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Así no podemos seguir: Política, energía y medioambiente
de Raúl Sohr
Género Ensayo
Edición original en español
Cubierta Rommy Rivera
Editorial Debate
País Chile
Fecha de publicación 2013
Páginas 192

Así no podemos seguir: Política, energía y medioambiente es un ensayo del escritor chileno, sociólogo, periodista y analista internacional Raúl Sohr. Este ensayo es su más reciente publicación, un libro que mezcla tres temas de vanguardia en el mundo actual y los relaciona respecto a hechos y problemas energéticos que han ocurrido a lo largo de la historia tanto internacional como nacional, además da una mirada respecto a la ecología y como entender a los verdes del mundo, junto con la importancia del estado y la política en cuestiones medioambientales, la manera en la que actúan las naciones para llevar a cabo un modelo verde y la relación que tiene Chile con los países vecinos, junto las medidas que se han tomado en Chile en cuanto al medioambiente, provocando una reflexión respecto al futuro medioambiental del país y del planeta, entre otros temas relevantes que cautivan al lector debido a que informa y educa con referencias sustanciales. La primera edición fue publicada el 1 de octubre de 2013 en Santiago de Chile por la editorial Debate. El libro se puede encontrar en formato físico, así como también está disponible a la venta la versión E-book.

Estructura[editar]

El libro Así no podemos seguir de Raúl Sohr está divido en cinco capítulos que tratan diferentes temas acerca de los recursos energéticos, las políticas de estos y el medioambiente, sus principales adeptos y también sus enemigos. Además también da una mirada a como está el país actualmente respecto a estos temas y como se puede mejorar la obtención de energías renovables no convencionales.

Argumento[editar]

Capítulo 1: El problema Energético[editar]

El primer capítulo titulado “El problema energético” menciona en su comienzo que Chile no posee petróleo y combustibles fósiles, sin embargo, es rico en agua, además Sohr hace referencia a que:

La energía es el elemento clave sin cuya presencia la totalidad del sistema económico quedaría en una virtual parálisis.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 18

El autor divide el capítulo en ocho subtítulos que se relacionan entre sí respecto a la energía, contaminación, y cambio climático.

La lucha ideológica[editar]

En el ámbito económico y político las medidas que se tomen siempre favorecen a unos más que a otros y cuando dos grupos que tienen ideas opuestas respecto a algo, nace la lucha ideológica, donde cada uno defiende su postura respecto a las ventajas y desventajas.

Las petroleras desembolsan mucho dinero para convencer a las personas de que no contaminan, así como también los vendedores de combustible no solo buscan lavarse las manos, siendo los principales causantes de los gases efecto invernadero, sino que también buscan evitar a la legislación que los obliga a responder.

El caso del asbesto[editar]

El asbesto, una fibra natural muy utilizada en el pasado en la construcción y que en la historia industrial cobró muchas vidas durante un siglo, siendo que desde 1924 se sabía de los efectos de inhalar las partículas de esta tóxica fibra natural. En 2001, Chile fue el primer país latinoamericano en proteger a los pulmones de las personas de estas microscópicas fibras. El autor hace una comparación entre el tabaco y el asbesto, ya que una persona puede fumar toda su vida y no desarrollar cáncer, en el caso del asbesto ocurre lo mismo.

El asbesto en Chile[editar]

En Chile, las industrias Pizarreño (filial de la empresa belga Etex) utilizaron el asbesto, y según la Agrupación Chilena de víctimas del Asbesto muchos trabajadores y familiares han muerto a causa del uso de esta fibra. Luego de que las consecuencias del uso de esta fibra se hicieran más evidentes, en Europa comenzaron a cerrar las industrias. El autor señala que, en un reportaje de su autoría, le realizó una pregunta a uno de los gerentes de Etex acerca de que si la vida de los chilenos valía menos, ya que aún lo empleaban, a lo que él respondió:

Lo utilizamos porque la ley chilena lo permite.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 26

En 2001, con Michelle Bachelet como ministra de salud, se firmó el decreto que prohibía el uso del asbesto.

La batalla por el clima[editar]

En lo que a batalla se refiere, existe una asimetría entre los que están a favor de que conocidos agentes contaminantes como el petróleo o carbón, no contaminan y los que mantienen la postura de que sí contaminan. Por ejemplo, en Washington D. C., Estados Unidos, la ley exige que quienes buscan influir a los legisladores y formadores de opinión deben declararse como lobbystas. En una conferencia de las Naciones Unidas en Copenhague en 2009 se reflejó esta asimetría en donde los lobbystas a favor de los grupos de interés industriales fueron mayoría en comparación con los ambientalistas. Aquellos que están a favor son grandes empresas eléctricas que poseen grandes sumas de dinero y los que están en contra son ONG que funcionan con donaciones.

Maquillaje Verde[editar]

El maquillaje verde, es la expresión utilizada para el blanqueo en materias ambientales, aunque existen otros maquillajes como el blanqueo consensual. Estas iniciativas tienen resultados, aunque en los países desarrollados se deba cumplir con ciertas exigencias, las compañías actúan en otros países donde carece la capacidad por exigir el respeto por el medioambiente y salud. También el blanqueo del sudor, que es la sobreexplotación femenina e infantil. A partir de la década de los setenta y ochenta las empresas multiplicaban sus promesas con que no contaminaban, ya que esto influía en la reputación de sus productos. Un claro ejemplo es la empresa británica Britis Petroleum (BP) que cambió su eslogan por “Beyond petroleum” la novedad era BP solar, que atravesó sus horizontes e instalaron paneles solares en las estaciones de servicio de Estados Unidos. En 1992, con respaldo de las Naciones Unidas el maquillaje verde se internacionalizó.

El caso de las petroleras[editar]

Las empresas de carbón y petróleo utilizan gran cantidad de presupuesto en ocultar la realidad. En Chile, la conocida empresa Copec posee más del 60 por ciento del mercado, por lo que es un gran contribuyente de la carbonización del aire a nivel nacional, sin embargo, en sus estaciones de servicio se pueden apreciar una imagen de un cielo azul libre de contaminación. La empresa pionera en petróleo Exxon, posee un valor en el mercado mayor que la empresa Apple, en Alaska, en marzo de 1989, esta empresa fue causante de uno de los mayores derrames de petróleo, cuando el petrolero Exxon Valdez se estrelló.

