Anexo:Población indígena de América

De Wikipedia, la enciclopedia libre

El siguiente artículo presenta diversas estimaciones respecto de la población de los pueblos amerindios en tiempos presentes o de pasado próximo.

Categorización[editar]

La principal diferencia de cálculo entre las cifras de los estados y de organizaciones indígenas es que los gobiernos no incluyen en sus cifras a indígenas que hayan migrado a las ciudades en busca de mejores oportunidades, los censos oficiales de muchos países tienden a reducir el tamaño de sus poblaciones indígenas apoyando la tesis de "ladinización" de la población indígena, reduciéndola cada vez más.[1][2]​ Una vez en la ciudad el indígena sufre un proceso de negación de su cultura ante la discriminación que sufre llegando incluso a cambiar sus nombres y apellidos, tras esto el anterior indígena se convierte en un mestizo para un censo oficial.[3]​ En los países con mayor población urbana esto es muy común, sobre todo en barrios marginales.

También existe un gran rechazo o negación del ancestro indígena en los grupos mestizos, muchos de ellos clasificándose a sí mismos como descendientes de europeos o blancos, promoviendo la inmigración europea.[4][5][6][7]

Estudios históricos[editar]

Población americana (años 1-1820) en miles de habitantes
(población latinoamericana)
Autor Año 1 Año 1000 Año 1500 Año 1600 Año 1700 Año 1820
Clark[8] 3000
(2900)
13 000
(12 000)
41 000
(40 000)
(14 000) 13 000
(12 000)
McEvedy & Jones[9] 4500
(4200)
9000
(8500)
14 000
(13 200)
12 250
(10 500)
13 000
(12 150)
33 066
(22 269)
Biraben[10] 12 000
(10 000)
18 000
(16 000)
42 000
(39 000)
(10 000) 12 000
(10 000)
(23 980)
Maddison[11] 6320
(5600)
12 860
(11 400)
19 750
(17 500)
(8600) 13 250
(12 050)
(21 220)

El porcentaje de la población indígena en Iberoamérica es de 10 % en 1940, 9 % en 1950, 7 % en 1960, 8 % en 1962, 8 % en 1978 y 10 % en 1990 siendo la permanencia actual el resultado de la mayor organización indígena, el fin de la inmigración masiva y las políticas menos agresivas contra minorías étnicas de parte de los estados.[12]​ Fuerte caída de todas maneras ya que a finales del siglo XVIII eran el 63 % y en 1825 el 36 % de la población total.

El siglo XVI fue una verdadera catástrofe demográfica para los pueblos indígenas del continente, principalmente por las nuevas pestes a las que no tenían resistencia, pero a partir de 1630 en México central y de 1700 en los Andes peruanos empezaron a recuperarse, coincidiendo con un periodo de fuerte aumento demográfico, especialmente para los mestizos y en menor grado para los indios, como fue la última centuria colonial.[13]

Según Alexander von Humboldt la población de Hispanoamérica se distribuía en un 45 % de indios, un 32 % de castas (mestizaje de diverso tipo), un 19 % blancos y un 4 % de negros a finales del siglo XVIII. Debe tenerse en cuenta que Francisco de Miranda, sobre la base de registros de la Secretaría del Consejo de Indias, estimó en 1798 que había 16 785 000 hispanoamericanos.[14]​ El final de la dominación española, con el subsecuente cese de la inmigración de españoles, llevó a muchos a temer por la «indianización progresiva y general» de países como México, Guatemala, Perú, Ecuador y Bolivia, donde los indígenas constituían la vasta mayoría de la población. En respuesta, sus gobiernos desarrollaron agresivos programas de educación para hispanizar a la población, algo particularmente exitoso en el caso mexicano, donde en apenas un siglo la mayoría de la población pasó a autoconsiderarse como mestizos.[15]​ Este proceso de pérdida de identidad del indígena se vio facilitado por el éxodo rural que eliminó la barrera entre el campo (indígenas) y ciudad (mestizos).[16]

