Diferencia entre revisiones de «Aptenodytes forsteri»

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Revisión del 16:01 5 may 2010

 
Pingüino emperador
Estado de conservación
Preocupación menor (LC)
Preocupación menor (UICN)
Taxonomía
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Aves
Orden: Sphenisciformes
Familia: Spheniscidae
Género: Aptenodytes
Especie: A. forsteri
Gray, 1844
Distribución
Distribución del pingüino emperador
Distribución del pingüino emperador

El pingüino emperador (Aptenodytes forsteri), endémico de la Antártida (es la única especie que no emigra), es el más grande y pesado de todos los pingüinos. Su nombre científico, forsteri, le fue dado en 1844 en honor al naturalista alemán Johann Reinhold Forster. Destacan como grandes nadadores, por su particular forma de protegerse del frío, por su monogamia y el peculiar viaje que realizan en busca de su lugar de cría. Como el resto de pingüinos, no vuelan.

Descripción

Su cabeza y alas son negras; el abdomen, blanco; su pico es largo, puntiagudo y ligeramente curvo en su extremo; las patas son cortas y emplumadas hasta su mitad; presenta tonos dorados a los lados del cuello.

El macho y la hembra no presentan diferencias significativas en el tamaño (122 cm (ver sección "pingüinos gigantes"), peso (entre 22 y 37 kg) o plumaje; pero el macho tiene un pliegue abdominal entre sus cortas patas que le sirve de bolsa para incubar el huevo y cuidar la cría.
Las crías están cubiertas por un espeso plumaje gris, más lanoso y opaco que el de los adultos. Esta capa es vital en los primeros días.

Conducta

Archivo:Diving emperor penguin.jpg
Pingüino emperador sumergiéndose en la Antártida.

Para encontrar comida, el pingüino emperador puede sumergirse de 150 a 250 m en el océano Antártico; incluso hay constancia de arriesgadas inmersiones a 565 metros.[1]​ Dentro del agua pueden contener la respiración hasta 20 minutos. Esto es posible gracias a que cuenta con una hemoglobina especialmente estructurada para ser más eficiente manejando el oxígeno, y huesos sólidos para prevenir el barotrauma. También pueden reducir su metabolismo y desactivar sus funciones no esenciales. Su velocidad de nado es de 6 a 9 km por hora.

Se alimenta principalmente de peces, aunque también come crustáceos como el krill y cefalópodos (sobre todo calamares).

Para combatir el frío, estos pingüinos forman compactas agrupaciones con un curioso relevo. Los que están más al exterior poco a poco van adentrándose al centro del grupo, donde el calor se conserva mejor, y al mismo tiempo los del interior pasan a los bordes de la agrupación, donde sirven de barrera contra el frío y el viento. Fuera de la formación las temperaturas alcanzan los 40 °C bajo cero; dentro puede ser tan alta como 20 °C.

En ocasiones las hembras que han perdido su cría, en un intento desesperado, intentan apoderarse de una ajena, lo que es resistido por la progenitora atacada, que es ayudada por otras en defensa del orden.

Huevo.

Los pingüinos emperador recorren 90 km "tierra" adentro hasta el lugar de cría, lugar de encuentro de cientos de ellos. Siguen exactamente el mismo camino que sus antecesores para llegar hasta el territorio de reproducción. El viaje comienza en marzo o abril (fines de verano austral), con las extremas temperaturas de 40º bajo cero. Una vez en el lugar de cría, buscan pareja (como otros pingüinos, son monógamos para dar más seguridad a la progenie), realizando exhibiciones, levantando las alas o inclinándose. En mayo o junio (invierno austral) la hembra pondrá un huevo de aproximadamente 450 gramos. Este es el momento en el que la hembra pasa el huevo cuidadosamente con las patas al macho; si el huevo tocara más que unos segundos el hielo sería mortal para él. Una vez que el macho tiene el huevo en su pliegue de piel abdominal, la hembra inicia otro largo viaje hacia el mar en busca de comida.

Los machos forman compactas agrupaciones en las que se turnan del interior al exterior de la formación y viceversa. Así sobreviven al frío y a los fuertes vientos de hasta 200 km/hora. La incubación dura de 62 a 64 días. Si la cría nace antes del retorno de su madre, su padre la alimentará con una sustancia lechosa que segrega una glándula del esófago. Después de dos meses, ella regresa y encontrará a su pareja distinguiendo su llamada de la de cientos de pingüinos. Regurgitará la comida y alimentará a la cría. Es entonces el turno del macho para ir de nuevo a buscar comida al mar. Después de unas semanas regresará y los dos cuidarán de la cría. Si este ciclo se interrumpe en algún punto debido a la muerte de un progenitor la cría perece sin remedio.

Una vez sea independiente, formará pequeños grupos con las demás crías imitando el comportamiento de los adultos. Es aquí cuando son vulnerables a los ataques de aves de rapiña, por lo cual los adultos se esmeran por mantenerlos en grupos y enseñarles lo más rápidamente a nadar. En diciembre, ya serán grandes y comenzarán el viaje hacia el mar. Hasta los cinco años no se reproducirán. Se desconoce dónde van y qué hacen durante esta fase de su vida estos pingüinos.

Se tarda, prácticamente, toda una vida para encontrar una pareja con la cual reproducirse. Debido a que estas aves son especialmente monógamas, se profesan un amor incondicional y prácticamente eterno, ya que luego de su reproducción siguen juntos hasta las siguientes épocas de cría.

Preservación

No es una especie extraña. En la tierra, sus colonias a menudo están compuestas por cientos de miles de pingüinos, aunque en el pasado sufrieron grandes masacres a manos de los seres humanos, que los han matado por su grasa y por su piel. Por fortuna, la inaccesibilidad de la región antártica ha contribuido a su preservación.

Pingüinos gigantes

La especie llega a medir 1,20 m pero se han encontrado ejemplares que llegan a medir hasta 1,7 m cerca de la Base Marambio.[2][3]​ No obstante, la estimación de la estatura de estos pingüinos parece deberse a un error de apreciación, ya que se realizó desde el aire. No existen fuentes fiables hasta el momento para determinar o no de la existencia de ejemplares de esta estatura; únicamente fotos sacadas desde un avión a unos 50 m del suelo.

Películas sobre el pingüino emperador

  • El viaje del emperador: año 2005. Película documental que muestra los viajes que relizan los pingüinos emperador para anidar y reproducirse.
  • Happy Feet: año 2006. Película infantil de animación que trata, en clave de humor, las aventuras de un pingüino emperador que no sabe cantar, pero a su vez muestra también, de forma orientada principalmente a los niños, las costumbres de estos pingüinos e incluso algunas costumbres de los pingüinos adelia.

Vea el proyecto de arte: La Nostalgia De Los Pingüinos de Willy Puchner.

Referencias

  1. «Antarctic Photo Library» (en inglés). U.S. Antartic program. Consultado el 12-06-2008. 
  2. http://www.paralibros.com/jonas/j70650n.htm Pingüinos de 1,7 m en la Base Marambio
  3. http://www.lanacion.com.ar/Archivo/Nota.asp?nota_id=22564 Nota del Diario la Nación detallando el descubrimiento de pingüinos de hasta 1,7 m

Enlaces externos