La verdad sobre el calentamiento global[editar]

La mayoría de los procesos industriales están acompañados de daños colaterales, aunque existen dos paradigmas, por un lado, está el consenso científico de que la quema de petróleo y carbón son la causa principal del calentamiento global, y por el otro están las grandes empresas como Exxon, Shell, BP y Ford que han hecho lo posible por relativizar la evidencia científica. Sohr menciona que los científicos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (PICC) de las Naciones Unidas modelaron las oscilaciones climáticas naturales a lo largo del desarrollo del planeta, llegando a la conclusión de que existe un cambio provocado por la deforestación y las emisiones generadas por los combustibles fósiles. La mención a Al Gore premio nobel de la paz y vicepresidente durante el mandato de Bill Clinton en Estados Unidos, respecto a que el calentamiento global es la mayor amenaza a la humanidad, ya que esta no podrá sobrevivir a sus efectos si no se corrigen a tiempo. Las petroleras colocan a sus agentes en cargos públicos, suben o bajan perfiles noticiosos, pero alterar investigaciones científicas va mucho más allá. Phlip A. Cooney, jefe del Consejo de Calidad Medioambiental (que antes se desempeñaba como líder del equipo de lobbystas del American Petroleum Institute) de la casa blanca modificó una serie de informes, luego del escándalo de la manipulación de documentos, Cooney renunció a su cargo. Sohr menciona que:

Pese a la evidencia, rara vez se menciona que los desastres naturales tienen relación con el modelo económico basado en la expansión de un consumismo insustentable. Son fenómenos naturales, pero a la vez son el resultado de políticas que, como Estados Unidos, están influidas por las grandes empresas petroleras, petroquímicas, automotrices, junto a sus pares de otros países, como hemos visto.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p . 40

La contaminación y el resultante cambio climático dan cuenta de la realidad del calentamiento global en el mundo y la relación que existe entre el consumismo insustentable con los desastres naturales riesgosos como los huracanes que aumentan sus apariciones y el alza o baja de temperaturas que afectan la estabilidad del mundo. Sin embargo, se reconoce el gran aporte que han sido el carbón y el petróleo en el desarrollo de la humanidad, aunque es en su uso excesivo donde radica el problema.

Una inyección a la vena de las economías[editar]

La revolución industrial, proceso que comenzó por el 1700 y que perdura hasta la actualidad, en 1711 en una mina inglesa se instaló una bomba a vapor para la extracción de agua, dejando cesantes a personas que lo dirigían y para mediados del siglo XVII comenzaron a correr las primeras locomotoras. A finales del siglo XIX, las economías recibieron una nueva inyección de economía barata, el petróleo. Esto permitió el desarrollo del motor a explosión, y a comienzos del siglo XX, la llegada de los automóviles y aviones. En la época del vapor, las potencias europeas dominaron el mundo, sin embargo, el ascenso del petróleo al poderío llevó a Estados Unidos a obtener un triunfo con las fuerzas aliadas debido a este combustible. En el mundo actual, no se puede concebir un mundo sin el petróleo, ya que hay casi cien mil vuelos diarios y circulan unos mil millones de autos. Estados Unidos, la primera superpotencia no solo domina al mundo por sus fuerzas armadas, sino también por el ámbito de las ideas, el arte, propaganda, el cine y la televisión, aunque, lo principal es el poder duro las armas y la economía. El estilo de vida de este país se debe al petróleo, que ha contribuido con su desarrollo en un poderío inigualado con grandes riquezas. Esto masificó el uso de los automóviles para desplazarse en ciudades que se extienden por decenas de kilómetros y, en consecuencia, grandes emanaciones de CO2.

Capítulo 2: Para entender a los verdes[editar]

El capítulo 2 titulado: “Para entender a los verdes” está dividido en 13 subtítulos en donde el autor nos da a conocer los diferentes tipos de personas ecologistas que existen o que se autoproclaman amigos del medioambiente, clasificándolos y mostrando cual es la multifacética propuesta verde que nos presentan para que el mundo funcione mejor.

Distintos tonos verdes[editar]

Dentro de las personas que se declaran protectoras del medioambiente, existen grandes diferencias, marcadas por las clases sociales, aquellos que son conservadores y también los más liberales. Las propuestas que plantean estos ecologistas van desde la reducción de los gases invernadero hasta mecanismos compensatorios para aquellas personas que no respeten las medidas planteadas. Ellos pretenden crear un ambiente donde se genere un equilibrio y balance natural, tomando en cuenta todas las posiciones dentro de la propuesta ecológica. Sin embargo, actualmente la política también ha tomado partido de los ecologistas, ya sea para aprovechar y vender su discurso de la amistad con el medioambiente, debido a que tendrían muchos adeptos.

Cosmovisión[editar]

Es necesaria una completa reestructuración de la relación existente entre la naturaleza y los humanos, para eso se deben realizar muchos cambios en estructuras sociales, ya que los verdes han rechazo muchas posturas, desde el individualismo capitalista hasta la burocracia, aunque esto es contradictorio ya que el termino ecologismo proviene de occidente, surgido en las sociedades ricas. De esta forma se rechaza el modelo de consumo y derroche, lo que se traduce en el capitalismo, la utopía de los verdes plantea un mundo poblado con sociedades autónomas, que no tengan que ver con capitalismo ni comunismo, que sean libres y que cuiden del entorno, una ideología totalmente nueva, otra cosmovisión totalmente diferente.

Una historia de destrucción[editar]

Desde la antigüedad se ha planteado una teoría antropocéntrica, y que da cuenta que es el hombre quien domina al mundo y no al revés. En el antiguo testamento según lo que narra el Génesis, se dice que todos los animales de la tierra y las aves podrán ser juzgados por el hombre, algo bastante egoísta. Sin embargo los verdes no lo evalúan así, debe ser algo reciproco, no por ser las criaturas más inteligentes (seres humanos) tenemos el derecho de destruirlo todo y aprovecharnos de lo que nos brinda el entorno.

Esta postura que asume que el mundo es una gran ostra para ser devorada por los humanos es muy distinta en la lectura histórica verde, donde prevalece una cultura de respeto y encantamiento ante la naturaleza.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 50

Por ende esta es la postura que ellos pretenden seguir y cambiar, establecer un punto medio entre el uso que el hombre le da a su entorno, que no todo sea la sobreexplotación y el aprovechamiento, sino que retribuir algo a cambio, algo así como un 50/50, ya que en el pasado las culturas tribales y los pueblos originarios veneraban a la naturaleza, e incluso se le pedía permiso a la Madre Tierra para hacer uso de ella, no obstante todo eso ha cambiado con el pasar de los años.

Una razón de dos filos[editar]

Una nueva corriente filosófica, que surgió en Gran Bretaña y Francia en el siglo XVII, plantea que todo aquello que se encuentra en la naturaleza tiene un alma, imponiendo una nueva doctrina y rechazando las ideas de las iglesias y destacando que el saber es poder, más conocido como racionalismo. Esta corriente fue expresada por diferentes pensadores y filósofos de la época, en donde se decía que las personas libres eran aquellas guiadas por la razón, ya que esta doctrina postulaba que el hombre era dueño de su destino. El hombre quería poseer más conocimientos para darle sentido a todo, usar la razón en temas como la justicia, la opresión, la naturaleza, etc. Además buscaba mostrar un lado artístico que representara el sentir de la época. Lamentablemente no todo era perfecto ya que el hombre, con nuevos estudios a su favor, comenzó a acusar a algunas mujeres, en su mayoría a campesinas de brujería, y muchas fueron ejecutadas sin probarse su culpabilidad. Por otro lado se descubrieron grandes enigmas gracias a los aportes de Newton y muchos pensadores y matemáticos que pusieron en la palestra la física y la ciencia.