Según Rosenblat la población de indígenas y negros cayó, en América Latina, entre 1850 y 1950 de manera porcentual a pesar de su aumento en cifras concretas; pasando de 8 a 14 millones y de 4 a 14 millones entre 1825 y 1950 respectivamente (del 36 % al 9 % y del 18 % al 9 %). Los grupos iberoamericanos no europeos disminuyeron frente a los con ascendencia occidental (los blancos aumentaron del 19 % al 44 % en el mismo período).[17]​ La población nativa cayó en México, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Chile, Brasil, Costa Rica, Paraguay, Argentina y Uruguay, cayendo la de negros y mulatos en los últimos cuatro.[18]​ De esta manera nacieron dos clases de países que antes no existían en el siglo XIX, "países criollos" y "países mestizos". Todo esto producto de una fuerte occidentalización vivida en ese período (reprimiendo a los grupos de ascendencia amerindia y africana),[19]​ la construcción de las nacionalidades de los nuevos estados latinoamericanos fue un proceso de homogeneizador que buscó eliminar las diferencias regionales y étnicas dentro de los mismos estados[20]​ Se dará paso en varios casos a la búsqueda de la desaparición física o cultural del indio[21]​ y el fomento de la inmigración europea, principalmente españoles, italianos y portugueses y en menor medida judíos, alemanes, franceses e ingleses, como parte del proceso de blanqueamiento y occidentalización fomentada por las clases dirigentes deseosas de modernizar los nuevos países.[22]​ Los principales países receptores fueron Brasil, Argentina, Uruguay, Cuba, Puerto Rico y, en menor medida, Chile, México, Costa Rica y Venezuela.

Durante el siglo posterior a la independencia las comunidades aborígenes vivirán bajo la siguiente regla: «la proletarización del indio pacífico y el exterminio del indio bravo».[23]​ Tal será su impacto que para mediados del siglo XX casi ninguna comunidad conservará el modo de vida de sus antepasados intacto.[24]​ Así, el destino de las comunidades indígenas decimonónicas se dividió según vivieran en las zonas periféricas, es decir, no sometidas a los blancos, y las nucleares, o pacificadas desde hacia generaciones. Las primeras, pobladas por cazadores-recolectores nómadas, serán expulsadas a zonas cada vez remotas y pobres, se diluirán por el mestizaje o se extinguirán por el exterminio agresivo de los colonos o el azote de las enfermedades.[25]​ Los colonos no dudaban en exterminar a los indios que robaban sus ganados, por ejemplo, en la Patagonia o Chihuahua, organizándose verdaderas cacerías humanas. Del mismo modo, las sublevaciones indígenas ocurridas en México, Perú, Ecuador y Bolivia eran aplastadas sanguinariamente por los gobiernos sin mayores cuestionamientos.[26]​ Así, a inicios del siglo XX, las comunidades aborígenes habían sido expulsadas prácticamente de todas las costas y la mayoría de las regiones más aptas para la agricultura en todo el continente. En el primer caso, donde nunca fueron excesivamente numerosos, fueron reemplazados progresivamente con la importación de esclavos negros.[27]​ Así por ejemplo, el litoral rioplatense, según Humboldt, estaba poblado principalmente por blancos. La sierra interior, en cambio, por indios en amplia mayoría.[28]

Las segundas, con mayores densidades de población, alcanzaron antes de la conquista formas superiores de organización política y económica, permitiendo a los blancos superponerse como la minoría gobernante manteniendo las antiguas instituciones, autoridades y formas de producción tradicionales. Estas si crecieron, e incluso expandieron sus lenguas a otras zonas (como el quechua andino a la Amazonia peruano-ecuatoriana).[29]​ En 1950 la mayoría de la población indígena continental se concentraba en zonas rurales de México, Guatemala, Ecuador, Perú y Bolivia, donde llegaban a ser una abrumadora mayoría.[30]

Sin embargo, esto no impedirá que porcentualmente su población disminuya mientras crecen los mestizos,[31]​ sobre todo por la pérdida de las tierras de sus comunidades (ayllu peruano, resguardo colombiano o calpulli mexicano) a manos de terratenientes en el período posterior a la Independencia como parte de la política de las nuevas repúblicas de integrarlos forzosamente al sistema económico liberal.[32]​ Así mismo, muchas repúblicas de indios fueron disueltas tras siglos de existencia.[33]​ Esta pérdida de identidad venía acompañada de la proletarización del indio, tanto como campesino como obreros al tener que migrar a la ciudad.[34]​ Los indígenas constituyeron la mano de obra barata más abundante disponible en muchos territorios hasta la llegada masiva de inmigrantes europeos.[35]​ Un modo muy frecuente en que el indio se convierte en mestizo es que al migrar a las ciudades por razones económicas pierde su lengua y no transmite su cultura a sus descendientes en ese ambiente (por el contrario, en muchos territorios, los mestizos que saben y hablan lenguas indígenas son contabilizados como indios).[36]​ Otra forma de pérdida de identidad fue el envío de niños indígenas por sus padres a familias blancas en las ciudades bajo la única condición de mantenerlos.[26]​ En parte, este era el efecto deseado por los gobiernos, que promovían esa pérdida de identidad como la llegada de europeos para modernizar sus países según los parámetros de la época; «dilución rápida del indio en el mestizo y, posteriormente, del mestizo en el blanco», permitiendo la «europeización» del continente y el acorralamiento del indio a mesetas o selvas remotas,[37]​ como en Estados Unidos, donde se los confinó en reservas.[38]​ De hecho, el geógrafo alemán Karl Sapper a inicios del siglo XX estimaba que la población indígena desaparecería definitivamente en dos o tres siglos.[37]​ Sólo a mediados del siglo aparecerían con fuerza instituciones estatales destinadas a proteger a los indígenas y sus culturas, algo que durante la centuria anterior estuvo a cargo de particulares exclusivamente.[39]

