Acuerdo Sykes-Picot

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Acuerdo Sykes-Picot

Mapa del Acuerdo de Sykes-Picot
Función Definir la propuesta esfera de influencia y control en el Medio Oriente si acaso los Triple Entente vencen el Imperio otomano
Autor(es) Bandera del Reino Unido Mark Sykes y Bandera de Francia François Georges-Picot
Creación 23 de mayo de 1916
Signatario(s) Bandera del Reino Unido Edward Grey y Bandera de Francia Paul Cambon

Texto completo en Wikisource
Sykes
Picot

El Acuerdo Sykes-Picot, conocido oficialmente como el Acuerdo de Asia Menor, fue un acuerdo secreto entre Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda y la Tercera República Francesa[1]​ para definir las propuestas esferas de influencia y control de los dos países en el Próximo Oriente si acaso la triple entente obtuviera la victoria en contra del Imperio otomano en la Primera Guerra Mundial. Las negociaciones ocurrieron entre noviembre de 1915 y marzo de 1916,[2]​ se firmó el acuerdo el 16 de mayo de 1916,[3]​ y fue expuesto al público por Izvestia y Pravda el 23 de noviembre de 1917 y por el británico The Manchester Guardian el 26 de noviembre de 1917.[4][5]

Se considera que el acuerdo le dio forma a la región. Se definieron las fronteras de Irak y Siria, y ha llevado hasta el conflicto actual entre Israel y el pueblo palestino.[6]​ Muchas personas ven el acuerdo como un punto de inflexión en las relaciones entre el mundo del Occidente y el mundo árabe. Se negaron las promesas hechas a los árabes[7]​ por el coronel T. E. Lawrence de una patria nacional y árabe en el área de Gran Siria, a cambio de haberse aliado con los británicos en contra del Imperio otomano. La arquitectura geopolítica fundada por Sykes-Picot y la protección que disfrutaron las minorías religiosas y étnicas en el Medio Oriente desaparecieron en julio de 2014.[8]​ El Estado Islámico dijo que una de sus metas en su insurgencia, es revertir los efectos de Sykes-Picot.[9][10][11]

Se repartió a los británicos el control de las áreas desde la línea de la costa del mar Mediterráneo hasta el Río Jordan, Jordania, el sur de Irak y una pequeña área que incluyó los puertos de Haifa y Acre para dejar acceso al Mediterráneo.[12]​ Se repartió a los franceses el control del sureste de Turquía, el norte de Irak, Siria y Líbano.[12]​ El Imperio ruso iba a recibir Estambul, los Estrechos Turcos y Armenia.[12]​ Se dejaron libres a los poderes para decidir las fronteras dentro de sus propias áreas.[12]​ Se esperaron más negociaciones con otros poderes incluyendo a Rusia y Husayn ibn Ali, jerife de La Meca para determinar la administración internacional.[12]

Dada la derrota eventual del 1918 y la subsiguiente partición del Imperio otomano, el acuerdo efectivamente se dividió las provincias árabes de los otomanos fuera de la Península arábiga en áreas de influencia y control de los británicos y franceses[13]​ y se propuso una «administración internacional» para Palestina.[14]​ Los británicos formaron el Mandato británico de Palestina entre 1920 y 1948 y el Mandato británico de Irak desde 1920 hasta 1932, mientras el Mandato francés de Siria y Líbano duró desde 1923 hasta 1946. Los diplomáticos británico y franceses Mark Sykes y François Georges-Picot negociaron los términos del acuerdo. El gobierno de los zares en Rusia fue una parte menor en el acuerdo y cuando ocurrió la Revolución rusa, fueron los bolcheviques quienes publicaron el acuerdo el 23 de noviembre de 1917, resultando que «los británicos se avergonzaron, los árabes se consternaron y los turcos se alegraron».[15]

Discusiones británica-sionista

Edward Grey firmó el acuerdo por los británicos
Archivo:Herbert Samuel.JPG
Herbert Samuel