Lo nuclear[editar]

Una de las características que más representa a los verdes, es su oposición a la energía nuclear y las armas que se puedan desarrollar con esta, por lo dañina que es para el medioambiente y lo destructiva que puede llegar a ser si es usada en situaciones de guerra y en Chile no es la excepción. Durante muchos años, la idea de construir un reactor nucleoeléctrico, estuve presente en varios gobiernos. En gobiernos de Frei y Lagos, se realizaron estudios, pero nada se concretó, por otro lado en el gobierno de Michelle Bachelet en el año 2005, se mantenían contactos con ecologistas los cuales estaban totalmente en contra de la energía nuclear, y había un acuerdo de por medio, el acuerdo de Chagual, en donde la presidenta no incluía la energía nuclear en la política energética nacional, algo que claramente no se mantuvo. Sebastián Piñera en tanto, Formo la Comisión Asesora para el Desarrollo Eléctrico (CADE) y entre sus resultados se destacaba que la energía nuclear de potencia es una de las formas más seguras para las personas, si se comparaba con otras formas de producción eléctrica, lo que dejó abierta la posibilidad de un plan nuclear a futuro.

El pacifismo[editar]

El pacifismo es aquello que rechaza la violencia en todos sus géneros y una parte de los verdes está de acuerdo con esto, ya que no es necesaria tanta violencia para exigir los derechos. El pacifismo vivió su auge en Europa, luego de la Segunda Guerra Mundial ya que el mundo había quedado traumatizado luego de los hechos ocurridos, y querían un poco de tranquilidad por ende surgieron diversas instituciones que ayudaban a evitar mayores conflictos. Desde esta perspectiva surgieron diversas protestas en contra de la instalación de armas atómicas, mayormente en países como Alemania y Gran Bretaña. En estados unidos entretanto, en el año 1971 surgió la famosa y emblemática Organización Greenpeace (paz verde), la cual lucha por los derechos de la flora, fauna y está en contra del poder nuclear. Durante la guerra de Vietnam esta organización, reclutaba a sesenta mil adeptos al mes, teniendo muchos afiliados en los años 90, pero tuvo una caída estrepitosa cuando Estados Unidos triunfo sobre los planes de Saddam Hussein y el espíritu nacionalista de los norteamericanos volvió a surgir, por ende, muchos bajaron su membrecía de la organización, hasta casi la mitad, de lo cual Greenpeace no se pudo recuperar.

La vertiente literaria[editar]

El rechazo a las jerarquías y al poder, conocido como el anarquismo es otra corriente que influye en el movimiento de los verdes, ya que ellos a pesar de que no se oponen totalmente al estado, buscan que esté descentralizado, optando por alianzas solidarias, y compensaciones entre consumidores y productores, acuerdos comunes que ayuden a mejorar las relaciones y formen una sociedad mejor. Es por ello que trata de brindar el apoyo al individuo pequeño e individual, en lugar del estado jerárquico.

Tratamos de descentralizar el poder y maximizar la libertad y la independencia de los individuos, comunidades y sociedades, y ponerlo en manos de la gente a nivel local. Significa también atravesar las fronteras nacionales y de las ideologías para construir alianzas con otros que también trabajan por la paz y la ecología.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 62

Muchos de los militantes verdes creen que una buena opción sería organizar a la sociedad en comunidades territoriales, no basándose en jerarquías, sino que conexiones que apremien la libertad y buscan que los problemas que se presenten sean evaluados con una visión global de la situación, pero que las soluciones que se brinden sean estructuradas a nivel local, manteniendo un apego a la comunidad y siguiendo un modelo de organización. En Alemania, por ejemplo, los verdes siguen dos corrientes, en cuanto a principios se encuentra el fundamentalismo y por otra parte están los llamados “realos”, el cual es pragmático porque como su nombre lo dice, es más realista, y es el modelo que se ha impuesto frente a la sociedad.

El feminismo[editar]

La mujer, desde tiempos remotos ha sido asociada con la naturaleza, ya sea como la Madre Tierra o la conocida Pachamama, todo esto era una relación y conexión positiva, hasta la llegada del racionalismo, en este periodo el hombre se hizo a si mismo pilar fundamental de la cultura y la razón, lo que conllevo a que la mujer fuera empujada hacia el ámbito natural, salvaje. Es por ello que el movimiento eco feminista señala que el hombre le ha dado un trato similar tanto a la mujer como a la naturaleza.

Los movimientos feministas debutaron, como los ecologistas actuales, a comienzos de la década de los sesenta. En materia de género ya existía una vasta trayectoria de movilizaciones por la obtención del derecho a voto, así como por salarios iguales para idénticas labores.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 65

Como consecuencia de esto, vino la opresión cultural de las mujeres, en donde se velaba por un universo masculino y machista, donde ellos, los hombres lo han moldeado y regido, cosa que aun sucede hasta ahora, dejando a la mujer como un ser inferior y como una “eterna niña”, por ende, la mujer debe ser obediente y respetuosa, hacer caso omiso de sus ideas. Todo esto y lo que se ha dicho en el pasado acerca de la mujer, proviene de la concepción de que la primer mujer Eva, surgió desde la costilla del hombre, por lo que se le debe lealtad, algo que no podría estar más errado, ya que muchas feministas consideran esta narración bíblica como una doctrina machista, que impulsa los prejuicios existentes. Volviendo al tema relacionado con las mujeres y la ecología, el feminismo es señalado como un movimiento liberador, al igual que nuestro entorno, que busca acomodar las cosas en su favor y que sean los hombres los que se liberen de las mujeres ya que estos son los más dependientes de ellas, lo mismo sucede con la naturaleza y no al revés.

La vertiente indígena[editar]

El autor plantea una misiva de los indios U’wa de Colombia al hombre blanco donde dicen que el hombre blanco le ha puesto precio a todo, y quiere que ellos hagan lo mismo con la sangre de la tierra (petróleo), y que todo ser vivo tiene sangre, y que este le da fuerza a todos, plantas animales y hombres.

A lo largo del devenir humano son muchos los pueblos que han sucumbido ante la cultura supremacista de capitales en busca de riquezas. Las vastas llanuras patagónicas de Chile fueron testigo del exterminio de los selk’nam, los aonikenk, los kawésqars y los yámanas, como el resto de los pueblos originarios fueron diezmados por enfermedades que les eran desconocidas.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 69

