Diferencia entre revisiones de «Despotismo ilustrado»

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Contenido eliminado Contenido añadido
Deshecha la edición 30794383 de 200.127.224.235 (disc.), revirtiendo
Línea 7: Línea 7:
== Orígenes y desarrollo ==
== Orígenes y desarrollo ==


== Grandes intelectuales ilustrados ==
=
Toda la corriente racionalista y empirista, representada por la Ilustración, tenía como fin la crítica del orden vigente y su transformación en un orden adecuado a la naturaleza humana y, por lo tanto, más idóneo para la consecución de la felicidad. Este esfuerzo se vio acaudillado en Francia por los dos filósofos más famosos de la Ilustración: Tomas Hobbes, Charles de Secondat, barón de Montesquieu y François-Marie Arouet, Voltaire. Ellos fueron los divulgadores ideológicos que tuvo la burguesía en su pugna por el poder.

La obra de Hobbes: su leviathan.

En esta obra Tomas hobbes contribuye a nutrir las corrientes del despotismo ilustrado, que veía al Leviatan, estado, como garante y tutor del pueblo que sufría un estado de minoría de edad permanente.La soberanía residía en el Estado representado este en el rey , quien era responsable del bienestar de su pueblo, pero sin hacerlo participar en las soluciones.

=== La obra de Montesquieu ===
Como presidente del Parlamento de Burdeos, Montesquieu ejerció una considerable influencia en la formación de la conciencia burguesa que se estaba formando en el siglo XVIII. En realidad, era un aristócrata conservador que defendía al Parlamento como fundamento de los privilegios políticos de la nobleza frente al absolutismo real.

'''''[[El espíritu de las leyes]]''''' es considerada su obra más importante y fue el ideario político la nueva generación. En ella explica cómo las leyes derivan de una serie de factores físicos, sociales e históricos: "las leyes tienen sus leyes". Éstas tienen su propia grandeza, incluso frente a la debilidad de los legisladores. Existen, según Montesquieu, tres formas de gobierno (republicana, monárquica y despótica), y la mejor será aquélla en que estén separados los tres poderes: legislativo (el que hace las leyes), ejecutivo (el que las hace cumplir) y judicial (el que dictamina la justicia).

El poder legislativo debía estar en las asambleas parlamentarias (formadas por la aristocracia), que actuarían además como intermediarias entre el ejecutivo (monarca) y el resto de la nación.
Montesquieu fue el proclamador en el continente de las ideas políticas del filosofo inglés [[John Locke]].

=== El modelo burgués de Voltaire===
Ya viejo, desde su castillo de Fresnay, Voltaire fue el "Rey" de toda la Europa intelectual. Sus cartas llegaron a todos los salones ilustrados y fueron leídos con avidez y admiradas.
Introdujo en Francia la filosofía de Newton con una prosa fácil y brillante. Se negó a resolver los grandes problemas metafísicos y con su espíritu agudo trató todos los problemas del hombre de su tiempo. Fue el principal impulsor y representante del '''Siglo de las luces'''.
Una política fuerte es -según él- la salvaguardia de la libertad. No cree en la igualdad y le parece beneficiosa la jerarquía social. Considera la educación como fundamental para el progreso, pero no debe generalizarse. En religión es deísta, es decir, cree en un Ser Supremo, pero lo relega a la función de Creador o primer motor de la existencia. Es además, profundamente anticlerical ("hay que tener una religión y no creer en los sacerdotes"), partidario de las reformas administrativas y civiles (prohibición de la tortura, de la pena de muerte y de las detenciones arbitrarias; mejora de los repartos de impuestos; unidad legislativa y supresión de aduanas interiores).
En sus obras '''Ensayo sobre las costumbres y el espíritu de las naciones''' y el '''Diccionario filosófico''' ataca los grandes principios de la época y combate el despotismo y la autoridad.

=== Rousseau o el naturalismo ilustrado===
Tanto como Montesquieu como Voltaire representaban la tendencia racionalista de los ilustrados, pero se produjo también una reacción de carácter naturalista, cuyo representante francés más destacado fue '''[[Jean Jacques Rousseau]]'''.
La personalidad ardiente y apasionada de Rousseau le llevó a desdeñar los principios fríos y racionalistas de sus antecesores ilustrados.
Las primeras obras de este pensador que alcanzaron resonancia fueron las de carácter social y pedagógico: '''''Nueva Eloísa''''' y '''''Emilio''''', en las que exponía la virtud de un retorno a la naturaleza, desplegando las naturales cualidades humanas del amor, generosidad y piedad, y abandonando la educación intelectualista por otra basada en los conocimientos físico - naturales y artísticos.
Sus opiniones religiosas son menos audaces que las de Voltaire y Diderot, no así sus ideas políticas, que expone en '''''El discurso sobre la desigualdad''''' y en '''[[El contrato social]]'''. El hombre, para Rousseau, es naturalmente bueno, pero la civilización lo corrompe. La iniquidad comenzó con el primero que dijo "eso es mío", dando origen a la propiedad, y con ella a esta sociedad. El "Contrato" es un pacto mutuo que une a un hombre (el gobernante) con todos (los gobernados). El régimen perfecto es el democrático, en el que todos los ciudadanos participan de la soberanía, que es la ley como resultado de la voluntad general. La [[libertad]] no es más que la obediencia a estas [[ley]]es.


== Consecuencias ==
== Consecuencias ==

Revisión del 21:56 21 oct 2009

Voltaire en la corte de Federico II de Prusia

El despotismo ilustrado es un concepto político que se enmarca dentro de las monarquías absolutas y que pertenece a los sistemas de gobierno del Antiguo Régimen europeo, pero incluye las ideas filosóficas de la Ilustración, según las cuales, las decisiones del hombre son guiadas por la razón. Los monarcas de esta doctrina contribuyeron al enriquecimiento de la cultura de sus países y adoptaron un discurso paternalista.