Se habló del sionismo por primera vez en un Gabinete británico el 9 de noviembre de 1914, cuatro días después de la declaración de guerra británica en contra del Imperio otomano. David Lloyd George, el entonces Canciller de la Hacienda «refirió al destino último de Palestina»[16][17]​ Hace 10 años atrás la Federación sionista de Gran Bretaña e Irlanda empleó el bufete de Lloyd George, Lloyd George, Roberts & Co para trabajar en el Programa para la Uganda Británica.[18]​ En una discusión con Herbert Samuel, Lloyd George le aseguró de que «él deseó mucho ver un estado judío que se establezca en Palestina».[16][19]​ Después Samuel se resumió la posición sionista en una conversación con Edward Grey, Secretary of State for Foreign and Commonwealth Affairs. Habló de las aspiraciones sionistas para establecerse un estado judío en Palestina y la importancia de su ubicación geográfica por el Imperio británico. En sus recuerdos, Samuel dice: «Mencioné que dos cosas serían esenciales — que el estado debe ser neutralizado, porque no podría ser bastante grande para defenderse, y que el acceso libre de peregrinos cristianos debe ser garantizado. ... Dije también que sería una gran ventaja si el resto de Siria fue anexado por Francia, porque sería mucho mejor que el estado tenga un poder europeo como vecino y no el turco»[16][20]​ La misma noche, el Primer Ministro Herbert Henry Asquith anunció en un discurso que una meta de la guerra fue desmembrar el Imperio otomano, «Sólo es el gobierno otomano, y nosotros no, quienes se han tañido la muerte del dominio otomano no sólo en Europa sino en Asia».[21]

En enero de 1915, Samuel entregó un memorándum titulado The Future of Palestine al gabinete, después de discusiones con el sionista Jaim Weizmann y Lloyd George. El 5 de febrero de 1915, Samuel tuvo otra discusión con Grey: «Cuando le pregunté qué fue su solución, él me dijo que podría ser posible a neutralizar el país bajo una garantía internacional ... y a vestir el gobierno del país en algún tipo de consejo establecido por los judíos»[22][23]​ Después de más conversaciones con Lloyd George y Grey, Samuel circuló un texto revisado al gabinete en el medio de marzo de 1915.

El informe del Comité de Bunsen, entregado en el junio de 1915, no consideró ni el Sionismo ni la Cuestión Judia, a pesar de reunirse para determinar la política británica en tiempo de guerra hacia el Imperio otomano.[24]

Antes de la salida de Sykes para reunirse con el Ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Sazónov en Petrogrado el 27 de febrero de 1916, Samuel se le acercó con un plan en la forma de un memorándum. Sykes escribió a Samuel, sugiriéndole si Bélgica asumiría la administración de Palestina tendría que ser más aceptable a Francia que la alternativa de una administración internacional, la cual los franceses quisieron y las sionistas no.

Promesas conflictivas

Henry McMahon
Husayn bin Ali

George Curzon dijo que los grandes poderes tuvieron compromiso con el Acuerdo Reglement Organique, lo cual fue sobre gobernar y no interferir en los asuntos de las comunidades de maronito, cristiano ortodoxo, druso y musulmán en cuanto al Beirut Vilayet de junio de 1861 y septiembre de 1864. Los derechos conferidos a Francia en el área azul bajo el Acuerdo Sykes-Picot no fuesen compatibles con dicho acuerdo.[25]

En mayo de 1917, William Ormsby-Gore escribió:

«Las intenciones francesas en Siria seguramente no son compatibles con las metas de guerra de los aliados como definidas al gobierno ruso. Si la auto-determinación de nacionalidades vaya a ser el principal, la interferencia de Francia en la selección de consejeros para el gobierno árabe y la sugerencia por Francia que los árabes se seleccionarán los emires en Mosul, Aleppo y Damasco parecían totalmente incompatibles con nuestras ideas de liberar la nación árabe y de establecer un estado árabe libre e independiente. El gobierno británico, en autorizar las cartas mandadas al rey Husayn [Jerife de La Meca] por Sir Henry McMahon antes del estallido de la rebelión, parece levantar una sospecha si nuestros compromisos al rey Husayn, como jefe de la nación árabe, son consistentes con las intenciones francesas para no hacer solamente la Siria sino también Mesopotamia alta y Tunis. Si nuestro apoyo de rey Husayn y los otros líderes árabes de origen menos distinguidos y prestigiosos significa algo, significa que somos preparados a reconocer la soberanía completa e independiente de los árabes de Árabia y Siria. Parece que ya sea hora a familiarizase al gobierno francés con nuestros detallados compromisos a rey Husayn y hacerlo claro a este último si es él o alguien más que vaya a ser el jefe de Damasco, lo cual es el único capital para un estado árabe, lo cual podría ordenar la obediencia de otros emires árabes».[26]

Muchas fuentes arguyen que Sykes-Picot discrepara con la Correspondencia Husayn-McMahon de 1915–1916 y que la publicación del Sykes–Picot al fin de 1917 causó la resignación de Sir Henry McMahon.[27]​ Sin embargo, el plan Sykes–Picot en sí mismo describe como el Reino Unido y Francia fuesen preparados a reconocer y proteger un estado árabe e independiente, o confederación de estados árabes, bajo la soberanía de un jefe árabe dentro de las zonas que se marcan A y B en el mapa.

Contexto

Finalmente, las negociaciones incluyeron a Rusia. Desde que los aliados occidentales entraron a la guerra, la Rusia zarista presionó por lograr su antigua ambición de obtener una entrada marítima al Mediterráneo mediante el dominio del estrecho de los Dardanelos. Cuando el Imperio otomano turco se convirtió en aliado del enemigo alemán, los rusos lograron que en 1915 los aliados occidentales apoyaran sus exigencias de acceso a las costas mediterráneas, que debían concretarse si fueren vencedores en la guerra. El Tratado de Paz de Brest Litovsk (marzo de 1918), firmado entre el Gobierno bolchevique de Rusia y el Imperio alemán, liberó a los restantes aliados del cumplimiento de los términos de estos acuerdos hacia los rusos. No obstante, durante la Revolución de Octubre, los bolcheviques hicieron público el contenido de este y otros acuerdos secretos, lo que causó muchas dificultades a las alianzas que los británicos tenían con los líderes nacionalistas árabes.

Los acuerdos están basados en la partición del Oriente Próximo en cinco zonas: una de control británico, una de control francés; una de influencia británica o protectorado británico; una de influencia francesa o protectorado francés y una de administración internacional (que incluía las ciudades de Jerusalén y Nazaret). Originalmente los acuerdos mencionan también una zona de control ruso, pero al parecer estos fueron cambiados de mutuo acuerdo en 1917 y luego fueron refrendados durante la conferencia de San Remo y recibieron también un aval de la Sociedad de Naciones.

Historia

El 3 de enero de 1916 Mark Sykes representando a Reino Unido y François Georges-Picot representando a Francia acordaron la división general del Oriente Próximo una vez terminada la guerra y derrotado el imperio otomano. Francia recibiría la Siria de hoy y su zona costera, de que se convertiría la mayor parte en el Líbano actual. Ejercería un ámbito de influencia hacia el Este, hasta Mosul. Los británicos obtuvieron Basora y Bagdad y un ámbito de influencia hacia el Este, hasta Persia (el futuro Irán.)