Julius Popper, Sam Ishlop y Alexander McLenan apodado como el “Chancho colorado” cometieron atrocidades en comunidades indígenas, tales como la caza contra los fueguinos, asesinar mujeres embarazadas, y el genocidio de maoríes en Nueva Zelanda y de aborígenes en Tasmania. Sohr realata un choque de cultura ocurre cuando los loberos, balleneros y cazadores de focas se encontraban con los indígenas que acostumbraban a circular con libertad en la naturaleza. A partir de esto da a conocer un caso donde un cazador de focas dijo que los fueguinos en épocas de hambre su canibalismo los hacía comerse a las ancianas ya que no eran un aporte en comparación con los perros, ya que estos cazaban nutrias. Las actividades de las empresas petroleras, mineras y madereras dañan el entorno, pero el impacto por la construcción de caminos puede resultar más grave. Como por ejemplo en Brasil, donde se destruyeron 191 mil kilómetros cuadrados de bosques. El primer indígena elegido para presidir un país en Latinoamérica fue Evo Morales, durante su mandato uno de sus proyectos emblemáticos provocó un conflicto, este proyecto era una ruta que debía cruzar el Territorio Indígena y el Parque Nacional Isiboro Sécure, esta ruta afectaba de manera irreversible el hábitat de quince mil indígenas y podía llevar a una tala masiva de bosques nativos. En Chile, las represas de Ralco y Pangue se construyeron en contra de la voluntad de las comunidades pehuenche de la zona y tampoco se tomaron en cuenta los impactos ambientales. Pese a los factores en contra su construcción fue aprobada en 1977 por la Comisión Nacional del medioambiente, Conama. Sin embargo, en 2003 se declaró nula la aprobación ambiental de Ralco. A raíz de esto se vieron obligados a desarrollar una propuesta de compensaciones para las familias Pehuenche, a quienes les suscribió dos memorandos que los conminaba (amenazaba/obligaba) a desistir de acciones legales. En 2004, Endesa inundó el cementerio de Quepuca Ralco y los ecologistas señalaron su descontento. Otra situación ocurre en el sur de Chile con el pueblo Mapuche, quienes demuestran su descontento con las empresas madereras y por recuperar las tierras que consideran suyas, queman camiones y casas patronales llevándolos a ser juzgados por la Ley antiterrorismo. Los pueblos originarios, son considerados como minorías marginadas y discriminadas en América Latina, incluso cuando son mayoría. En Chile, la Región de la Araucanía tiene el índice de desarrollo más bajo y esta región concentra el mayor número de mapuche. El autor hace referencia a la película avatar debido a que es un claro ejemplo de la actitud reverencial de los pueblos originarios hacia la tierra, con armonía hacia el medioambiente. En Chile, ocurrió un caso donde una cultura indígena destruyó su hábitat siendo este el “Paradigma de la Isla de Pascua”, ya que para trasladar las enormes estatuas utilizaron cientos de árboles, lo que provocó una serie de problemas.

Composición social[editar]

El movimiento ecologista no posee una base social definida, a diferencia del capitalismo que es el sistema que da origen a la burguesía y al proletariado, donde cada clase y amplia gama de grupos sociales desarrollan partidos y organizaciones sociales en función de sus objetivos y convicciones. Sin embargo, los verdes no tienen intereses en materiales tangibles o prácticas laborales. Gran porción del mundo está en la fase postindustrial, el autor se refiere a lo dicho por el Premio Nobel Wassily Leontief que plantea que el papel de los humanos como el factor más importante en la producción está disminuyendo, esto sucede debido al aumento de la automatización y robotización en las industrias. Los pertenecen a partidos verdes son personas de clase media, pero los empresarios y trabajadores no les son ajenos, no obstante, los ecologistas se ven en una dificultad al momento de plasmar una propuesta coherente y atractiva al conjunto de su universo de potenciales adherentes. El proyecto verde busca una relación armónica entre las sociedades y el medioambiente. Esto lleva a un proceso de transformación a nivel global de la economía, política y estructuras, de esta forma se alienta a un empoderamiento ciudadano que permita reducir la huella individual y colectiva sobre el planeta, esta huella se refiere a el promedio entre la demanda y la capacidad de regeneración del ecosistema, donde el promedio para cada persona a nivel mundial es de 2,9 hectáreas.

Los colores de la política[editar]

El ecologismo, como otras corrientes políticas, tiene matices que, si tuvieran que expresarse en colores, irían del verde oscuro a uno tenue o extremadamente claro. Los conservacionistas estarían en el extremo verde claro, y en el extremo opuesto, en el verde oscuro, se situarían los ecologistas profundos.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 81

En otras corrientes políticas la gama de colores va desde el azul intenso de los ultraconservadores al celeste claro de liberales y reformistas, que se les suele denominar la nueva derecha. El rojo está monopolizado por las izquierdas, el rojo intenso de los comunistas al rosado pálido de los socialdemócratas y el color pardo pertenece al extremo contrario, al fascismo/nazismo, color que se les atribuyó por el tono de las camisas que utilizaron antes de la Segunda Guerra mundial.

La visión económica[editar]

La postura verde frente al desempeño económico debe ser sustentable, sin embargo, la situación actual mundial es pesimista, las prácticas económicas y sociales actuales no les permiten a los ecologistas lograr la sustentabilidad. Debido a un crecimiento demográfico y de consumo que exceden la capacidad del planeta. Sohr hace referencia a un informe de 1972 llamado Los límites del crecimiento del Club de Roma en una de sus proyecciones anunció que la tierra alcanzaría los límites del crecimiento total en menos de un siglo, En 1992, se revisaron los postulados de los límites de crecimiento y la conclusión fue que la humanidad caminaba a una situación insostenible. En 2012, se publicó una nueva versión del informe y los autores señalaron que distintas áreas como el clima y la biosfera en particular, habían superado los límites de tolerancia física. Los verdes han mantenido a lo largo de cuatro décadas esta creencia. Hoy, cada tonelada de CO2 causa daños por un valor de 85 dólares. Los teóricos verdes dicen que uno de los peores cambios que el industrialismo ha efectuado en cuanto a contaminación, son los efectos combinados que esto trae consigo, asimismo, científicos de que estas variables combinadas pueden evolucionar de manera imprevisible. El mercurio, que utilizan faenas mineras es desechado en ríos y océanos, este lo consumen los peces, que luego son consumidos por humanos. Asimismo, el peligro de la emanación de gases letales, que en India (1984) provocó la muerte de 2500 personas. La meta de los gobernantes es asegurar un crecimiento constante, mientras que los ecologistas hablan de límites de crecimiento, y últimamente de decrecimiento. Serge Latouche es uno de los promotores de esta opción, y precisa que la consigna de decrecimiento tiene como objeto primordial marcar el abandono del insensato objetivo por el crecimiento de ganancias por los dueños del capital.

Frente al crecimiento demográfico, algunas estimaciones señalan que una población mundial de 3.500 millones marcaría el límite de la capacidad de carga planetaria. Hoy los humanos duplicamos esa cantidad, con siete mil millones, y las proyecciones para el 2050 auguran una población que alcanzará los nueve mil millones.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 88

En Brasil, dos tercios del talaje en las amazonas son para cultivos de soja, y en algunos países desarrollados como Francia los verdes estiman que hasta el 40 por ciento de los alimentos producidos terminan como desperdicios y si se mantienen las tendencias de consumo, en el curso de este siglo habremos alcanzado los límites de agotamiento de materias primas y de saturación del medioambiente. Los verdes se oponen a las granjas industriales y un rasgo característico de cualquier sociedad verde sustentable es la agricultura orgánica.

Un modelo alternativo[editar]

La propuesta de un modelo de sociedad basada en principios ecológicos tiene dos ventajas, la primera es que novedoso y aporta respuestas para situaciones que no anticiparon otros proyectos políticos y la segunda es que nunca ha sido aplicado. El ecologismo es como una promesa por cumplirse. Hoy, ningún gobierno o empresa puede ignorar la variable ecológica y su impacto sobre los procesos productivos. Una de las fortalezas de la convocatoria verde es su diversidad ideológica, con pacifistas, conservacionistas, feministas, libertarios y el new age. Esta diversidad es una fortaleza, pero también una debilidad. El autor da a conocer el manifiesto de Eva Joly, candidata presidencial francesa (2012) por el partido Europe Ecologie Les Verts.