Como nota aparte, la sobrevivencia de la herencia cultural indígena se dio sobre todo en Guatemala, Ecuador, Perú y Bolivia mientras que por su parte, la herencia africana sobrevivió con mayor fuerza en Brasil, Cuba y Puerto Rico.[40]​ Por último, en Venezuela, Colombia y Panamá se dio el caso de que las tres raíces culturales, amerindias, africanas y europeas se mantuvieron igual de fuertes.

Poblaciones totales e indígenas (1492-1825)
Autor Territorio Año Total Indígenas
Rosenblat[41] América 1492 13 385 000 13 385 000
Rosenblat[42] Latinoamérica 1570 10 103 000 9 707 000
Rosenblat[42] Latinoamérica 1620 10 695 000 9 095 000
Rosenblat[43] Hispanoamérica 1650 11 309 000 9 105 000
Fisher[44] Hispanoamérica 1700 10 300 000 9 000 000
Maddison[45] EE. UU. 1700 1 000 000 750 000
Fisher/Humboldt[44][46][47] Hispanoamérica 1800 16 910 000 7 530 000
Maddison[48] América 1820 32 496 000 8 470 000
Rosenblat[49] Latinoamérica 1820 21 220 000 7 160 000
Maddison[45] EE. UU. 1820 9 981 000 325 000
Canga[50] América 1823 34 942 000 8 610 000
Rosenblat[43][51] Hispanoamérica 1825 22 772 000 8 219 000

Actualmente, según un estudio de 2014, gracias a la mayor autoidentificación de la población con sus raíces antes ocultadas, el número de personas que se identifican con las etnias indígenas ha aumentado hasta el 8,3 % para toda América Latina. Un crecimiento porcentual de un 49,3 % en una década, alcanzando las 45 millones de personas.[52]​ Prácticamente todos los estudios bordean los 40 a 50 millones,[53]​ alrededor del 10 % de la población,[54]​ agrupados en más de 400 grupos que van desde nómadas amazónicos, comunidades campesinas andinas y trabajadores urbanos,[53]​ la mayoría bastante pobres[54]​ y nueve décimas partes concentrados en América Central y la región andina.[54]

Estimaciones[editar]

Estimación de Rosenblat[editar]

Estimación de Ángel Rosenblat, conocido por sus estudios de demografía histórica. Los datos son sus estimaciones respecto de la población indígena entre 1492 y 1825.

