Joaquín Díez-Canedo Flores (2013- ).

Producción[editar]

La producción de libros de la Conaliteg ha aumentado del siguiente modo:

Libros producidos Periodo
17 millones 1960-1961[43]
75 millones 1980-1981[44]
125 millones 1997-1998[45]
233 millones 2013-2014[46]

Actualmente la Conaliteg publica libros de texto para preescolar, primaria, secundaria y telesecundaria, así como libros de texto en inglés. Produce también estos libros de texto gratuitos en traducciones a cuarenta y dos lenguas indígenas.

Del mismo modo, desde 1966 la Conaliteg publica libros en braille (para ciegos) y en macrotipo (para débiles visuales). Actualmente tiene capacidad para producir hasta cien tomos en braille al día y en 2007 tuvo una producción de más de ocho mil ejemplares.[47]

Ejemplares de libros de texto producidos y distribuidos por la Conaliteg[48]

Programa Producción 2013-2014
Preescolar 10,510,500
Primaria 151,329,775
Telesecundaria 23,510,020
Secundaria 29,703,395
Educación indígena 5,188,830
Macrotipo 194,900
Braille 32,565
Inglés 13,388,800
Total 233,858,785

La realización de los contenidos y edición de los libros "no corre a cargo de la Conaliteg sino de Direcciones operativas determinadas dependientes de la SEP".[49]​ Los libros de preescolar, primaria, secundaria y telesecundaria, así como los publicados en braille y macrotipo y los destinados a Bibliotecas Escolares y de Aula dependen de la Dirección General de Materiales e Informática Educativa; los libros en inglés los crea la Dirección General de Desarrollo Curricular a través del Programa Nacional de Inglés en la Educación Básica; y la Dirección General de Educación Indígena se hace cargo de los libros en lenguas indígenas. Los costos de producción de los libros de texto para secundaria son cubiertos por cada estado de la república en un 25% y el resto lo aporta la Conaliteg.[50]

En sus plantas de Querétaro la Conaliteg realiza por sí sola la impresión de aproximadamente 35 millones de ejemplares al año[51]​.

A pesar de que cuenta con dos rotativas[52]​, dos trenes de encuadernación de libros[53]​ y una prensa plana para la impresión de portadas[54]​ en su planta de Querétaro, dado que requiere cubrir una oferta de más de 230 millones de ejemplares al año, lo que no puede producir por sí misma es otorgado y realizado bajo licitación pública a empresas particulares.

Sedes[editar]

La Conaliteg siempre ha tenido varias sedes. Las primeras sedes estaban ubicadas en las ciudad de México en la calle de Bucareli (oficinas administrativas) y, a partir de 1962, en la calle de Dr. Río de la Loza (planta de producción) en la Colonia Doctores[55]​. Este edificio, que albergaría las imprentas de la Comisión casi desde su fundación hasta 1997, lo ocupa ahora la sede de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal. En 1997 la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente recomendara la suspensión definitiva de las labores en la Ciudad de México, lo que provocaría su traslado definitivo a Querétaro.

Actualmente la Conaliteg cuenta con tres sedes: las oficinas centrales en la colonia San Ángel en el Distrito Federal, el almacén central y las oficinas administrativas ubicadas en Tequesquináhuac (inauguradas en 1982), Tlalnepantla, Estado de México, y la planta de producción ubicada en el municipio de El Marqués, en Querétaro, inaugurada en 1998.[56]​ En 2002 esta planta recibió el certificado de “industria limpia”, expedido por la misma Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.[57]

Ilustraciones[editar]

La Conaliteg actualmente utiliza la obra de artistas como David Alfaro Siqueiros, Roberto Montenegro, Alfredo Zalce, Fernando Leal y Raúl Anguiano[58]​ para las portadas de los libros de texto. Estas obras fueron comisionadas por la Comisión en 1959 y fueron usadas en los primeros libros hasta 1962.

Entre 1962 y 1972 fue empleada exclusivamente la obra de Jorge González Camarena conocida como La Patria para la portada de más de 350 títulos. La pintura fue hecha por encargo directo de la Comisión. Este uso convirtió a la obra y al pintor en iconos de los libros educativos. La mujer en la que González Camarena se inspiró para el óleo se llamaba Victoria Dornelas, a decir de Marcel González Camarena, nieto del pintor[59]​.