Capítulo 3: El rol del Estado[editar]

En “El rol del Estado”, el capítulo se compone de tres subtítulos, refiriéndose al rol del estado en distintos países y como este ayuda e influencia o como también algunos tratan de que este no se involucre.

En países desarrollados la clave para el éxito es la combinación precisa entre la vitalidad del mercado y las regulaciones inspiradas en una visión estratégica del Estado. En el Occidente, en las últimas décadas han tenido desregulaciones y esto relativamente ha postergado el rol del estado; en la mayoría de los países europeos han mantenido la centralidad del Estado en el aspecto social como la salud, la educación, el sistema de pensiones y las redes de ayuda social, esto se conoce como “Estado de bienestar”.

Brasil es un país de ejemplo al tener una respuesta destacable a la crisis petrolera y energética de los años setenta por el alza de los precios del crudo. Este país carecía de reservas petroleras y gasíferas, pero uso los recursos del Estado para asegurar la autonomía en materia energética y así comenzó el programa de biocombustibles.

El Chile dictatorial fue un pionero mundial de las políticas, siendo Margaret Thatcher en Gran Bretaña y Ronald Reagan en Estados Unidos quienes imitasen este sistema. Los estadounidenses asumen que gobierno es sinónimo de Estado.

Las políticas de la Unión Soviética fracasaron con la planificación económica estatal, esta dejo secuelas debido a la ineficiencia colosal y brindo argumentos convincentes al arsenal libremercadista, esto es denominado el “capitalismo anglosajón”.

En la década de los noventa, Estados Unidos estableció el “Consenso de Washington”, estas eran unas series de medidas que impulsaron a América Latina a reducir el gasto fiscal, alentó la liberalización del comercio y el mercado financiero y promovió la privatización masiva y la apertura de inversiones extranjeras.

Liberar el mercado y evitar en la mayor medida posible la interferencia estatal, ha sido aplicada en pocos países. China y los llamados tigres asiáticos (Corea del Sur, Taiwán, Singapur y Hong Kong) han combinado la visión estratégica del Estado con la versatilidad del mercado, su crecimiento económico ha sido sólido.

Corea del Sur[editar]

Corea del Sur merecía atención especial, ya que tiene una economía capitalista y un régimen democrático, aunque no siempre haya sido así. Entre los años 1961 y 1979, este país fue gobernado por el dictador Park Chung-Hee, este régimen tuvo total pragmatismo en el ámbito económico, bajo la tutela militar fueron construidas las bases de un progreso formidable, esto es llamado el “milagro de Han” haciendo referencia al ancho del río Han. Entre 1950 y 1953, por una cruenta guerra que dejo unas tres millones de muertes, la península coreana se dividió entre el Norte y el Sur. Estos bandos quedaron en la miseria económica.

Según el Banco Mundial, el ingreso per cápita de Corea del Sur en 1950 era de 876 dólares frente a 4.987 de Argentina y 3.827 de Chile. En 2012 (…) Corea del Sur tenía 22.590 dólares de ingreso per cápita ante 11.587 de Argentina y 15.363 de Chile.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 106

La diferencia fundamental entre la dictadura de Chile y Corea del Sur fue que la chilena estuvo al servicio de grandes grupos económicos y Corea del Sur estuvo con los grandes consorcios que quedaron sometidos a la autoridad y las metas del Estado, o si no se hablaría sobre el “milagro del Mapocho” Por otro lado, la educación es necesaria, pero no es suficiente. Países mejor instruidos no son un sinónimo de éxito económico; la mayoría de los “tigres asiáticos” tenían un índice educacional bajo a los países que estaban arriba de dicho ranking, pero que estos están estancados en cuanto a riqueza.

El equilibrio asiático[editar]

El ying y el yang representados en la bandera surcoreana es una señal de la capacidad de esa nación de combinar en forma armoniosa elementos que para otros países resultan contradictorios, como el Estado y el mercado. Este país es un ejemplo en el campo capitalista con intervención estatal y no solo a nivel de las políticas económicas, sino que también en el sistema de salud y en la red de ayuda social. Esto no detuvo al país para competir a nivel internacional y lograr posicionarse como uno de los mejores productores de acero. En 1965 Corea del Sur era uno de los países más pobres, no tenía los insumos básicos para el acero, además era un país con mucha mano de obra y poco capital, a pesar de esto el Estado persevero en el proyecto y creo Pohang Iron and Steel Corporation (POSCO), que fue uno de los mayores emprendimientos industriales en la historia del país. El Banco Mundial trató de impedir su realización. El país perseveró y en 1973, gracias al capital obtenido de Japón pudo entregar sus primeros productos y ya en la década de los ochenta ya era uno de los mayores productores de acero del mundo (hoy es el cuarto productor de acero a nivel global). No todo pintaba bien para Corea del Sur, aun no resolvía su problema energético, el país mostraba un gran atraso en el desarrollo de Energías Renovables No Convencionales (ERNC), y al igual que Chile, carece de combustibles fósiles. El 70% de los insumos energéticos es importado en Chile y el 96% del combustible que necesitan los coreanos es importado. Para terminar con eso, Seúl aposto por la energía nuclear y hoy es el quinto país del mundo con el mayor número de reactores nucleares con un total de veintitrés. La documentación dada por las empresas que les vendían las partes de los reactores nucleares habían sido falsificadas.

El caso más serio es el del llamado “cable de control”, cuya tarea era enviar señales electrónicas en caso de una fuga radioactiva o un accidente. Este cable debe instalarse en cada reactor, de no funcionar, puede desencadenar una tragedia como la ocasionada por los reactores japoneses de Fukushima.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 112

El gobierno surcoreano ha planteado la idea de la revisión diaria de las plantas y los equipos, para asegurar bienestar a la población. Sin embargo esto no es llevado a la práctica. En Estados Unidos y Gran Bretaña, el abastecimiento va por cuenta de empresas privadas, solo en apariencia, los respectivos gobiernos no se involucran, las grandes empresas de petróleo y gas son las que explotan los yacimientos nacionales e internacionales, y esto lo hacen con capitales privados. El Estado por cautela y por la seguridad de sus intereses ocupa a tal punto un porcentaje del presupuesto militar norteamericano para proteger sus fuentes de abastecimiento de hidrocarburos, así el Estado no participa de manera directa.

Nueva Zelanda[editar]

Nueva Zelanda es un país similar a Chile, ambos están sobre el Cinturón de Fuego del Pacifico, por lo que ambos tienen volcanes, temblores y grandes recursos geotermales. Y ahí es donde está la diferencia, Nueva Zelanda los explota y produce con ellos 860 MW, mientras que Chile produce absolutamente nada. Con esto Nueva Zelanda cubre un 15% de su demanda de su matriz eléctrica con el vapor que mana de sus múltiples yacimientos y Chile debe importar combustibles fósiles cuyos precios van en continuo aumento.

