Centaurea cyanus

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Aciano

Centaurea cyanus en Otto Wilhelm Thomé, Flora von Deutschland, Österreich und der Schweiz, 1885
Taxonomía
Reino: Plantae
División: Magnoliophyta
Clase: Magnoliopsida
Subclase: Asteridae
Orden: Asterales
Familia: Asteraceae
Subfamilia: Carduoideae
Tribu: Cynareae
Subtribu: Centaureinae
Género: Centaurea
Subgénero: Cyanus
Especie: Centaurea cyanus
L., 1753
Aspecto general de tallos en flor
Hojas
Detalle del involucro
Capítulo con flósculos periféricos azules en floración
Capítulo con flósculos periféricos blancos en floración
Cipselas sueltas
Aciano en su hábitat más natural, los campos de cereales
Capullo floral

Centaurea cyanus, llamado popularmente aciano, azulejo o pincel, es una planta herbácea anual de la familia de las asteráceas. Clasificado en el género Centaurea section Cyanus (DC. in Ann. Mus. Nat. Hist. Nat. Par., 16: 158,1810) - o subgénero Cyanus (Hayek in Denkschr. Kaiserl. Akad. Wiss. Wien, Math.-Naturwiss. Kl., 72: 587, 1901), recientes publicaciones, cada vez más numerosas y aceptadas,[1][2][3][4]​ elevan este último al rango de género y consideran Centaurea cyanus un sinónimo de Cyanus segetum que lo reemplaza.

Descripción[editar]

Es una planta herbácea anual, rara vez bienal, de raíz axial, que llega a medir un metro de altura. Tiene tallos recios y ramificados en la parte superior, no alados, algo angulares y cubiertos de vellosidad lanuginosa. Las hojas, también algodonosas, las basales más o menos arosatadas, con o sin lóbulos agudos, son lineares y con nerviación longitudinal y están dispuestas de forma alterna en el tallo. El involucro es acampanado, de 12–16 mm; sus brácteas en 4- filas son verdes-parduzcas, oblongas las internas - a menudo teñidas de púrpura - y ovaladas las exteriores; estas últimas tomentosas, con apéndices laterales blancos a negros, membranáceos, y fleco apical escarioso decurrente con dientecitos triangulares. Los flósculos perífericos, estériles, son de color azul más o menos intenso - o blancos - y prácticamente 2 veces más grandes (20-25 mm) y vistosos que los interiores (10-15 mm), de un azul-violáceo más profundo, y tubos de los dos tipos de color blanco. Los unos como los otros son muy poco numerosos. Receptáculo plano o convexo, con escamas lineares, blanquecinas. El fruto es un aquenio de 5 mm, algo velludo, de color paja o azulado o con estos dos colores, que lleva eleosoma y con un vilano de numerosas cerdas rígidas y agudas de tamaños desiguales.[5][6]

Florece durante la primavera y el verano (mayo-septiembre).

Hábitat y distribución[editar]

Hábitat

Esencialmente en los campos cultivados de cereales - y de allí el epíteto específico Latín segetum (de sĕgĕs, sĕgetis, los «campos de cereales») de algunas de sus sinonimias, en particular Cyanus segetum que es un sinónimo que reemplaza a Centaurea cyanus - pero también escapada y adaptada a los herbazales, los bosques, los bordes de caminos y carreteras y otras zonas alteradas

También ampliamente cultivada como ornamental.[5]

Distribución

Propagado y naturalizado en numerosos países de todos los continentes, probablemente excepto África, a través de sus semillas mezcladas con los granos de cereales introducidos a lo largo de la historia, desde Europa Mediterránea de donde es natural según unas publicaciones,[1]​ o de Europa central según otros autores[7][6]​ - lo que no deja de ser, por lo menos, sorprendente.

En España está presente esencialmente en la mitad norte de la península y, muy puntualmente, en su mitad meridional y las Islas Baleares.[4]

Propiedades[editar]

Composición química

La composición química básica de Centaurea cyanus es la siguiente:

Los flavonoides son los pigmentos responsables de la coloración de las flores, los frutos y las hojas y eso les hace tener gran importancia como marcadores quimiotaxonómicos. Son considerados vasoprotectores, es decir, disminuyen la permeabilidad de los capilares y aumentan su resistencia. Poseen actividades demostradas como captadores de radicales libres, inhibidores enzimáticos, antiinflamatorios, antialérgicos, hepatoprotectores, antiespasmódicos, diuréticos, hipocolesterolemiantes, antibacterianos, antivirales y anticancerígenos in vitro, e incluso se han descrito como ansiolíticos sin causar los efectos sedativos y miorrelajantes de las benzodiazepinas.

