Diferencia entre revisiones de «Equus hydruntinus»

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Revisión del 09:19 21 oct 2009

 
Zebro
Estado de conservación
Taxonomía
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Orden: Perissodactyla
Familia: Equidae
Género: Equus
Especie: E. hydruntinus
Regàlia, 1904

El zebro es una especie extinta de équido salvaje que vivía en la Península Ibérica antes de extinguirse a finales del siglo XV.

Durante la Edad Media se le denominaba zebro en Portugal, León y Castilla y zebra o encebra en la Corona de Aragón.

Características

Las crónicas medievales describen al zebro como un animal similar al asno doméstico, pero más alto, fuerte y robusto, además de muy veloz en la carrera y bastante mal genio. El pelaje era gris ("de pelo de rata" es un comentario típico en las descripciones medievales) interrumpido por una banda oscura a lo largo del lomo. Parece que el morro era también oscuro, mientras que las patas presentaban rayas blancas y negras por debajo de la rodilla. Vivían en manadas que vagaban preferentemente por llanuras, aunque la caza (su carne era muy apreciada, especialmente por los nobles) y la competencia con los animales domésticos por los pastos fueron empujándolos poco a poco hacia las zonas montañosas. A partir de finales del siglo XV o principios del XVI el zebro desaparece de las crónicas de caza, probablemente por haberse extinguido en esa época, aunque hay descripciones aisladas en escritos posteriores.

Identidad

La identidad del zebro ha sido muy discutida durante bastante tiempo. En un primer momento se pensó en que se trataba de simples asnos escapados y asilvestrados, tal vez de la subespecie norteafricana Equus asinus atlanticus introducida poco antes de la conquista romana, pero hay demasiadas cosas que no encajan con esta posibilidad, especialmente su proverbial comportamiento arisco y huidizo, la gran alzada y el hecho de que relinchasen como caballos. La posibilidad de que se tratase de una especie diferente, y por tanto endémica de la Península, se tornó cada vez más fuerte, y en los años 80 y 90 se descubrieron restos subfósiles de época histórica, tanto anteriores como posteriores a la introducción del asno doméstico en la Península Ibérica por los fenicios en el siglo VIII a. C.

Historia

Equus hydruntinus es una especie de équido extinta, similar a un asno de gran porte, que fue descrita inicialmente en yacimientos pleistocénicos de todo el continente europeo, y que parecía haberse extinguido por completo al final de la última glaciación (c.8000 a. C.). Pero por lo que se ve, sobrevivió durante mucho más tiempo aislada en la Península Ibérica. Actualmente se da por seguro que esta especie fue la que recibió más tarde el nombre de zebro, pues además de eso se han encontrado pinturas rupestres que muestran orejas largas y rayas con la misma disposición en el cuerpo que describen los escritos medievales y que no se corresponden con el asno ni con las dos especies de equinos que poblaron Europa en época prehistórica o histórica, el tarpán (Equus ferus) y el onagro (Equus hemionus). Al parecer, los íberos intentaron domesticar al zebro en varias ocasiones pero siempre fracasaron (¿el proverbial mal genio de nuevo, tal vez?), por lo que recibieron de buen grado los burros traídos por los comerciantes de oriente.

Curiosidades

  • El último lugar donde fue abundante, el sureste de la Península, conserva varios topónimos relacionados con este animal, como Valdencebro (Teruel), Cebreros (Ávila), Encebras (Alicante), o Las Encebras (Murcia) en España y Ribeira de Zebro, en el concelho de Moura, en Portugal.
  • Cuando los portugueses comenzaron a explorar el litoral africano y llegaron al Cabo de Buena Esperanza, a finales del siglo XV, encontraron unos equinos rayados que les resultaron notablemente parecidos por la forma y el tamaño a las hembras de los zebros, y por ello decidieron llamarlas "zebras". "Cebra" es el nombre que reciben hoy en día estos animales en casi todos los idiomas del mundo.