También se le suele llamar despotismo benevolente o absolutismo ilustrado; y a quienes lo ejercen dictador benevolente.

Orígenes y desarrollo

Grandes intelectuales ilustrados

Toda la corriente racionalista y empirista, representada por la Ilustración, tenía como fin la crítica del orden vigente y su transformación en un orden adecuado a la naturaleza humana y, por lo tanto, más idóneo para la consecución de la felicidad. Este esfuerzo se vio acaudillado en Francia por los dos filósofos más famosos de la Ilustración: Tomas Hobbes, Charles de Secondat, barón de Montesquieu y François-Marie Arouet, Voltaire. Ellos fueron los divulgadores ideológicos que tuvo la burguesía en su pugna por el poder.

La obra de Hobbes: su leviathan.

En esta obra Tomas hobbes contribuye a nutrir las corrientes del despotismo ilustrado, que veía al Leviatan, estado, como garante y tutor del pueblo que sufría un estado de minoría de edad permanente.La soberanía residía en el Estado representado este en el rey , quien era responsable del bienestar de su pueblo, pero sin hacerlo participar en las soluciones.

La obra de Montesquieu

Como presidente del Parlamento de Burdeos, Montesquieu ejerció una considerable influencia en la formación de la conciencia burguesa que se estaba formando en el siglo XVIII. En realidad, era un aristócrata conservador que defendía al Parlamento como fundamento de los privilegios políticos de la nobleza frente al absolutismo real.

El espíritu de las leyes es considerada su obra más importante y fue el ideario político la nueva generación. En ella explica cómo las leyes derivan de una serie de factores físicos, sociales e históricos: "las leyes tienen sus leyes". Éstas tienen su propia grandeza, incluso frente a la debilidad de los legisladores. Existen, según Montesquieu, tres formas de gobierno (republicana, monárquica y despótica), y la mejor será aquélla en que estén separados los tres poderes: legislativo (el que hace las leyes), ejecutivo (el que las hace cumplir) y judicial (el que dictamina la justicia).

El poder legislativo debía estar en las asambleas parlamentarias (formadas por la aristocracia), que actuarían además como intermediarias entre el ejecutivo (monarca) y el resto de la nación. Montesquieu fue el proclamador en el continente de las ideas políticas del filosofo inglés John Locke.

El modelo burgués de Voltaire

Ya viejo, desde su castillo de Fresnay, Voltaire fue el "Rey" de toda la Europa intelectual. Sus cartas llegaron a todos los salones ilustrados y fueron leídos con avidez y admiradas. Introdujo en Francia la filosofía de Newton con una prosa fácil y brillante. Se negó a resolver los grandes problemas metafísicos y con su espíritu agudo trató todos los problemas del hombre de su tiempo. Fue el principal impulsor y representante del Siglo de las luces. Una política fuerte es -según él- la salvaguardia de la libertad. No cree en la igualdad y le parece beneficiosa la jerarquía social. Considera la educación como fundamental para el progreso, pero no debe generalizarse. En religión es deísta, es decir, cree en un Ser Supremo, pero lo relega a la función de Creador o primer motor de la existencia. Es además, profundamente anticlerical ("hay que tener una religión y no creer en los sacerdotes"), partidario de las reformas administrativas y civiles (prohibición de la tortura, de la pena de muerte y de las detenciones arbitrarias; mejora de los repartos de impuestos; unidad legislativa y supresión de aduanas interiores). En sus obras Ensayo sobre las costumbres y el espíritu de las naciones y el Diccionario filosófico ataca los grandes principios de la época y combate el despotismo y la autoridad.

Rousseau o el naturalismo ilustrado

Tanto como Montesquieu como Voltaire representaban la tendencia racionalista de los ilustrados, pero se produjo también una reacción de carácter naturalista, cuyo representante francés más destacado fue Jean Jacques Rousseau. La personalidad ardiente y apasionada de Rousseau le llevó a desdeñar los principios fríos y racionalistas de sus antecesores ilustrados. Las primeras obras de este pensador que alcanzaron resonancia fueron las de carácter social y pedagógico: Nueva Eloísa y Emilio, en las que exponía la virtud de un retorno a la naturaleza, desplegando las naturales cualidades humanas del amor, generosidad y piedad, y abandonando la educación intelectualista por otra basada en los conocimientos físico - naturales y artísticos. Sus opiniones religiosas son menos audaces que las de Voltaire y Diderot, no así sus ideas políticas, que expone en El discurso sobre la desigualdad y en El contrato social. El hombre, para Rousseau, es naturalmente bueno, pero la civilización lo corrompe. La iniquidad comenzó con el primero que dijo "eso es mío", dando origen a la propiedad, y con ella a esta sociedad. El "Contrato" es un pacto mutuo que une a un hombre (el gobernante) con todos (los gobernados). El régimen perfecto es el democrático, en el que todos los ciudadanos participan de la soberanía, que es la ley como resultado de la voluntad general. La libertad no es más que la obediencia a estas leyes.

Consecuencias

Este sistema, visto como una etapa madura del absolutismo monárquico, decayó en los últimos años del siglo XVIII. Las ideas de la Ilustración, adoptadas por estos monarcas, fueron también la mecha que prendió en los sentimientos de las clases desfavorecidas -en especial la burguesía, que cobraba mayor relevancia- para combatir a un sistema absolutista voraz y generador de desigualdad social, y encaminarse hacia un gobierno constitucional.

Véase también