Las antocianinas se encuentran en las vacuolas de las células epidérmicas en todo tipo de órganos, pétalos, frutos, brácteas, hojas, pecíolos, bulbos y raíces, donde el color depende del pH de la disolución.

Los antocianósidos aumentan la resistencia de los capilares y disminuyen la permeabilidad. Tienen propiedades vasoprotectoras, antiedematosas, antioxidantes y favorecen la regeneración de la púrpura retiniana.

Acciones farmacológicas

Centaurea cyanus siempre se ha utilizado popularmente como antibacterial, fungicida, pectoral, estimulante, tónico, aperitivo y eupéptico, diurético, colerético-colagogo, antiséptico, antipirético, antiinflamatorio y astringente suave. Actualmente suele utilizarse como un corrector organoléptico (agente colorante) y marcador de tisanas. El principio amargo actúa como aperitivo y eupéptico, los flavonoides y las sales potásicas tienen propiedades diuréticas. Los pigmentos antociánicos confieren una acción vitamínica P ya que mejora la microcirculación, aumenta la resistencia y controla la permeabilidad capilar. También contribuye a la regeneración de la capa vascular de la retina en el ojo aumentando la agudeza visual.

Usos medicinales

El agua de aciano, obtenida por la decocción de sus flores, se utiliza por su notable efecto anti inflamatorio, aplicada sobre los ojos. Los lavados oculares con esta agua mejoran eficazmente los picores y la irritación de los ojos. También dan un aspecto fresco y estirado en los párpados cargados y sirve para fortalecer, aclarar y conservar la vista.[8]

Además estaría indicada, sospechosamente, para casi todos «los males», tales como la conjuntivitis - ya que el agua de aciano ayuda a eliminar las secreciones y a que desaparezca la congestión ocular - blefaritis, reumatismo, dispepsias hiposecretores, anorexia, gripe, resfriados, fragilidad capilar (canas), arteriopatías, flebitis, edemas por insuficiencia venosa, hemeralopía, hemorroides, varices, retinitis pigmentaria, miopía, bacterias, cáncer, cándida, dermatosis, diarrea, hidropesía, dismenorrea, eczema, fiebre, hongos, hepatitis, infecciones, inflamaciones, ictericia, leucorrea, mastitis, micosis, dolor, salmonella, seborrea, vaginitis, retención de agua y - en el mundo de la cosmética - para hacer lociones desmaquillantes o champús suaves.[9]

Toxicología

La planta no se considera tóxica.

Historia[editar]

Desde la antigüedad, la planta se ha extendido por todo el mundo mezclada con las semillas de cereales. Plinio el Viejo la describía como "una flor molesta para los segadores". Estos, intentaban evitarla con sus utensilios agrícolas. Sin embargo, es poca la información escrita que ha llegado de los autores clásicos, ya que no se consideraba que las grandes figuras farmacológicas de la antigüedad le prestaran atención. Quien verdaderamente encontró su utilidad medicinal fue Mattioli, un botánico del siglo XVI que afirmaba que las flores azules del aciano desinflaman los ojos rojizos. En este caso, la señal estaría en la contraposición del color azul (propio de los ojos sanos y azules) con el rojo encendido de los ojos inflamados.[8]

Ya en el siglo XX, el número de ejemplares de la especie disminuyó considerablemente, debido, entre otros, a estos motivos:

  • Mayor uso de herbicidas y fertilizantes.
  • Desarrollo de nuevos y diversos cultivos altamente competitivos.
  • Destrucción de refugios cerca del campo.
  • Desaparición de las rotaciones de los cultivos tradicionales.
  • Conversión de tierras de cultivo marginales a las de pasto.

Taxonomía[editar]

Centaurea cyanus fue descrita por Carlos Linneo y publicada en Species Plantarum, vol. 2, p. 911, 1753[1].[10]

Citología[editar]

Etimología[editar]

Centaurea: nombre genérico que procede del griego kentauros, hombres-caballos que conocían las propiedades de las plantas medicinales.

cyanus: epíteto latino que significa "de color azul".[12]

Sinonimia[editar]

Nombres comunes[editar]

Aciano, aciano menor, aldiça, aldiza, amor porteño (en Argentina[14]​), aziano, azulejo,[14]​ azulejos, azuleño, azulina, azulines, azulón, azulones, baleo cabezudo, botoncillo, bracera, bracero, cabezudo, cabezuela, ciano, clavel, clavel de San Juan, claveles, clavelina, clavelones, clavelones azules, coronilla, cyaneo, cyano silvestre de color torquesado, escobilla, escobilla ordinaria, escombra, flor celeste, flor celeste andaluza, flor celeste de sembrados, flor de cielo barbada, flor de cielo castellana, flor de cielo española, flor de cielo montañesa, granera, heno blanco, hojera, liebrecilla, lindita, linditas, ojeras, papaver espumoso, peranzules. Altoaragonés: anjelicos, azuletes, farolitos de la Virgen, farolitos de los campos. Aragonés: angelicos, azuletes, escobilla, farolitos de la Virgen.[15]