Población de América
(cálculos de Rosenblat para 1492,[55]​ 1570,[56]​ 1650[57]​ y 1825[58]​)
Territorio 1492 1570 Indígenas 1650 Indígenas 1825 Indígenas
Groelandia (A) 6000 6000
Alaska (A) 17 835 17 000
Canadá (A) 680 000 (A)
Estados Unidos 1 000 000 1 004 500 1 000 000 1 002 000 860 000 10 765 000 400 000
Angloamérica 1 000 000 1 004 500 1 000 000 1 002 000 860 000 11 468 835 423 000
México 4 500 000 3 550 000 3 500 000 3 800 000 3 400 000 6 800 000 3 700 000
Antillas 300 000 65 650 22 150 614 000 10 000 2 843 000 (D)
Centroamérica 800 000 575 000 550 000 650 000 540 000 1 600 000 880 000
Venezuela 350 000 307 000 300 000 370 000 280 000 800 000 120 000
Colombia 850 000 825 000 800 000 750 000 600 000 1 327 000 700 000
Ecuador 500 000 416 500 400 000 580 000 450 000 550 000 (E)
Guayana Francesa (H) (H) (H) (H ) (H) 17 315 701
Guayana Británica
Guayana Neerlandesa
100 000 100 000 100 000 100 000 70 000 239 386 20 000
Perú 2 000 000 1 585 000 1 500 000 1 600 000 1 400 000 1 400 000 1 130 000
Chile 600 000 620 000 600 000 550 000 520 000 1 100 000 (F)
Argentina 300 000 306 000 300 000 340 000 250 000 630 000 200 000
Bolivia 800 000 737 000 700 000 850 000 750 000 1 716 000 1 000 000
Paraguay 280 000 258 000 250 000 250 000 200 000 (G) 100 000
Uruguay 5000 5000 5000 5000 5000 40 000 600
Brasil 1 000 000 850 000 800 000 950 000 700 000 4 000 000 360 000
Latinoamérica 12 385 000 10 200 150 9 827 150 11 409 000 9 175 000 23 062 701 8 211 301
América 13 385 000 (I) 11 204 650 10 827 150 12 411 000 10 035 000 34 531 536 8 634 301
  • A. Incluidos en Estados Unidos.
  • B. En indígenas y negros.
  • C. Incluidos en mestizos.
  • D. Indígenas de las Antillas.
  • E. Incluidos en Colombia.
  • F. Incluidos en Perú.
  • G. Incluidos en Bolivia.
  • H. Incluidos en Guayana Francesa.
  • I. En 1492 todos son indígenas.

Estimación de Ángel Rosenblat, conocido por sus estudios de demografía histórica. Los datos son sus cálculos sobre la posible población indígena en 1940 y 1950.[59]

País Total (1940) Indígenas Porcentaje Total (1950) Indígena Porcentaje
Groelandia 18 000 17 557 97,54 24 000 23 280 97,0
Alaska 72 524 32 458 44,75 128 643 33 900 29,0
Canadá 11 682 000 128 000 1,12 13 800 000 130 000 0,94
EE. UU. continental 131 669 275 361 816 0,27 350 697 361 425 000 0,28
México 19 653 552 4 422 049 22,55 25 781 173 5 156 234 20,0
Antillas 13 700 000 800 0,005 16 200 000 800 0,0049
Guatemala 2 380 000 1 309 000 55,0 2 788 122 1 533 467 55,0
Honduras Británica 55 000 13 134 23,88 61 000 14 566 23,88
Honduras 1 107 859 100 000 9,02 1 505 465 90 000 5,97
El Salvador 1 744 535 348 907 20,0 1 855 917 371 183 20,0
Nicaragua 900 000 39 400 4,37 1 057 023 40 000 3,78
Costa Rica 656 129 3500 0,53 800 875 2692 0,33
Panamá 622 576 55 987 8,98 805 285 47 615 5,91
Zona del Canal 51 827 Extinguidos 0,0 52 822 Extinguidos 0,0
Colombia 9 000 000 144 000 1,6 11 260 000 150 000 1,33
Venezuela 3 710 000 100 000 2,69 5 091 543 98 823 1,94
Guayana Británica 350 680 16 083 4,58 392 782 16 480 4,19
Guayana Neerlandesa 179 000 3700 2,06 216 124 4000 1,85
Guayana Francesa 28 000 1800 6,42 29 000 2000 6,2
Ecuador 2 600 000 1 040 000 40,0 3 202 757 1 281 102 40,0
Perú 7 023 111 3 247 196 46,13 8 490 000 3 396 000 40,0
Bolivia 2 900 000 1 595 000 55,0 3 019 031 1 660 467 55,0
Brasil 41 236 315 200 000 0,4 52 645 479 200 000 0,37
Paraguay 1 150 000 40 000 3,47 1 405 627 39 213 2,78
Uruguay 2 145 545 Extinguidos 0,0 2 400 000 Extinguidos 0,0
Chile 5 023 539 130 000 2,58 5 800 000 130 000 2,24
Argentina 14 000 000 100 000 0,71 16 900 000 100 000 0,61
América 273 659 467 13 450 387 4,95 326 410 029 14 946 822 4,58

Estimación del Roldán[editar]

Estimaciones del indigenista colombiano Roque Roldán Ortega inicialmente publicadas en 2003.[60]​ Las estimaciones del autor provienen sobre todo de los porcentajes de la OIT.

