Renacimiento Vasco

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Euskaltzain y algunos escritores, en unas jornadas ordinarias celebradas por la Euskaltzaindia en 1927. De izquierda a derecha, de pie: Orixe, Jean Elizalde, Seber Altube, Julio Urkixo y Erramun Olabide. Sentados: Juan Bautista Eguzgitza, Bonifazio Etxegarai, Resurrección María Azkue y Georges Lakonbe.

El Renacimiento Vasco (en euskera Euskal Pizkundea) fue un movimiento cultural y político en algunos territorios de habla eusquérica de gran importancia, que se extendió desde la segunda mitad del siglo XIX hasta la primera mitad del siglo siglo XX. Este movimiento estuvo ligado al sentimiento de pérdida provocado después de la derrota carlista se y por la abolición de los fueros (ley de 21 de julio de 1876). El Renacimiento Vasco también estuvo ligada con una importante influencia del romanticismo. Los hechos que delimitaron esa época fueron la tercera guerra carlista y la guerra civil española; concretamente, duró desde 1876 hasta 1936 en el País Vasco y la zona vascófona de Navarra.[1][2]

El movimiento no fue solo cultural sino también político, estando en el ambiente del nacimiento del nacionalismo vasco, por parte de su padre, el político español Sabino Policarpo Arana. Ocurrió junto con otros procesos similares en Europa, como Cataluña (Reinaixença) y Galicia ( Rexurdimento, el galleguismo o Regionalismo gallego). Junto con los intelectuales de estas dos regiones, los vascos pusieron en marcha en 1923 la iniciativa Galeusca. Esta fecha marcó la primera mitad de este período, pues entonces se inició la dictadura de Miguel Primo de Rivera, que se prolongó hasta 1930.

"Fiesta de Beneficencia en San Sebastián, en favor de las familias de los marinos y del salvador José María Zubía que perecieron en la tormenta del pasado 9 de enero" (Leon Laurent. 1866)

Otros dos años significativos fueron 1918 y 1919, fundación de Eusko Ikaskuntza y Euskaltzaindia, respectivamente. Unos años antes se había iniciado el debate sobre la necesidad de un euskera unificado, y la creación de la academia de idiomas ayudó a desarrollar el proyecto. Sin embargo, aunque hubo propuestas interesantes para la unión en ese momento, la intención no se materializó completamente hasta después de la guerra (1968).

Por lo demás, aunque se centraba en torno al euskera, también participaron en el Renacimiento algunos escritores y agentes culturales vascos y de habla hispana. Entre los promotores tenemos a Anton Abbadia, Seber Altube, Sabino Arana, Resurrección María de Azkue, Arturo Campión, Andima Ibiñagabeitia, Sorne Unzueta (y otros miembros de la Asociación de Mujeres Nacionalistas Vascas), Julio de Urquijo e Iokin Zaitegi durante todo el período.

Juegos Florales Vascos[editar]

Anton Abadia, principal impulsor de los Juegos Florales Vascos.

Los " Juegos Florales Vascos " fueron una de las principales manifestaciones de esta época de renovación cultural. Estos festivales comenzaron gracias al apoyo económico del científico Antoine Thomson d'Abbadie d'Arrast, conocido en España como Anton Abadia, amante de la lengua vasca . El foco principal eran los concursos de poesía, aunque también hubo otros concursos. Los juegos se celebraban en un determinado pueblo, con diversas actuaciones musicales y juegos. Los primeros en el País Vasco Francés se realizaron en 1851, y se trasladaron al País Vasco español en 1879 por primera vez, en Elizondo (Navarra).

“Euskal-Erria revista vascongada”

Los últimos eventos se realizaron en la primera década del siglo XX.

Nacionalismo cultural y nacionalismo político[editar]

Sucede en diferentes ocasiones que el nacionalismo político parte de un nacionalismo cultural anterior. Así sucedió, por ejemplo, en Cataluña y Galicia. En el País Vasco, sin embargo, el sucesor natural de los Juegos Florales, los Euskaltzaleen Biltzarra, no tuvieron impacto en la sociedad, al menos en el País Vasco español. La difusión del nacionalismo vasco por parte político español Sabino Policarpo Arana es una de las razones del fracaso del nacionalismo cultural puro en el País Vasco español. Por ello, en las cuatro regiones que el nacionalismo vasco considera como una unidad (Laurak Bat, Hegoalde/País Vasco español) , las reivindicaciones culturales son, en gran medida, descendientes de las reivindicaciones políticas y, en buena medida, también dependientes de ellas. El nacionalismo político surgió por iniciativa de los no vascoparlantes, mientras que los vascos se volvieron abertzales (nacionalistas vascos) más tarde. Los abertzales propusieron un modelo lingüístico que era imposible de alcanzar debido a su purismo. Hasta la década de 1960, el euskera real y la tradición literaria se habían mantenido alejados de otro modelo más amplio.[3]

En Cataluña todo elemento procedente del resto de España lo catalanizan, y les place a sus naturales que hasta los municipales aragoneses y castellanos de Barcelona, hablen catalán; aquí padecemos muy mucho cuando vemos la firma de un PEREZ al pie de unos versos euzkericos, oímos hablar nuestra lengua a un cochero riojano, a un liencero pasiego o a un gitano, o cuando al leer la lista de marineros o náufragos de Bizkaya, tropezamos con apellido maketo.Los catalanes quisieran que, no sólo ellos, sino también todos los demás españoles establecidos en su región hablasen catalán; para nosotros sería la ruina el que los maketos residentes en nuestro territorio hablasen euskera. Para los catalanes sería una gloria el que el Gobierno español designase al idioma catalán para lengua oficial de toda España; al paso que si eso hiciera con el euskera, sería para nosotros el golpe de inevitable muerte asestado por la diplomacia más refinada. Si nos dieran a elegir entre una Bizkaya poblada de maketos que sólo hablasen el euzkera y una Bizkaya poblada de bizkaínos que sólo hablasen el castellano, escogeríamos sin dubitar esta segunda, porque es preferible la substancia bizkaina con accidentes exóticos que pueden elíminarse y substituirse por los naturales, a una substancia exótica con propiedades bizkainas que nunca podrían cambiarla. -Sabino Arana "Errores Catalanistas"

Referencias[editar]

Véase también[editar]

Bibliografía[editar]

Enlaces externos[editar]