El aciano en la cultura popular[editar]

Flor del azulejo, preferida de Estanislao Zeballos y emblema de las Maestras del Normal 4. Ramo de Egresada y medallas de la Prof. María Elena Speroni
  • En Francia, su nombre Bleuet - el calificativo común de la especie en francés - se empleó como apodo de los soldados de la «Clase 1915» que fueron los primeros en llevar el nuevo uniforme de color azul horizonte, por su parecido con el color del aciano. Se conserva hoy día como símbolo de las «Asociaciones de antiguos combatientes» del país.[cita requerida]
  • Fue la flor favorita de John F. Kennedy y fue también usada por su hijo, John F. Kennedy Jr. en su boda en homenaje a su difunto padre[16]
  • Es la flor nacional de Estonia y Alemania.[cita requerida]
  • Era la flor preferida de Estanislao Zeballos, quien la llevaba siempre en la solapa. Emblema de las maestras recibidas en el Normal 4 de Buenos Aires, que lleva su nombre.

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. a b c Centaurea cyanus en Global Compositae Checklist
  2. Cyanus segetum en Global Compositae Checklist
  3. C. cyanus en Tela Botanica
  4. a b c >Sinónimos en Real Jardín Botánico
  5. a b c Centaurea cyanus en Flora of North America p.p.
  6. a b C. cyanus en Revisión taxonómica del complejo de Centaurea cyanus L. (Centaurea sect. cyanus, Asteraceae) en la Península Ibérica. Adolfo Francisco Muñoz y Juan Antonio Devesa. Acta Botanica Malacitana, 35, p. 23-55, Málaga, 2010 Revisión de Centaurea cyanus L. (Centaurea sect. cyanus)
  7. Cyanus segetum en The Euro+Med Plantbase
  8. a b Font Quer, Pío: Plantas medicinales - El Dioscórides renovado. Editorial Labor, Barcelona, 1980, p. 852-853
  9. «Centaurea cyanus». Plantas útiles: Linneo. Archivado desde el original el 18 de junio de 2012. Consultado el 1 de agosto de 2012. 
  10. «Centaurea cyanus». Tropicos.org. Missouri Botanical Garden. Consultado el 1 de agosto de 2012. 
  11. Chromosomenzahlen aus der Tribus Cardueae (Compositae). Hellwig, H. Frank (1994) Willdenowia 24: 219-248.
  12. En Epítetos Botánicos
  13. Centaurea cyanus en PlantList
  14. a b Ángel Marzocca. 1957. Manual de Malezas. Serie nº 12 de la Colección Agropecuaria del INTA. Imprenta y Casa Editora Coni. Buenos Aires, Argentina. Una edición más reciente aquí no consultada es: Ángel Marzocca. 1993. Manual de malezas. Buenos Aires Hemisferio Sur, Buenos Aires, Argentina. (citado en la contratapa de Ángel Marzocca. 1997. Vademécum de malezas medicinales de la Argentina.)
  15. Nombres en Real Jardín Botánico
  16. «People, October 07, 1996 Vol. 46. No. 15 (en Inglés)». Archivado desde el original el 25 de octubre de 2015. Consultado el 2 de enero de 2013. 

Bibliografía[editar]

  1. Bruneton, J. Farmacognosia: Fitoquímica i Plantas Medicinales. Ed. Acribia. Edició 2.ª, 2001.
  2. Pamplona Roger, Jorge D. Enciclopedia de las Plantas Medicinales. Ed. Safeliz. Edició 1.ª, 1998.
  3. Pius Font i Quer. Plantas medicinales. Discórides Renovado. Ed. Labor, S.A. Edició 10.ª, 1987.
  4. Pius Font i Quer. Diccionario de Botánica. Ed. Península. Barcelona, 2000.
  5. Vanaclocha, B.; Cañigueral, S. (2003). Fitoterapia: vademecum de prescripción. Ed. Masson, Edició 4.ª. Barcelona
  6. Molero, Julià. Botànica farmacèutica. Ensenyament de Farmàcia (pràctiques) Ed. Publicacions i edicions de la Universitat de Barcelona. Edició 2.ª, Barcelona, 2008.

Enlaces externos[editar]