Plaza de la Independencia (Quito)

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Plaza de la Independencia
Ubicación
País Bandera de Ecuador Ecuador
Coordenadas 0°13′11″S 78°30′45″O / -0.21972222222222, -78.5125
Características
Tipo Plaza y Atracción turística

Plaza de la Independencia, también conocida como Plaza Grande es una plaza histórica de la ciudad de Quito (Ecuador), ubicada en el corazón del casco antiguo de la ciudad. Se trata de la plaza mayor de la urbe y símbolo del poder ejecutivo de la nación. Su característica principal es el monumento dedicado a los próceres de la independencia del 10 de agosto de 1809, fecha recordada como el Primer Grito de Independencia Hispanoamericana. El entorno de la plaza se encuentra flanqueado por el Palacio de Carondelet, la Catedral Metropolitana, el Palacio arzobispal, el Palacio Municipal y el Hotel Plaza Grande.

Historia

A pesar de que la primera plaza de la ciudad colonial fue la que hoy en día es conocida como Plazoleta Benalcázar, esta siempre fue considerada como provisional mientras se levantaba un trazado adecuado para la novel villa española de Quito. Fue apenas en el siglo XVI, en el año 1612, cuando los poderes de la ciudad se trasladaron a los alrededores de la Plaza Grande, como decidieron llamarla por ser la de mayor tamaño en aquel entonces.

Creación

En este óleo de Rafael Salas se puede apreciar como lucía parte de la Plaza Grande a mediados del siglo XIX. Al fondo el Palacio Arzobispal.
Vista panorámica de la Plaza, desde el suroccidente.
Plaza de la Independencia en Centro histórico de Quito.
Plaza de la Independencia con el Palacio de Carondelet y la Catedral Metropolitana.
Portal de la Catedral Metropolitana, en la Plaza de la Independencia de Quito

Inicialmente se trataba solo de una explanada de tierra apisonada en la que se colocó una fuente de agua para aprovisionar del líquido vital a los vecinos. Al ser de mayor tamaño que la plaza provisional, y los terrenos del rededor estar todavía desocupados, algunas instituciones decidieron colocarse en sus flancos. Es así como la iglesia católica adquirió terrenos en los lados norte y sur, donde construiría el templo principal de la ciudad (Catedral Primada) y la sede de la arquidiócesis (Palacio Arzobispal).

Uno de los fundadores de la ciudad, el capitán Juan Días de Hidalgo, se reservó para si un terreno en la esquina de la plaza, junto al Palacio Arzobispal, en donde construyó su residencia (la única construcción privada que perdura hasta la actualidad) que más tarde sería llamada Palacio Hidalgo. Otras familias, también de fundadores de la villa, ocuparon el extremo occidental, pero después del terremoto de 1627, fueron derrocadas por los daños severos que se produjeron en las estructuras, y en su lugar se construyó el Palacio de la Real Audiencia, actualmente conocido como Palacio de Carondelet.

Finalmente, en el lado oriental se construyó el edificio del cabildo de la naciente ciudad, construcción que también fue derrumbada en la década de 1970 para construir el edificio conocido como Palacio Municipal; que si bien cumple las mismas funciones que la original, es una edificación de corte moderno.

Siglos XVI al XIX: la Plaza española

Durante varios siglos después de la fundación de Quito, la Plaza Grande no se trató de nada más que una gran explanada empedrada con una hermosa fuente de agua en el centro, alrededor de la cual se levantaba a veces una improvisada plaza de toros para celebrar algunas festividades que ofrecía el cabildo en nombre de la corona española. A diferencia de otras ciudades coloniales, no hay evidencia de que en la Plaza Grande se hayan ubicado construcciones de importancia de los indígenas. La Plaza servía también como mercado, y era conocida como Plaza de la Catedral.

Recién en el siglo XVIII se piensa en el lugar como una verdadera plaza mayor, al estilo de las ciudades europeas. El Gobierno español concibe la plaza paisajisticamente, para que sirviera como un jardín para el Palacio de Carondelet. El palacio remato sus escalinatas en la plaza y se prohibió el paso de carruajes por el extremo occidental de la plaza, que colindaba con Carondelet.

El Barón de Carondelet ordena la remodelación del Palacio Real, hacia 1802, colocando en la fachada una gran columnata que se convierte en el marco de la Plaza, al igual que la construcción del atrio de la Catedral y del templete neoclásico con el que embelleció la entrada a esa iglesia.

A inicios del siglo XIX se reforma nuevamente la plaza, se retiran las escalinatas del Palacio, que ahora terminaban en las calles laterales del mismo, y se habilitó nuevamente el paso por la entonces llamada Calle de las 7 Cruces (actual García Moreno).

Época moderna: el parque afrancesado

A fines del siglo XIX y hasta mediados del XX, la Plaza Grande -que durante la colonia fue una simple explanada- fue convertida en un jardín de estilo francés, con una verja que la rodeaba y varias portadas en los costados. Esta fue una iniciativa del presidente Gabriel García Moreno, pues hasta antes de su Gobierno se seguía usando la Plaza como un mercado. De esa época datan los árboles más antiguos de la Plaza, en especial, las palmeras que se aprecian frente al Palacio Arzobispal.

Después de continuas intervenciones por parte de las autoridades seccionales de la ciudad, el presidente ecuatoriano Eloy Alfaro ordena la construcción de un monumento para conmemorar el centenario del primer grito de independencia del país. La escultura fue encargada a Francisco Durini, que se basó en bocetos previos de Juan Bautista Minghetti y su padre Lorenzo Durini Vasalli. Fue terminada de colocar en el centro de la plaza donde antes se encontraba la fuente, que fue movida hacia el suroccidente. La fuente colonial fue trasladada luego a la plaza principal del pueblo de Sangolquí, en las afueras de la capital.

En un acto público celebrado en 1909, el presidente de la república y el alcalde de la ciudad develan el monumento al que bautizaron como Monumento a la Independencia y cambian el nombre colonial de la plaza por el de Plaza de la Independencia.

El modelo de convertir la vieja plaza de herencia española en un parque afrancesado con un cerramiento y portadas, obra también de Francisco Durini en 1910, fue emulado en otras plazas mayores ecuatorianas, como la de Ibarra (Parque Pedro Moncayo), Latacunga (parque Vicente León), Riobamba (Parque Pedro Vicente Maldonado), Ambato (Parque Juan Montalvo), Cuenca (Parque Abdón Calderón) y Guayaquil (Parque Seminario).

A mediados del siglo XX, la verja y sus portones fueron retirados, siendo libre el acceso a la Plaza Grande. Algunos de los portones se vendieron a particulares y se conservan en mansiones antiguas del centro norte de Quito.

Edificios

La Plaza se encuentra flanqueada en los cuatro costados por diferentes edificios, todos, con excepción del Municipio, fueron construidos originalmente en la época colonial. Igualmente todos, con excepción del Palacio Hidalgo, son de carácter público. Estos edificios son:

Además, en las esquinas exteriores del conjunto Plaza Grande, se encuentran cuatro edificios más:

Referencias

Enlaces externos