Nueva Zelanda presenta una matriz energética envidiable con recursos inferiores a los de Chile. Las energías limpias renovables aportan el 74 por ciento de la electricidad y su meta es alcanzar el 95 por ciento para 2025.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 115

Otra diferencia entre Nueva Zelanda y Chile que señala el estudio de la ONU, es que las preocupaciones ambientales no han sido incorporadas como una variable en el sector energético chileno y menos aún han sido tenidas en cuenta las comunidades indígenas. El Estado y las empresas de Nueva Zelanda han tenido que negociar con las comunidades maoríes el pago para acceder a sus tierras y les permitan perforar y explorar los pozos.

Competitividad[editar]

A mediados del 2013, un MW costaba en Chile 270 dólares, en Perú el mismo MW costaba 50 dólares. Estos dos países compiten para atraer inversionistas para el sector minero. En el sector chileno se llegó a hablar de una inversión minera de 110 mil millones de dólares, por los malos augurios sobre el precio de algunos metales, como el cobre, más el costo alto de los insumos energéticos, los cuales representan un tercio de los costos de explotaciones mineras, esto habría cancelado inversiones por cerca de 40 mil millones de dólares.

Independencia[editar]

Cada país debe afrontar sus necesidades con lo que tenga a su disposición, pero Chile no ha avanzado en las energías nativas renovables para que le brinden una creciente autonomía. Es llamativa la absoluta pasividad del sector de defensa nacional, que solo parece preocupado de disponer de combustible para volar sus aviones, movilizar sus tanques o navegar su flota; poco y nada ha hecho para afianzar la viabilidad del país en el marco de una crisis energética internacional. Las probabilidades de un conflicto bélico en la región o entre Chile y alguno de sus vecinos es improbable.

Sustentabilidad[editar]

Las emisiones de CO2 chilenas son insignificantes a nivel internacional, lo que es preocupante es su tasa de aumento, si sigue a este ritmo las emisiones crecerían en un 390% para el año 2030. Santiago es una de las ciudades más contaminadas del mundo, con un índice promedio de 178,9 miligramos de partículas en suspensión por cada centímetro cubico de aire, según un informe de la OMS. El modelo chileno si es juzgado desde una perspectiva energética y medioambiental, el veredicto será negativo. El sistema chileno es el resultado de una falta estratégica y de una nula planificación. Durante décadas el único ente responsable del sector eléctrico fue la Comisión Nacional de Energía, y su tarea principal era negociar los precios de los generadores a nombre de los clientes y por consecuencia el sistema eléctrico nacional es producto de una agregación de generadores, los cuales de forma creciente solo adicionaron el más caro de los combustibles, el diésel.

Capítulo 4: Un modelo verde[editar]

En el cuarto capítulo “Un modelo verde” posee 4 subtítulos en donde el autor señala que el consumo de energía de los humanos es mucho, se dice que es 1,7 veces lo que la naturaleza es capaz de absorber y reponer. Existen ciertos principios como el de asegurar que las necesidades humanas sean satisfechas de manera sustentable, ya que el consumismo esta desbocado e iremos a parar a un despeñadero. Dentro de un marco general, el medio ambientalismo se inclina hacia una economía capitalista. Los partidos verdes discrepan con la forma en que el capitalismo y el socialismo administran el poder y en cómo se relacionan con el medioambiente.

La visión verde aspira también a que la política y la economía sean controladas por las personas y no enajenadas de ellas, tanto en el ejercicio del poder como en la gestión económica. Ello permite enarbolar la atractiva consigna de “Trabajar menos para que todos puedan trabajar y vivir mejor”.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 122-123

Hay otro aspecto que preocupa a los verdes y es como la balanza se ha inclinado a favor del capital en deterioro del trabajo. Una propuesta ecologista es respecto a favor de una economía mixta, es decir, que se debe considerar el rol mentor del Estado y a su vez un mercado con libertades. Pero en vez de buscar ahorros por la vía de la producción a gran escala, se inclinan por las pequeñas y medianas empresas. En la óptica verde, el Estado debe impulsar un ordenamiento territorial que permita una administración espacial del país, regiones y ciudades con el fin de crear un todo que sea coherente con las diversas actividades productivas y de ocio en un marco de sustentabilidad, tomando en cuenta las necesidades humanas economías y características historias de los lugares El modelo actual, es un modelo de producción que se caracteriza como “fosilista-capitalista”.

El sector energético[editar]

Los verdes en este sector proponen terminar con el “fosilismo” que este ha sido el corazón que alimenta el resto de las actividades. En el mundo moderno todas las actividades descansan, de una manera u otra, dependiendo de la disponibilidad de energía a precios asequibles. Los combustibles fósiles son la principal fuente para la producción de electricidad. La electricidad propiamente tal es limpia, pero depende de donde fue derivada, si de un motor diésel o del agua de una represa. En las últimas décadas, a nivel internacional, ha habido un viraje a unidades generadoras de menor tamaño, las cuales tienen varias ventajas, como ser menos invasivas y aportar mayor confiabilidad al conjunto del sistema. Además, permiten reducir las pérdidas de distribución y alivianar la carga de las líneas de transmisión de entrega energética, así en caso de falla, no se caería todo el sistema, como ha ocurrido en Chile. Esto es lo que hace la red eléctrica inteligente. Unos estudios realizados por el equipo del presidente Barack Obama estimaron que para contar con una red inteligente, Estados Unidos debe invertir unos mil quinientos millones de dólares entre los años 2010-2030 y en Europa se prevé una inversión de 200 mil millones de euros. Corea del Sur, va atrasado en el desarrollo de las ERNC, pero se ha propuesto ser el primer país del mundo en desplegar una red inteligente a nivel nacional con un plazo hasta el 2030. Chile, por su parte, camina en dirección contraria. En 2012 fue aprobada la Ley 20.751, esta permitía la conexión de la red eléctrica de sistemas generadores de electricidad a partir de ERNC.

Esto pone un freno al desarrollo de las ERNC o, lo que es lo mismo, a la energía distribuida, pues no hay nada más próximo al consumidor que los paneles fotovoltaicos caseros. Además, obstaculiza los esfuerzos por reducir la contaminación a nivel de la generación eléctrica.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 129

Transporte[editar]

De nada sirve electrificar las vías férreas para desechar las locomotoras diésel. Hay empresas de ferrocarriles como la Deutsche Bahn (DB), que mueve el 90 por ciento de sus locomotoras a base de energía eléctrica, por lo que desde la década de 1990 a la fecha ha conseguido reducir en un 40 por ciento sus emisiones de CO2. Varios gobiernos cuentan con proyectos de expandir las redes ferroviarias. En Estados Unidos el presidente Obama anuncio inversiones para la construcción de trenes rápidos. Los nueve países de la Unión Europea que operan trenes han considerado inversiones por doscientos mil millones de euros para la próxima década. China está en el proceso de construcción de 42 nuevas líneas de trenes de alta velocidad. De más está decir que los verdes favorecen el transporte público sobre el privado, también prefieren a los ciclistas y a los peatones antes que a los automovilistas. Esto no es compartido por el Ministerios de Obras Públicas (MOP) chileno, ya que estos priorizan el asegurar el flujo del tráfico vehicular por sobre de los peatones, por una esquina pasan 500 vehículos y mil peatones por hora, es lógico que estos se regulen para permitir un paso expedito.