Palestina quedó indefinida, pero finalmente fue otorgada como el Mandato británico de Palestina bajo un mandato de la Sociedad de Naciones. En el momento de las negociaciones de Sykes-Picot, los británicos negociaban también con el jerife de La Meca Husayn ibn Ali el apoyo aliado a una revuelta contra los otomanos, de la que debería surgir un Estado árabe unificado en todos los territorios arrebatados a los turcos, desde Siria hasta el Yemen. De estas negociaciones, cuyos acuerdos Gran Bretaña no tenía intención de cumplir (pues contradecían las propias conversaciones Sykes-Picot) surgió la Rebelión Árabe, que supondrá la efímera independencia del Hiyaz, la aún más efímera unificación de los territorios árabes otomanos bajo la acción de las tropas árabes y, finalmente, la colocación de la dinastía de los hachemíes en varios tronos de la zona y la creación del nuevo reino de Transjordania. En la rebelión participaría como enlace británico Thomas Edward Lawrence (conocido como Lawrence de Arabia).

Igualmente los británicos, cautelosos con sus palabras, alentaron a los judíos al señalar que veían con buenos ojos el establecimiento de un futuro estado judío en Palestina, mediante la llamada Declaración Balfour. En efecto, como medida de guerra, los británicos alentaban las aspiraciones nacionalistas de las comunidades árabes en los mismos territorios.

Divulgación del acuerdo

Ilustración del acuerdo publicado en el Manchester Guardian, lunes el 26 de noviembre de 1917. Fue la primera referencia en el idioma inglés al acuerdo que llevó los nombres de sus dos negociadores

Se negaron las reclamaciones rusas sobre territorios en el Imperio otomano después de la Revolución rusa y por eso los bolcheviques publicaron un ejemplo del Acuerdo Sykes-Picot, (igual que otros tratados) con los textos enteros en Izvestia y Pravda el 23 de noviembre de 1917; el 26 del mismo mes The Manchester Guardian también publicó el acuerdo.[28]​ Esta divulgación causó gran revuelto entre los aliados y avivó gran desconfianza entre ellos y los árabes.

La Declaración Anglo-Francesa de noviembre de 1918 prometió que el Reino Unido y Francia «asistiría en el establecimiento de gobiernos y administraciones nativos en Siria y Mesopotamia» por «instalar gobiernos y administraciones nacionales que derivan su autoridad del libre ejercicio de la iniciativa y elección de los pueblos nativos». A regadientes, los franceses se acordaron a publicar la declaración por la insistencia de los británicos. Las minutas de una reunión del gabinete de guerra británico revela que citó las leyes de conquista y ocupación militar para evitar compartir la administración con los francese bajo un régimen civil.

La aclaración de Lloyd George

Zonas de francés (azul), británico (rojo) y ruso (verde) áreas de influencia y control establecidas por el Acuerdo Sykes-Picot. En una reunión en Downing Street el 16 de diciembre de 1915 Sykes había declarado «me gustaría dibujar una línea desde el e en Acre hasta la k en Kirkuk»[29]
David Lloyd George en 1915

Las notas tomadas por los británicos durante una reunión entre los Cuatro Grandes en París el 20 de marzo de 1919 y atendido por Woodrow Wilson, Georges Clemenceau y Vittorio Emanuele Orlando además de Lloyd George y Lord Balfour,[30]​ muestran la aclaración de Lloyd George sobre la historia del acuerdo.

Las áreas azules, de los franceses, en los cuales «se permite establecer tales administraciones o controles, directos o indirectos como ellos desean o consideran conveniente arreglar con los estados árabes o confederaciones de estados árabes» pero que, según los británicos, no incluyeron Damasco, Homs, Hama, o Aleppo. En área A (véase mapa) Francia fue «preparado a reconocer y mantener un estado árabe e independiente o confederaciones de estados árabes».[31]