País Población total Población indígena Porcentaje
México 100 350 000 14 049 000 14
Perú 27 013 000 12 696 110 47
Guatemala 12 640 000 8 342 400 66
Bolivia 8 329 000 5 913 590 71
Ecuador 12 920 000 5 555 600 43
Estados Unidos (A) 247 300 000 1 900 000 0,77
Colombia 39 685 655 793 713 8
Honduras 6 250 000 937 500 15
Chile 15 211 000 1 216 880 8
Canadá (A) 26 300 000 580 000 2,21
Venezuela 23 542 649 470 852 2
El Salvador 6 122 515 428 576 7
Argentina 36 955 182 369 551 1
Brasil 166 113 000 332 226 0,2
Nicaragua 4 812 569 240 628 5
República Dominicana 8 442 533 168 850 2
Panamá 2 808 268 168 496 6
Paraguay 5 585 828 167 574 3
Puerto Rico 3 600 000 72 000 2
Guyana 697 286 56 294 8,07
Jamaica 2 652 689 53 053 2
Belice 250 000 47 500 19
Costa Rica 3 644 000 36 440 1
Surinam 431 303 25 878 6
Trinidad y Tobago 1 292 000 25 840 2
Guayana Francesa 100 000 4000 4
Guadalupe 280 000 3000 1,07
Bahamas 294 982 2949 1
Barbados 274 540 2745 1
Martinica 73 000 730 1
Uruguay 3 278 000 524 0,016
América (B) 770 539 059 54 654 142 7,09
  • A. Para estos países se usó como referencia el Instituto Indigenista Interamericano (I.I.I.) y su banco de datos de 1994. América Indígena Vol. LV, No. 3, julio-septiembre de 1995, pp. 51; Los Pueblos en el País y en América. Dirección General de Asuntos Indígenas, Colombia, 1998, pp. 151.
  • B. No se incluyen los datos del censo de 1991 de Dominica que cifra en 1634 sus aborígenes caribes, sobre un total de 71 183 habitantes, un 2,29 % de la población. Diez años después eran 2017 caribes, un 2,83 % de los 71 242 residentes.

Estimación de Quinteros[editar]

Marco Quinteros V. (2006). La Población indígena de Ecuador. Quito: Instituto Nacional de Censos y Estadísticas de Ecuador, pp. 15. Basado en datos de la ONU (1990) publicados en Asegurar los derechos de los niños indígenas del Centro de Investigaciones Innocenti de UNICEF. Se refiere solo a América Latina.

País Población indígena Porcentaje
Argentina 372 996 1,1
Belice 27 300 13,7
Bolivia 4 142 187 71
Brasil 254 453 2
Colombia 620 052 1,7
Costa Rica 24 300 0,8
Chile 989 745 7,1
Ecuador 2 634 494 24,9
El Salvador 88 000 1,7
Guyana Francesa 4100 3,9
Guatemala 4 945 511 48
Guyana 45 500 5,7
Honduras 630 000 11,9
México 8 701 688 9,5
Nicaragua 326 600 7,6
Panamá 194 719 7,8
Paraguay 94 456 2
Perú 8 793 295 38,4
Surinam 14 600 3,3
Venezuela 315 815 1,5
Latinoamérica 33 219 811 s/i

Estimación de Peyser & Chakiel[editar]

Estimaciones de los estudiosos Alexia Peyser y Juan Chackiel para los año 1990. El documento fue inicialmente presentado en el Seminario Taller sobre Investigación Sociodemográfica Contemporánea de Pueblos Indígenas, celebrado del 18 al 22 de octubre de 1993, en Santa Cruz de la Sierra.[61]

País Censo o
estimación
Año Población indígena Porcentaje
Bolivia Censo 1992 3 058 208 (A) 59
Bolivia Estim. 1992 5 600 000 81,2
Brasil Estim. 1992 1 500 000 1
Colombia Censo 1993 744 048 2,2
Chile Censo 1992 998 385 (B) 10,3
Ecuador Estim. 1992 3 800 000 35,3
Guatemala Censo 1994 3 476 684 42,8
Guatemala Estim. 1992 4 600 000 49,9
Honduras Censo 1988 48 789 (C) 1,3
México Censo 1990 5 282 347 (C) 7,4
México Estim. 1992 10 900 000 12,6
Panamá Censo 1990 194 269 8,3
Paraguay Censo 1992 29 482 0,7
Perú Estim. 1992 9 000 000 40,2
Venezuela Censo 1992 314 772 (D) 0,9
  • A. Población de 6 años y más.
  • B. Población de 14 años y más. Si se incluyen los menores de esa edad la cifra aumenta a 1 281 651.[62]
  • C. Población de 5 años y más.
  • D. Censo indígena.