En 1972 se cambió el diseño de portadas por ilustraciones, con elementos de arte popular mexicano, de Juan Ramón Arana. Estas estarían en uso hasta 1979 año en que se cambiarían por escenas de la historia patria o retratos de los héroes, tomados de los murales y la obra de caballete de artistas de la llamada "Escuela Mexicana de Pintura"[60]​. En 1982 la Comisión encargó a Carlos Palleiro y Felipe Dávalos el diseño de portadas e interiores, mismas que estarían en uso hasta 1987.

En 1987 la Conaliteg encarga portadas e ilustraciones a un numeroso grupo de artistas plásticos[61]​, como: Gilberto Aceves Navarro, Arnold Belkin, Alberto Beltrán, Leonora Carrington, Rafael Cauduro, Arnaldo Coen, Rafael Coronel, Olga Costa, José Luis Cuevas, José Chávez Morado, Xavier Esqueda, Manuel Felguérez, Pedro Friedeberg, Elvira Gascón, Gunther Gerszo, Alberto Gironella, Mathías Goeritz, Teodoro González de León, Roger von Gunten, Joy Laville, Águeda Lozano, Guillermo Meza, Francisco Moreno Capdevilla, Luis Nishizawa, Brian Nissen, Antonio Peláez, Vicente Rojo, Sebastián, Juan Soriano, Nunik Sauret, Rufino Tamayo y Francisco Toledo. Estas portadas e ilustraciones comenzaron a aparecer en los libros en 1988. Los interiores de los libros serían rediseñados en 1993 por Luis Almeida.

Bibliotecas de Aula y Bibliotecas Escolares[editar]

La inspiración para los programas de Bibliotecas de Aula y Bibliotecas Escolares proviene de 1921, cuando el entonces Secretario de Educación José Vasconcelos ordenó la producción de 21,000 ejemplares de Lecturas clásicas, en dos tomos, para obsequiar a estudiantes.

La Conaliteg es, desde 2001 cuando se crearon, la productora de los programas Bibliotecas de Aula y Bibliotecas Escolares, coordinados por el Conaculta y auspiciados por el Programa Nacional de Lectura de la SEP. El objetivo de los programas Bibliotecas de Aula y Bibliotecas Escolares es poner una biblioteca en cada salón de clases de México, para acercar a niños, jóvenes y adultos de todas las escuelas del país a libros de calidad. A inicios de 2013 se encuentran en operación casi cuatro millones de Bibliotecas de Aula y Escolares, cada una con un acervo de más de dos mil títulos[62]​. De acuerdo con la Conaliteg, la producción prevista para estos programas rebasa los 22 millones de ejemplares anualmente[63]​.

Prueba ENLACE[editar]

Mientras se ha realizado, la prueba ENLACE ha sido la evaluación educativa de más alcance en México. La prueba misma, para 13.5 millones (2012) de estudiantes de primaria, secundaria y educación media superior, la produce, imprime y distribuye la Conaliteg en todas sus ediciones. La logística de la elaboración y distribución del mismo número de exámenes incluye sistemas de seguridad para que no se filtrasen los exámenes o sus resultados previo a su realización, la personificación de cada prueba con nombre y número de cada estudiante, y la entrega simultánea de la prueba en todas las escuelas de México[64]​.

Censo[editar]

La Conaliteg imprimió para el Instituto Nacional de Estadística y Geografía los 47.3 millones de documentos y 31.2 millones de cuestionarios[65]​ que se necesitaron para el Censo de Población y Vivienda 2010.

Reciclaje[editar]

El programa "Recicla para Leer", creado por decreto presidencial del 21 de febrero de 2006[66]​, obliga a todas las dependencias del gobierno de México a que donen sus desperdicios y sobrantes de papel a la Conaliteg para que esta, a su vez, se lo entregue a proveedores para el reciclado del mismo y así pueda producir, con ese papel, más libros. Entre 2006 y 2012 la Conaliteg obtuvo, por este medio, 103 mil 757.40 toneladas de papel y cartón, que se tradujo en una reducción del gasto de 135.5 millones de pesos y evitó la tala de una extensión de bosque similar a ocho veces el tamaño de la Alameda Central[67]​.