Desde el Acuerdo Sykes–Picot, se ha adoptado todo el sistema de mandatos de la Sociedad de Naciones. Si se permitiera un mandado sobre estos territorios, Francia quiso aquella parte que lo han apartado para ella. Lloyd George dijo que no podría quebrar el tratado que el Reino Unido tuvo con Husayn ibn Ali (jerife de La Meca). Le preguntó si los franceses intentaran ocupar Damasco porque si fuese así, sería una violación del tratado que los británicos tuvieron con Husayn. Stéphen Pichon dijo que la Francia no tuviera acuerdo con el rey Husayn. Lloyd George dijo que todo el acuerdo de Sykes–Picot se basó en la correspondencia Husayn-McMahon entre Sir Henry McMahon y el rey Husayn,[32]​ y, por eso, rey Husayn había comprometido sus recursos para ayudar el Reino Unido a ganar la guerra contra los otomanos en la Primera Guerra Mundial. Lloyd George afirmó que Francia había aceptado ese compromiso británico cuando firmó el Acuerdo Sykes-Picot. Si el gobierno británico ahora estuviera de acuerdo que Damasco, Homs, Hama, y Aleppo deben estar incluidos en la esfera de influencia directa de los franceses, los británicos tendrían que romper su promesa con los árabes, y no estuvieran dispuestas a hacer esto.

Se firmó el acuerdo de Sykes-Picot, donde Francia reconoció la independencia árabe, después de la carta británica mandada a Husayn: «así se acuerdan y se entienden los gobiernos británico y francés». El hecho que la Francia y el Reino Unido se pepararon para reconocer y mantener un estado independiente y árabe en los áreas marcado como A y B bajo la soberanía de un jefe árabe». Así el hecho que Francia firmó Sykes-Picot, según los británicos, reconoció el acuerdo con Husayn, así excluyendo Damasco, Homs, Hama, y Aleppo de la zona azul de una administración francesa y directa, porque el mapa del acuerdo mostró claramente que estas ciudades se incluyeron en un estado independiente árabe, según Lloyd George. Pichon respondió que la Francia no podría ser limitada por lo que fuese por ella un acuerdo desconocido con Husayn y se había comprometido a mantener «un estado árabe o confederación de estados árabes», pero este compromiso no significaba el Reino de Hiyaz y si fuese prometido un mandato en Siria sólo sería de acuerdo con el estado árabe o la confederación de estados árabes.[33]

Consecuencias

A partir de la Conferencia de Paz de París (1919), Gran Bretaña no solamente obtuvo un mandato en Palestina, sino también tomó Mosul, al que agregó Basora y Bagdad para crear el reino de Irak. Recortó a Siria (ya ocupada por Francia) un territorio, que añadió a Iraq, y la Alta Galilea para poder transportar mediante oleoducto el petróleo de Mosul a Haifa. Todas estas adjudicaciones territoriales estuvieron de acuerdo con las directrices de los acuerdos Sykes-Picot.

Compensó a la familia Hussein por ser expulsados de Siria, separando Transjordania de Palestina, que otorgó al segundo hijo de Hussein, Abd Allah como monarca. Iraq se lo otorgó a Faysal como monarca, pero siempre manteniendo un mandato o un protectorado sobre los territorios.

Una preocupación más para los británicos, que tenían muchas colonias pobladas por musulmanes, era eliminar el poder del califa turco sobre el panislamismo. Esta es una de las razones por las qué apoyaron al jerife Husayn ibn Ali en la Meca y dejaron neutral a Abdul Aziz ibn Saud en el centro de Arabia, para que sirvieran de contrapeso a cualquier movimiento pan-islámico. Se movieron para reducir la influencia individual del califa a través del Oriente Próximo fomentando el nacionalismo secular árabe y creando, cuando fue posible, nuevos pequeños estados, en una forma compatible con la política exterior del Imperio británico.

Donde se vieron frustrados los planes del tratado Sykes-Picot fue en Turquía al surgir la figura de Mustafa Kemal Atatürk para dirigir la Guerra de Independencia Turca y liberar a ese país del control foráneo que se intentaba al finalizar la guerra. Pero en general, el tratado fue implementado en los términos para los que fue concebido. Las consecuencias de su implementación crearon las condiciones de dominio francés y británico y los conflictos regionales que han impedido una paz duradera desde esa fecha.