La construcción y las ciudades[editar]

Los edificios inteligentes y los que presumen serlo, debutaron hace algunas décadas con sensores que encendían y apagaban las luces al paso de personas en áreas de uso transitorio, como los pasillos.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 132

En la actualidad los sistemas de control de climatización, intensidad de la iluminación, cierre de cortinas exteriores, alarmas y otras funciones operan desde un mando central computarizado. Respecto a la climatización, el ahorro puede llegar a un cuarto de la energía usada hasta ahora. Es un tema que está puesto bajo lupa por expertos, quienes proyectan que para el 2030 las veinte mayores economías del mundo podrán satisfacer el 40% de los requerimientos de la climatización a base de ERNC. En China, el 10% de las casas cuenta con un calentador solar. En Estados Unidos se instalan 60 mil bombas geotérmicas al año. Perú anuncio un programa que consiste en el Programa de Electrificación Fotovoltaica Domiciliaria, que, según el ministro de Energía y Minas, permitirá abastecer con electricidad al 95% del país en el año 2016. Por otra parte, al momento de urbanizar existen falencias con el tráfico, aun teniendo planos reguladores, el aumento de este es un problema mundial. Crece el número de ciudades atochadas y saturadas de gases y material particulado. Actualmente circulan unos mil millones de vehículos. Es difícil imaginar que pasara en el 2050, cuando las calles y las carreteras serán copadas por unos 2.500 millones de autos y que para el mismo año el rodado aumentara en un 300 por ciento de las emisiones de CO2.

Las materias primas[editar]

Un criterio para analizar el empleo de las materias primas es su escasez. Como se había dicho antes, muchos minerales ya han pasado la cima de su producción, pero además hay que considerar la huella ecológica. Respecto a los materiales desechados, los verdes favorecen la situación, ya que cada ciudadano tiene una responsabilidad en sus hábitos de consumo, incluso desde un tema como las infinitas bolsas y botellas plásticas o las latas de bebidas. En este campo se han hecho grandes avances gracias a la biotecnología limpia, que permite una elaboración de productos biodegradables a partir de materias renovables y con ellos ayuda a reducir la dependencia de la industria petroquímica. El reciclaje mejora la situación en varios niveles, permite un importante ahorro energético y contribuye a bajar las emisiones de CO2, especialmente en las acerías que tienen un elevado empleo de carbón. Los verdes proponen una contabilidad verde que calcule los costos reales de las actividades industriales, incorporando su impacto ambiental sobre la biodiversidad, el clima, la salud humana y las consecuencias sociales. Y así hacerlo público y transparente, para que ciudadanos y accionistas puedan tomar decisiones informadas. También, es de importancia estimular a los centros universitarios y de estudios técnicos para la investigación de las energías renovables, para que lo dicho anteriormente sea realizable. El concepto clave de los verdes es la sustentabilidad.

Capítulo 5: Una era de transición[editar]

El capítulo 5 titulado “Una era de transición” Está dividido en 7 subtítulos en donde el autor nos muestra la realidad actual que vive el país debido a los efectos del cambio climático, los tipos de combustibles con mayor demanda, la relación de Chile con sus vecinos y cuál es el camino a seguir para poder desarrollar los recursos energéticos del país.

Visiones de futuro[editar]

El esplendor de Santiago, la gran capital de Chile con el paso del tiempo ha ido decayendo, por el mero hecho de que ya no proyecta ese gran impacto que causaba en la antigüedad y que, en los últimos años se ve como una ciudad contaminada y llena de abandono. Asimismo, siempre se ha tenido la noción de que los recursos que posee Santiago tienen cierto límite, como es lo que está ocurriendo con el Glaciar Echaurren, en 2012 se anunció que este abastecedor principal de agua potable comenzaría a perder diez metros por año y que ya en 2030, este dejaría de existir. La realidad fue mucho más avasalladora, ya que este Glaciar ya no emana las cantidades suficientes de agua para abastecer la población más cercana. En consecuencia, por este cambio climático, las altas temperaturas en Santiago bordeaban casi los 40 grados, la gente prefería migrar al sur debido a que les parecía más conveniente. En el norte las cosas no fueron tan diferentes, la escasez de las zonas desérticas no presentaba un buen panorama y tampoco se contaba con una fuente estable para generar energía en abundancia para las grandes mineras, lo cual era algo demasiado indispensable para el país ya que la minería era la principal fuente económica de este.

Gas de esquisto, Gas no convencional o Shale gas[editar]

El gas convencional, se relacionó fuertemente en el ámbito de los combustibles fósiles. A pesar de que se sabía que la extracción de este era algo bastante dañino para el medioambiente, muchos afirmaban que este es el siglo del gas, por ende, su uso, y panorama energético significaban un cambio fundamental dentro de la economía y prácticamente es una futura revolución a nivel mundial, liderado por la potencia de Estados Unidos, ya que posee este tipo de gas en abundancia. La ventaja que posee este gas, el incremento en cuanto a ventas y proyección que tiene, se debe a que es liviano, fácil de transportar y tiene múltiples usos, desde ser un simple combustible, hasta llegar a los fertilizantes. China, Gran Bretaña, son algunos de los países que están interesados en la explotación de este producto, asegurando que ya han encontrado yacimientos y que este se encuentra presente, logrando así que nazca una competitividad entre potencias y también entre las grandes industrias.

Sin zanahoria ni garrote[editar]

El petróleo, el cual era fundamental para camiones y maquinaria, estaba entrando en un periodo de agotamiento, se debía invertir para conseguir más petróleo, lo que se resumía en mayores gastos y nula obtención de ganancia. Además, debido a la baja provocado por el petróleo, actualmente, muchos vehículos están optando por cambiarse al gas y abandonar el petróleo. En Estados Unidos esto ha sido impulsado por diversas propuestas que buscan una solución más amigable con el ambiente. Sin embargo, cuando ya no queda esperanza y se cree que es el fin de una era petrolera, nuevos yacimientos son encontrados, mejoran las técnicas o los que se especulaban que estaban secos, nuevamente vuelven a su esplendor, aportando así a la era de la motorización en diversos países.

La tormenta perfecta[editar]

Retomando el tema a nivel país acerca de nuevas propuestas, la energía nuclear claramente no podía implementarse en Chile.

Después del desastre nuclear de Fukushima, en marzo de 2011, quedo más claro que nunca que la energía nuclear no era una opción para el mas sísmico de los países, Chile.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 154

Lo primordial y fundamental para el país era centrase en la obtención y trabajar con las energías renovables no convencionales, como la eólica o la geotérmica, lamentablemente esto no ocurrió así y Chile nuevamente aposto por el carbón, lo cual no tuvo un cambio significativo ni logro aumentar los recursos o las ganancias, al contrario, se incrementó la contaminación y se frenó un poco el desarrollo de las Energías renovables no convencionales. Debido a esto se debió activar el potencial energético del norte al sur del país, optando por nuevos emprendimientos de combustibles fósiles y con futuro, para llevar a cabo un plan de ahorro estable y más eficiencia energética.

