Discusión:Christopher Dresser

como Morris, Dresser abandonó cierto socialismo del diseño que, creían, debía ser un valor agregado accesible para la vida de las mayorías y no para unos pocos. Pero una diferencia los puso a uno y otro lado de la historia. Mientras proclamaba el regreso a la artesanía de los oficios para resistir la producción desalmada de la Revolución Industrial, Dresser abrazó a ésta en cuerpo y alma. Como una bocanada fresca en medio de la recargada pretensión , el diseño de Dresser y sus teorías estéticas anclaron en el entendimiento de la ciencia y en la creencia de una producción industrial que imponía nuevos métodos de composición. Además de lo prolífico de su carrera, también impacta la meticulosidad de sus patrones. Frondoso y ecléctico, su vocabulario abstracto abrevó en la iconografía persa, egipcia, precolombina, asiria y, sobre todo japonesa, además de nutrirse de su conocimiento de la morfología botánica. Acérrimo defensor de la ornamentación (un arte por encima de la pintura dado su origen enteramente mental), sostenía que el diseño debe tener la lógica y la simetría de las formas naturales, sin imitarlas. En 1870 fue el primer europeo invitado por Japón a conocer sobre las artes decorativas de ese país, donde recibió el Emperador. Dresser fue de los primeros diseñadors que entendió profundamente la producción masiva, comprometiéndose en el proceso de producción para que el diseño no se viera afectado. Sus diseños influenciados por la experimentación con patrones, imágenes simétricas y formas geométricas hicieron que ya en su época lo señalaron como el más grande de los diseadores comerciales que impuso su fantasía sobre lo común de la industria británica. Preocupaciones de producción, forma, materiales y eclectisismo las de Dresser, que pueden conjugarse hoy como hace tanto.