Referencias

  1. Fromkin, David (1989). A Peace to End All Peace: The Fall of the Ottoman Empire and the Creation of the Modern Middle East. New York: Owl. pp. 286, 288. ISBN 0-8050-6884-8. 
  2. The Middle East in the twentieth century, Martin Sicker
  3. http://www.law.fsu.edu/library/collection/LimitsinSeas/IBS094.pdf p. 8.
  4. Syria and Lebanon are often in the news
  5. Castles Made of Sand: A Century of Anglo-American Espionage and Intervention Google Books
  6. Middle East still rocking from first world war pacts made 100 years ago Publicado por The Guardian el 30 de diciembre de 2015
  7. Una película: Director James Hawes título=Lawrence of Arabia: The Battle for the Arab World publicado por PBS Home Video fecha=21 October 2003 Entrevista con Kamal Abu Jaber, anterior Ministro de relaciones exteriores de Jordania.
  8. «Bientôt le souvenir de l’église catholique chaldéenne et des églises syriaques (orthodoxes & catholiques) sera plus qu’un souffle de vent chaud dans le désert (In French)». paysages in LeMonde.fr. Consultado el 10 de agosto de 2014. 
  9. «This is not the first border we will break, we will break other borders," a jihadist from ...». www.theguardian.com. The Guardian. Consultado el 30 de mayo de 2014. 
  10. «Watch this English-speaking ISIS fighter explain how a 98-year-old colonial map created today’s conflict». LA Daily News. 7 de febrero de 2014. Consultado el 3 de julio de 2014. 
  11. Phillips, David L. «Extremists in Iraq need a history lesson». CNBC. 
  12. a b c d e Text of the Sykes–Picot Agreement at the WWI Document Archive
  13. Peter Mansfield, British Empire magazine, Time-Life Books, no 75, p. 2078
  14. Eugene Rogan, The Fall of the Ottomans, p.286
  15. Peter Mansfield, The British Empire magazine, no. 75, Time-Life Books, 1973
  16. a b c Grooves Of Change: A Book Of Memoirs Herbert Samuel
  17. Britain's Moment in the Middle East, 1914-1956, Elizabeth Monroe, p26
  18. Conservative Party attitudes to Jews, 1900–1950, Harry Defries
  19. A Broken Trust: Sir Herbert Samuel, Zionism and the Palestinians, Sarah Huneidi, p261
  20. Samuel, Grooves of Change, p174
  21. J Schneers, "Balfour Declaration" (London 2012)
  22. Samuel, Grooves of Change, p176
  23. In the Anglo-Arab Labyrinth, Elie Kedourie
  24. A broken trust: Herbert Samuel, Zionism and the Palestinians 1920–1925, By Sahar Huneidi
  25. CAB 27/24, E.C. 41 War Cabinet Eastern Committee Minutes, December 5, 1918
  26. See UK National Archives CAB/24/143, Eastern Report, No. XVIII, May 31, 1917
  27. See CAB 24/271, Cabinet Paper 203(37)
  28. http://www.law.fsu.edu/library/collection/LimitsinSeas/IBS094.pdf p. 9.
  29. A Line in the Sand, James Barr, p.12
  30. 'The Council of Four: minutes of meetings March 20 to May 24, 1919, page 1'
  31. 'The Council of Four: minutes of meetings March 20 to May 24, 1919, page 6'
  32. The Council of Four: minutes of meetings March 20 to May 24, 1919, Page 7
  33. The Council of Four: minutes of meetings March 20 to May 24, 1919, Page 8

Véase también

Más lectura

  • Erik Jan Zürcher (2004). Turkey: A Modern History. I.B.Tauris. pp. 143-145. ISBN 1-86064-958-0. 
  • Isaiah Friedman (1992). The Question of Palestine. Transaction Publishers. pp. 97-118. ISBN 0-88738-214-2. 
  • James Barr (2012). A Line in the Sand: Britain, France and the Struggle That Shaped the Middle East. Simon & Schuster. ISBN 1-84739-457-4. 

Enlaces externos