Discusión:HMS Hood (51)

Navío británico, buque insignia y orgullo de la marina británica, diseñado como una versión mejorada de la clase Queen Elizabeth, estaban proyectados tres unidades, solo el Hood se concluyó.

Botado en 1918, completado en 1920 y modernizado a lo largo de su existencia, con una eslora de 262,3 m, 32 m de manga, 46.680 ton de desplazamaiento max. (en 1920; aumentado a 48.360 ton max. en 1940), armado con 8 cañones de 381 mm, dos tubos lanzatorpedos de 52,5 cm en ambas bandas y varias piezas menores, fue clasificado como "Crucero de Batalla" y fue en su tiempo, el buque de combate más grande y veloz del mundo (velocidad max. registrada 32.07 nudos) gracias a los 144.000 HP de empuje en sus máquinas. Su nombre fue dado en honor al Almirante Sir Horace Lambert Alexander Hood fallecido en el hundimiento de su buque, el crucero de batalla HMS Invencible, la tarde del 31 de mayo de 1916 en la 2ª batalla naval más grande de la historia: Jutlandia. Paradójicamente el Hood tendría el mismo destino, bajo circunstancias similares, 21 años después.

Su tripulación en tiempo de guerra era de poco más de 1.400 hombres (1.418 al momento de ser hundido) y su principal debilidad era -como en todos los cruceros de batalla ingleses- su escaso blindaje horizontal (50-70 mm). Participó en varias travesías de representación visitando puertos de casi todo el orbe y ya iniciada la Segunda Guerra Mundial, participó, entre otras acciones, en el bloqueo y bombardeo del puerto de Mers-El Kebir (Noráfrica), hundiendo varios navíos de guerra de la Francia de Vichy ahí anclados (Bretagne, Dunkerke, Mogador, etc.) tras la firma del armisticio (junio 1940).

Su final se produjo al alba del 24 de mayo de 1941, al sudoeste del estrecho de Dinamarca, que separa Islandia de Groenlandia, al trabar combate con la división naval alemana al mando del almirante Gunther Lütjens y compuesta por el acorazado Bismarck (41.700 ton y 50.000 ton a plena carga) y el crucero pesado Prinz Eugen (13.900 ton), en su intento de impedir que el enemigo alcanzase las rutas de los comvoyes que abastecían las islas Británicas. Estando la escuadra inglesa al mando del vice-almirante Lancelot Holland, quien enarbolaba su insignia abordo del Hood y acompañado por el nuevo acorazado Prince of Wales (de la clase King George V; con 10 cañones de 356 mm y 35.000 ton), estos, debido al ángulo de aproximación, abrieron fuego con sus torres delanteras desde una distancia de 22 km, quedando las posteriores imposibilitadas de hacer fuego. Empeñando desde larga distancia el combate, Holland, conocedor de la deficiente protección horizontal del crucero, intentó rápidamente reducir distancias para evitar las tiros en caída vertical y oponer lo antes posible su blindaje lateral de 305 mm. Entre el inicio de la batalla (5:52am) y las 5:59am el Hood ya había recibido al menos dos impactos: uno del Prinz Eugen al pie del palo mayor que provocó el incendio de municiones antiaéreas y una granada pesada del Bismarck en la cofa de trinquete, que la atravesó sin estallar, matando a los vigias de esa estación (según testimonio del guardiamarina W. Dundas dado a la comisión investigadora del desastre. Dundas fue uno de los tres únicos sobrevivientes). A las 6:00 (distancia: 13,3 km), 7 min de comenzado el combate y cuando ya casi había completado el segundo viraje de 20º a babor y así poder disparar con las torres "X" e "Y" (traseras), una o dos granadas de la quinta salva del Bismarck le impactaron por el costado de estribor, entre y/o sobre el mastíl mayor y la torreta "X" de 381 mm, penetrando por debajo de la línea de flotación, prendiéndole fuego a los fardos de cordita de las torres traseras. Flamas delgadas, altas, de gran brillantez como la de sopletes de acetileno, emergieron a travéz de los ductos de ventilación de la sala de máquinas, más altas que su mastil mayor, y casi de inmediato estalló violentamente cubriendo el área con una inmensa nube de humo en forma de paragua, lanzando por los aires trozos y piezas del navío: la torre "X"; la grúa principal; el palo mayor, los botes despedazados, planchas de acero al rojo vivo. El oficial de artillería del Prinz Eugen Tnte. Jaspers vio por el telémetro principal como las municiones del Hood estallaban a gran altura, como fuegos de artificio. Partido en dos por la popa, dicha sección se hundió casi de inmediato y la parte delantera, de mayor longitud, lo hizo algo más lentamente. Como una tétrica despedida, los cañones principales de las torretas "A" y "B" de 381 mm se dispararon (al parecer de modo espontáneo) por última vez. La proa, levantada al cielo "como la torre de una catedral" se hundió, tres minutos después del estallido. Solo se salvaron tres tripulantes: el marinero R. Tilburn; el señalero Ted Briggs y el guardiamarina William Dundas. El HMS Invencible de Sir Horace Hood tuvo el mismo fin, 25 años atrás.

En los años 1990, sus restos desperdigados en el fondo oceánico fueron descubiertos a mas de 4 km de profundidad y se encontró que la popa desprendida en el combate estaba aún en buenas condiciones, la parte media delantera(alrededor de 100 m) yacen a mas de 800 m está en posición invertida, sin la proa, que yace al lado de la popa.

Deberíamos matizar que el HMS Hood, por desgracia para sus tripulantes, nunca fue objeto de una modernización en profundidad como fue el caso del HMS Queen Elizabeth y el crucero de batalla HMS Renown. La única reforma relevante fue la sustitución de la artillería secundaria y algunos cambios menores. Nunca se modificó su planta motriz original, consistente en 24 calderas de estilo antiguo (por ejemplo, en el Renown se sustituyeron las 16 calderas originales por 8 del tipo Admiralty, más ligeras a la par que más potentes. Del mismo modo, tampoco se modificó en modo alguno la protección. Hay que reseñar que la Royal Navy estuvo muy preocupada por modernizar el buque, que en 1939 estaba recargado y, a falta de un recorrido general de máquinas, era incapaz de alcanzar la velocidad original de proyecto. De hecho, el estallido de la guerra, y el hecho de que sólo el Hood, el Repulse y el Renown tenian la velocidad suficiente para enfrentarse a los acorazados alemanes del tipo Scharnhorst, o cazar los acorazados de bolsillo clase Deutschland, impidió que el Hood fuese objeto de una modernización que ya estaba proyectada y presupuestada.