Estimación de Lizcano[editar]

Los datos se refieren a finales del siglo XX, estimados por el mexicano Francisco Lizcano Fernández.[63]

País Población indígena Porcentaje
Bolivia 4 581 000 55
Guatemala 6 034 000 53
Perú 11 676 000 45,5
Ecuador 4 932 000 39
México 13 842 000 14
Chile 1 217 000 8
El Salvador 502 000 8
Panamá 228 000 8
Honduras 494 000 7,7
Nicaragua 350 000 6,9
Venezuela 653 000 2,7
Colombia 758 000 1,8
Paraguay 83 000 1,5
Argentina 370 000 1,0
Costa Rica 32 000 0,8
Brasil 682 000 0,4
Iberoamérica 46 434 000 9,2

Censos oficiales[editar]

País Año Población total Población indígena Porcentaje
Argentina 2004-05 (A1)[64] 36 260 130 600 329 1,66 %
2010 (A2)[65] 40 091 359 955 032 2,38 %
Belice 2000[66] 240 204 38 562 16,61 %
2010[67] 312 698 30 107 9,62 %
Bolivia 2001[68] 8 090 732 5 358 107 66,2 %
2012 (N)[69] 10 389 903 2 806 592 40,57 %
Brasil 2000 169 872 856 734 127 0,4 %
2010 190 755 799 896 917 0,47 %
Canadá 2006 (G) 32 623 490 1 172 790 3,59 %
Colombia 2005 (J)[70] 42 888 594 1 378 884 3,4 %
Costa Rica 2000 3 810 179 65 548 1,7 %
2011 4 301 712 104 143 2,4 %
Chile 2002 (L)[71] 15 116 435 692 192 5,6 %
2012 (M)[72] 16 572 475 1 714 677 11,11 %
Dominica 2001 71 242 2017 2,83 %
Ecuador 2001[73] 12 156 608 830 418 6,8 %
2010[74] 14 483 499 1 018 176 7,3 %
El Salvador 2007 5 744 113 13 310 0,23 %
Estados Unidos 2000 (H) 281 421 906 2 475 956 0,87 %
2010 (I) 308 745 538 2 932 248 0,94 %
Guatemala 2002 11 237 196 4 433 218 39,5 %
Honduras 2001 6 076 885 440 313 7,2 %
México 2000 (D) 97 014 867 7 618 990 7,8 %
2002 (B) - 10 220 862 -
2005 (C) - 9 533 126 -
2010 112 322 757 16 102 646 10,9 %
Nicaragua 2005 (F)[75] 5 142 098 443 847 8,63 %
Panamá 2000 2 839 177 285 231 10 %
2010 3 186 262 417 559 12,26 %
Paraguay 2002 5 183 074 87 568 1,7 %
Perú 1993[76] 22 048 356 6 456 000 32,0 %
2007 (E)[77] 27 412 157 7 231 000 24,0 %
Venezuela 2001[78] 23 054 210 536 863 2,3 %
2011[78] 27 150 095 725 148 2,67 %
  • A1. Encuesta Complementaria de Pueblos Indígenas (ECPI) 2004-2005, complementaria del Censo Nacional del INDEC de 2001. Población por autorreconocimiento y ascendencia indígena. Total del país. Fuente: Instituto Nacional de Estadística y Censos.
  • A2. Censo 2010. Cuadro P44. Total del país. Población indígena o descendiente de pueblos indígenas u originarios en viviendas particulares por sexo, según edad en años simples y grupos quinquenales de edad. Año 2010. Fuente: Instituto Nacional de Estadística y Censos.
  • B. Del conteo de población y vivienda 2005 del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI). Tradicionalmente en México las cifras consideran a los mayores de 5 años.
  • C. La Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), según una tabla del Sistema de Indicadores sobre la Población Indígena de México.
  • D. Según la interpretación de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas la cifra en realidad es de 10 253 627.
  • E. El criterio usado en este censo fue el de "lengua indígena aprendida".
  • F. Se incluyen entre los cálculos a los zambos de la costa caribeña.
  • G. Se dividen en 50 485 inuit, 389 785 métis y 698 025 de las Primeras Naciones (aborígenes).
  • H. El censo de 2000 cifra en 4 119 301 si se incluyen personas con ascendencia indígena y de otro grupo étnico.
  • I. El censo de 2010 cifra en 5 220 579 si se incluyen personas con ascendencia indígena y de otro grupo étnico.
  • J. El Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) estimó en 2000 en 821 780 indígenas en territorio colombiano pero la Organizaciones Indígenas estimaron en 1,6 a 2 millones de personas.
  • L. En 2006 la Encuesta CASEN cifró a los indígenas chilenos en 1 060 786. La cifra del censo incluye desde los 14 años o más.
  • M. Mayores de 5 años.
  • N. Se refiere a ciudadanos de 15 o más años, unos 6 916 732 en total y sobre la base de esta última cifra se estima el porcentaje.