La relación con los vecinos[editar]

La relación con Argentina, siempre ha sido un constante torbellino, y en materia energética uno de los hechos con mayor trascendencia fue la llegada del gas natural en 197, lo cual impacto en la calidad del aire en Chile y los precios en la electricidad. Pero no todo es color de rosa, existía un acuerdo de ambas partes que, si el gas en argentina comenzaba a escasear, lo primordial era abastecer a este, por ende, en 2007 Chile vivió un claro problema energético, lo que ayudo a que como país comenzáramos a buscar más opciones y no ser tan dependientes. Por otro lado, la relación con Bolivia ha sido de altos y bajos, en cuanto a la materia de gas y electricidad, debido a que los asuntos son manejados a nivel consular. Bolivia estaba decido a no otorgarnos gas, a menos que Santiago diera soluciones a las demandas de la Haya por una salida soberana al mar. Planteando al gas como embajador boliviano para así cumplir sus objetivos. Mientras que, con la llegada de Evo morales al poder, esto se agudizo ya que él se negaba a construir un gasoducto que desembocara en pueblo chileno para así provocarlo, muy por el contrario, el país se mantuvo neutral, y evito mayores conflictos y propicio nuevas negociaciones. Perú, puso a su disposición el gas que poseían, desestimando cualquier tipo de conflicto, pero a concretar este hecho, aparecieron las discrepancias, argumentando que los recursos no eran suficientes para sustentar a dos países, además la guerra del pacifico seguía calando hondo en la mente del pueblo peruano, lo que generaba una desconfianza mutua.

Una luz de esperanza[editar]

Un año que marco un cambio trascendental en el país fue el año 2011, debido a que en este muchas situaciones se presentaron, de diferente índole y materia, lo cual al actuar en conjunto genero un sinfín de reacciones.

Ese fue el año de la gran explosión estudiantil, de las manifestaciones de protesta contra las proyectadas represas de HidroAysén, de la rebelión de transversal en Magallanes contra el alza del precio del gas.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 164

Es así como ese año, el pueblo chileno saco la voz, manifestándose y exigiendo soluciones concretas frente a sus demandas. Era el comienzo de una nueva generación en donde la gente al fin estaba dejando atrás sus miedos de la dictadura, que también involucro materias económicas, como la reforma tributaria, el sueldo mínimo, el rol que mantenía el estado frente a las AFP. Esto conllevo a que las decisiones a nivel país fueran seleccionadas con mayor precisión y esmero, optando por cambios objetivos y soluciones reales, el estado estaba empecinado en comenzar un plan maestro.

El plan de ordenamiento Territorial Estratégico (POTE)[editar]

Gracias a un conjunto de medidas nacionales, tras diversos debates y propuestas, se logró la creación de un programa que contribuiría al desarrollo del país y como proceder frente a situaciones que requirieran un consenso nacional. La principal tarea de este Plan, consistía en atender las consultas e inquietudes de la sociedad, en organizaciones sociales, empresas o frente a autoridades políticas, para que cuando existieran propuestas, todos manejaran la información a la perfección y se pudiera llegar a un acuerdo. Además, otro aspecto destacable de POTE, fue el tema de la sustentabilidad, es decir comenzar a generar nuevas energías y nuevos proyectos que fueran amigables con el medioambiente. No todo estaba perdido, ya que aún existen demasiados recursos como las energías renovables no convencionales solo es cosa de tiempo y organización para sacarles un máximo de provecho y optar un camino hacia una transición completa y definitiva, con miras hacia el futuro.

Para fortuna de los chilenos, el país es rico en ERNC, tiene grandes reservas de agua dulce, tierras cultivables y su densidad demográfica es baja. Todo ello ha contribuido a que ahora sea un país que satisface las necesidades de su población y en el cual muchos añoran vivir.
Raúl Sohr, Así no podemos seguir, p. 170

Recepción y crítica[editar]

El libro Así no podemos seguir publicado el 1 de octubre y presentado el 26 de octubre del 2013 por el Senador Antonio Horvath, Sara Larraín y Melanie Jôsch en la Feria Internacional del Libro de Santiago (FILSA), tras dos semanas de su publicación, en un artículo de la Radio Bio Bio llamado Obras de autores chilenos se adueñan de primeros lugares en el ranking literario (2013)[1]​, se posicionó en el 4to lugar de la categoría no ficción del ranking literario chileno en ese entonces.

Además, en un artículo académico de la biblioteca online Scielo llamado Proyecto Hidroaysén: capitalismo extractivista[2]​, regulación estatal y acción colectiva en la Patagonia (2015) el autor del artículo cita a Raúl Sohr respecto a lo planteado en su libro, diciendo qué:

Chile estuvo y está al servicio de los grandes grupos económicos, con escasa planificación, y no impulsó de la mano del Estado iniciativas de generación energética no convencionales (ERNC); y, más tarde, no ha tenido condiciones políticas de aceptación ciudadana para implementar una que permita sustentabilidad y seguridad de abastecimiento en el largo plazo, para viabilizar su modelo de exportaciones.

Este libro constituye su última publicación y es parte de la trilogía compuesta por sus libros Chao petróleo (2011) y Chile a ciegas (2012), en un artículo de la Radio Cooperativa cuyo título es Raúl Sohr sobre recursos energéticos: El futuro de Chile son los movimientos sociales[3]​, menciona que en una conversación que tuvieron con Raúl Sohr respecto al contenido de su último libro este dice que:

El libro es una investigación sobre la naturaleza de las propuestas ecologistas verdes y si es verdad lo que plantean los ecologistas sobre que hoy el principal problema del mundo no es entre los trabajadores y los dueños del capital, sino que es una lucha entre el planeta y la especie humana.

Véase también[editar]

Raúl Sohr

Referencias[editar]

  1. Obras de autores chilenos se adueñan de primeros lugares en el ranking literario. Notas, biobio.cl. Consultado el 26 de mayo de 2017. Recuperado de http://www.biobiochile.cl/noticias/2013/10/21/obras-de-autores-chilenos-se-aduenan-de-primeros-lugares-en-el-ranking-literario.shtml
  2. Proyecto Hidroaysén: capitalismo extractivista, regulación estatal y acción colectiva en la Patagonia. Scielo, Sistema de Información Científica. Consultado el 26 de mayo de 2017. Recuperado de http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-65682015000100021
  3. Raúl Sohr sobre recursos energéticos: El futuro de Chile son los movimientos sociales. Cooperativa.cl. consultado el 26 de mayo de 2017. Recuperado de http://www.cooperativa.cl/noticias/cultura/literatura/feria-del-libro/raul-sohr-sobre-recursos-energeticos-el-futuro-de-chile-son-los-movimientos-sociales/2013-10-26/235511.html

Bibliografía[editar]

Sohr, Raúl. (2013) Así no podemos seguir. Debate. ISBN 9568410813