María Granata

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María Granata
Información personal
Nacimiento 3 de septiembre de 1923 (100 años)
Bandera de Argentina Argentina Buenos Aires
Nacionalidad Argentina
Información profesional
Ocupación Poetisa
Narradora

María Granata (Buenos Aires, Argentina, 3 de septiembre de 1923) es una poetisa y narradora ubicada en la Generación del 40.

Actividad profesional[editar]

Nació en el barrio de Balvanera de la ciudad de Buenos Aires y empezó a escribir siendo muy niña, alentada por su padre, un médico italiano que la inició en la poesía de Leopardi y que murió cuando ella tenía 11 años. Cuenta que durante su adolescencia fue cuando más leyó y que después la atrajeron más las fervorosas «relecturas» y que desde entonces la subyugaron Quevedo, San Juan de la Cruz, Leopardi, Walt Whitman y, en narrativa, Dostoievski, Faulkner y Juan Rulfo. Entre otros.

En 1942, pocos meses después de radicarse en el Partido de San Vicente, una zona semirural a 45 kilómetros de Buenos Aires, donde continuó viviendo, la editorial «Conducta», dirigida por Leónidas Barletta, publicó su primer libro de poesía Umbral de tierra , por el que fue galardonada con el Premio Municipal y el Premio Martín Fierro. La obra, en la que algunos críticos vieron influencia de Leopoldo Lugones y Horacio Rega Molina en tanto otra “rescataba el cántico de una muchacha que se vertía emocionado ante la conjura de los seres animados o no, con plenitud expresiva y nobleza lírica”.[1]

Su siguiente obra, también de poemas, fue Muerte del adolescente (1946), elegida ese año, por el Club Libro del Mes. En 1952 publicó Corazón cavado que motivó que el crítico Luis Soler Cañas escribiera:

"Poeta en sentido verdadero, mira las cosas y las traspasa, las ilumina y nos las Ilumina, y, ni celosa ni avara, nos las entrega después de haberlas hecho pasar por su arco de luz. No es la poesía de Granata una poesía gozosa: en el misterio descifrado del mundo el espíritu del poeta halla con mayor frecuencia el dolor que la alegría."[1]

.

Otras de sus obras poéticas son Color humano (1966) y Los tumultos (1974). Sobre esta última dice que siempre había sentido el dramatismo del clan familiar destinado a desmembrarse y que de improviso, sin habérselo propuesto expresamente, un día se encontró dándole forma literaria al tema.

En sus novelas se acerca a lo imaginativo y barroco de modelos como los de García Márquez. La más conocida, Los viernes de la eternidad (1971), le significó el Premio Emecé y el Premio Nacional de Letras de Argentina Los viernes de la eternidad fue llevada al cine en 1981 por Héctor Olivera sobre un guion realizado por este y la escritora. Granata cuenta que nunca había pensado escribir una novela hasta una mañana en la que se le ocurrió de golpe el personaje del aparecido que viene a buscar a su mujer, la escena de los clavos y el final; esa misma tarde empezó a escribirla y la continuó a lo largo de once meses.

Otras novelas son La escapada, El jubiloso exterminio (1979) y El sol de los tiempos.

Las novelas y relatos de Granata

” atraen por su clima de transfusión de la realidad hacia una hipótesis de mágico encantamiento que, no obstante, desnuda los rasgos auténticos o imaginarios de un mundo donde el continentalismo se refugia en esa recurrencia de la identidad. La riqueza del lenguaje, la elegancia del estilo, sin ocultar la valoración existencial ni el flujo de la anécdota, capta las alternativas o los vaivenes de un universo secular que, en el decurso del tiempo (o a pesar de él), sigue con su bagaje de misterio, hábitos y usos.”[1]

En literatura para los niños y adolescentes, la escritora ha dado a sus obras un rico contenido histórico y ejemplar y en este rubro se destacan, El ángel que perdió un ala, El perro sin terminar, Los niños que bajaron del cielo, El gallo embrujado (1954), El ángel que perdió un ala (1974), La ciudad que levantó vuelo y El bichito de luz sin luz (1976) entre los más de 30 títulos que escribió.

Aparecen colaboraciones suyas en la mayoría de los diarios y revistas del país y del exterior y sus obras fueron incorporadas en antologías estimables, entre ellas las que recopilaron David Martínez, Miguel Brascó, Antonio Monti, Fermín Chávez, Guillermo Ara, José Isaacson y Luis Soler Cañas.

La Fundación Konex la distinguió en 1984 con el Diploma al Mérito en el rubro Novela correspondiente a la primera obra publicada después de 1950 y en 1994 con el Diploma al Mérito en el rubro Literatura Juvenil. También recibió, el Premio Consagración de la Provincia de Buenos Aires, el Premio Nacional de Letras de Argentina de 1972 y el Gran Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores de 1987.

Notas[editar]

  1. a b c Furlan, Luis Ricardo. «Homenaje a María Granata». Consultado el 1 de septiembre de 2015. 

Referencias[editar]