Referencias[editar]

  1. José M. Fernández Fernández (2009)."Indigenismo". Diccionario Crítico de Ciencias Sociales. Madrid: Universidad Complutense de Madrid.
  2. Untitled Document - Descripción demográfica
  3. Lorena Letelier. "Cerca de mil mapuches cambiaron sus apellidos por temor a discriminación". La Tercera. 27 de agosto de 2000. Consultado el 28 de enero de 2013.
  4. Ronald Soto Quirós. "Imaginando una nación de raza blanca en Costa Rica: 1821-1914". Amérique Latine. Historie & Mémorie. 2008, no. 15.
  5. Carlos Arturo Hoyos Vallejo (2007). "Por qué somos así los colombianos". Monografías.
  6. Gilda Waldman Mitnick. "Chile: indígenas y mestizos negados". Política y Cultura. Primavera, año/vol. 00, número 21. Xochimilco: Universidad Autónoma Metropolitana, pp. 97-110.
  7. José Selín Carrasco. "Chile mestizo". La Vanguardia. 7 de agosto de 2008. Consultado el 28 de enero de 2013.
  8. Clark, Colin (1967). Population Growth and Land Use. Nueva York: St. Martin's Press, en inglés. ISBN 0-333-01126-0.
  9. McEvedy, Colin & Richard Jones (1978). Atlas of World Population History. Nueva York: Facts on File, en inglés. ISBN 0-7139-1031-3.
  10. Biraben, Jean-Noël (1979). "Essai sur l'évolution du nombre des hommes". Population. Vol. 34, no. 1, pp. 13–25, en francés.
  11. Maddison, Angus (2003). The World Economy: Historical Statistics. Tomo II. París: OECD, pp. 229-262. en inglés. ISBN 92-64-10412-7.
  12. Francisco Lizcano Fernández (2007). Iberoamérica: un área cultural heterogénea. Zinacantepec: Universidad Autónoma del Estado de México, pp. 93. ISBN 978-9-70757-052-8.
  13. Lynch, Jhon (2003). "Los factores estructurales de la crisis: La crisis del orden colonial". En Historia general de América Latina: la crisis estructural de las sociedades implantadas. Tomo V. París: UNESCO & Trotta, pp. 31. Dirección de Germán Carrera Damas & John V. Lombardi. Editado por María Carmen Espinosa Vilar. ISBN 9789233031548.
  14. Del Carmen Velázquez, María (1986). La vida política en Hispanoamérica. Caracas: Academia Nacional de la Historia de Venezuela, pp. 28.
  15. Rosenblat, Ángel (2002). El español de América. Fundación Biblioteca Ayacucho, pp. 108. Edición de María Josefina Tejera. ISBN 9789802763511.
  16. Valarezo, Galo Ramón (2008). "Pueblos indígenas y movimientos campesinos". En Historia general de América Latina: Los proyectos nacionales latinoamericanos : sus instrumentos y articulación. 1870-1930. París: UNESCO, pp. 299-300. Dirección de Enrique Ayala Mora & Eduardo Posada Carbó. ISBN 9789233031562.
  17. Lizcano Fernández, 2007: 94. Mulatos pasaron a 12 % y mestizos al 26 % cuando en 1825 ambos sumaban el 27 %.
  18. En Brasil, El Salvador, Paraguay y Argentina los indígenas casi desaparecieron y en Uruguay efectivamente lo hicieron.
  19. Lizcano Fernández, 2007: 94-95. Debe tomarse en cuenta que en dicha época todo lo no-occidental o no-europeo era visto como sinónimo de barbarie y atraso. Lo europeo o blanco equivalía a la modernidad. no debe olvidarse tampoco el uso del pasado prehispánico como elemento para crear una Historia nacional, sin embargo, este elemento nunca consideró el valorar a los indios de su época sino solo a los del pasado ya que tenía como significado el justificar la independencia de España con la idea de ser herederos de naciones previas a la Conquista de América que buscaban "recuperar" su libertad, es decir, para diferenciarse de España y los países vecinos.