Bibliografía sobre la Conaliteg[editar]

  • Entre paradojas: a 50 años de los libros de texto gratuitos. Barriga Villanueva, Rebeca (ed.). México: El Colegio de México / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074623345
  • El libro de los que hacen libros. Testimonios de trabajadores de la Conaliteg. VV. AA.. México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960044
  • La transición de la Conaliteg. La descentralización de 1980. Salvador Orozco, Juan y Luz Oliva Badillo Badillo. México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960242
  • La vulnerabilidad infantil y el potencial de la Conaliteg. Aguilar, Luis Mario y Maya Medrano. México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960228
  • Los libros de texto gratuitos: Una política de estado en México. Limón Macías, Miguel Agustín y José Luis Cuéllar Garza (coords.). México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960198
  • La ruta del libro. Salvador Orozco, Juan. México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960235
  • El libro de todos: 52 años, 52 entrevistas. Salvador Orozco, Juan. México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960181
  • La trinchera del tiempo. Martín Luis Guzmán y el libro de texto gratuito. Hernández G., Bertha. México: Secretaría de Educación Pública / Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. ISBN 9786074960259

Televisión[editar]

Además de la producción en específico para las series de telesecundaria, el 18 de junio de 2005 se transmitió por los canales 2 y 4 de Televisa el programa Mi primer libro. Historia de los Libros de Texto Gratuito, producido para la Conaliteg por Editorial Clío.[68]

Referencias[editar]

  1. http://www.elperiodicodemexico.com/nota.php?id=686717
  2. Tanck de Estrada, Dorothy (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 55. ISBN 9786074623345. 
  3. Tanck de Estrada, Dorothy (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 62. ISBN 9786074623345. 
  4. Martínez Baracs, Rodrigo (enero-junio de 2012). Estudios de Cultura Náhuatl 43: 215-276 [www.revistas.unam.mx/index.php/ecn/article/download/30534/28358 www.revistas.unam.mx/index.php/ecn/article/download/30534/28358] |url= incorrecta (ayuda) |url= sin título (ayuda). Consultado el 31 de mayo de 2013. 
  5. Loyo, Engracia (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 96. ISBN 9786074623345. 
  6. Loyo, Engracia (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. pp. 100-104. ISBN 9786074623345. 
  7. Loyo Brambila, Aurora (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 195. ISBN 9786074623345. 
  8. Garciadiego, Javier (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 90. ISBN 9786074623345. 
  9. «DECRETO por el que se crea la Comisión Nacional de Libros de texto Gratuitos como Organismo Público Descentralizado». 13 de febrero de 1959. Consultado el 12 de mayo de 2013. 
  10. «12 de febrero de 1958.- Creación de la Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuito». Red escolar ILCE México. Consultado el 26 de mayo de 2013. 
  11. «Historia de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos». Página oficial de la Conaliteg. enero, 2010. Consultado el 25 de mayo de 2013. 
  12. «Historia de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos». Página oficial de la Conaliteg. enero, 2010. Consultado el 25 de mayo de 2013. 
  13. «12 de febrero de 1958.- Creación de la Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuito». Consultado el 12 de mayo de 2013. «Los primeros libros de texto gratuito se repartieron en 1960, cubriendo las necesidades de primero a quinto grados de primaria». 
  14. Hernández G., Bertha (2009). La trinchera del tiempo. Martín Luis Guzmán y el libro de texto gratuito. SEP. p. 93. ISBN 9786074960259. 
  15. Cortés Valadez, Joel (Diciembre 2004.). «Telesecundaria en México.». Consultado el 2 de julio de 2010. 
  16. Villa Lever, Lorenza (2011). Entre paradojas: a 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 161. ISBN 9786074623345. 
  17. Hernández G., Bertha (2009). La trinchera del tiempo. Martín Luis Guzmán y el libro de texto gratuito. SEP. p. 118. ISBN 9786074960259. 
  18. Salvador Orozco, Juan (2011). La transición de la Conaliteg. La descentralización de 1980. SEP. p. 24. ISBN 9786074960242. 
  19. Limón Macías, Miguel Agustín (2012). Los libros de texto gratuitos: Una política de estado en México. SEP. p. 53. ISBN 9786074960198. 
  20. Salvador Orozco, Juan (2011). La transición de la Conaliteg. La descentralización de 1980. SEP. p. 89. ISBN 9786074960242. 
  21. Loyo, Engracia (2009). Rebeca Barriga Villanueva, ed. Entre paradojas: A 50 años de los libros de texto gratuitos. El Colegio de México. p. 98. ISBN 9786074623345. 
  22. Limón Macías, Miguel Agustín (2012). Los libros de texto gratuitos: Una política de estado en México. SEP. p. 67. ISBN 9786074960198. 
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