  20. Siguiendo la teoría nacionalista de que "para cada nación un estado" de aceptarse que los países eran multinacionales y multiétnicos con grandes diferencias culturales enormes entre sus castas y regiones se hacía injustificable la existencia de dichos estados donde gran parte de esos grupos estaban excluidos de la toma de decisiones. De ahí la necesidad de crear la idea de una nación homogénea siguiendo las pautas de la capital y negando a las regiones cualquier derecho de autonomía política o cultural (hasta la Historia nacional muchas veces se escribió e interpretó en la capital a pesar que muchos de los sucesos sucedían en provincia).
  21. Lizcano Fernández, 2007: 95. Mediante la desaparición de los pilares de su cultura: propiedad comunitaria de la tierra (procesos de privatización) y del autogobierno local (centralismo), respetado aún por la Monarquía Hispánica.
  22. Lizcano Fernández, 2007: 95
  23. Rosenblat, 1950: 48
  24. Rosenblat, 1950: 29
  25. Rosenblat, 1950: 23
  26. a b Rosenblat, 1950: 22
  27. Rosenblat, 1950: 22-23
  28. Rosenblat, 1950: 206
  29. Rosenblat, 1950: 24
  30. Rosenblat, 1950: 20
  31. Rosenblat, 1950: 28-29
  32. Rosenblat, 1950: 24, 26, 48
  33. Rosenblat, 1950: 49
  34. Rosenblat, 1950: 25
  35. Rosenblat, 1950: 29, 54
  36. Rosenblat, 1950: 30-31
  37. a b Rosenblat, 1950: 35
  38. Rosenblat, 1950: 64
  39. Rosenblat, 1950: 26-27
  40. Lizcano Fernández, 2007: 95. Debido en buena medida a la gran población de ambos grupos en las respectivas zonas.
  41. Rosenblat, Ángel (1945). La población indígena de América: desde 1492 hasta la actualidad. Buenos Aires: Edición Cultural Española.
  42. a b Jimeno, Esther; Juan Cevo; Florencio Magallón; Claudio Segura & Chester Zelaya (1983). Nuestro mundo actual. Una visión al mundo, América y Costa Rica. Universidad Estatal a Distancia, San José, Costa Rica, pp. 243. ISBN 9977-64-001-7.
  43. a b Martínez Ruiz, Enrique; Enrique Gímenez; José Antonio Armillas & Consuelo Maqueda (1992). La España Moderna. Madrid: Ediciones Istmo, pp. 536-537. ISBN 84-7090-277-6.
  44. a b Lucena Giraldo, Manuel (2006). A los cuatro vientos: Las ciudades de la América hispánica. Madrid: Marcial Pons Historia, pp. 198, nota 46. ISBN 84-96467-17-1. Basado en J. R. Fisher (1990). "Iberoamérica colonial". En Historia de Iberamérica. Tomo II. Colección Historia Moderna, Madrid, pp. 619-621.
  45. a b Maddison, Angus (2003). The World Economy: Historical Statistics. Tomo II. París: OECD, pp. 250. en inglés. ISBN 92-64-10412-7.
  46. Lynch, John (2008) [1976]. Las revoluciones hispanoamericanas: 1808-1826. Barcelona: Editorial Ariel, pp. 42. Traducción de Javier Alfaya & Bárbara McShane. ISBN 978-84-344-5241-1.
  47. Francisco Morales Padrón (1962). Historia general de América. Tomo I. Buenos Aires: Espasa-Calpe, pp. 701.
  48. Maddison, Angus. "La economía de Occidente y la del resto del mundo". Revista de Historia Económica. Año XXII, verano 2004; n. 2, pp. 259-336 (véase 308).
  49. Maddison, Angus (2003). Development Centre Studies The World Economy Historical Statistics. París; Danvers: OECD Publishing, pp. 193, 250. En inglés: ISBN 978-92-64-10412-9.
  50. Canga Argüelles, José (1834). Diccionario de hacienda con aplicación a España. Tomo II. Madrid: Imprenta de Don Marcelino Calero y Portocarrero, pp. 415-416.
  51. Rosenblat, Ángel (1954). La población indígena y el mestizaje en América: La población indígena, 1492-1950. Tomo I. Buenos Aires: Editorial Nova.
  52. Aguilar, Carmen. “Población indígena creció en América Latina casi 50 % en una década”. 24 horas. Publicado el 22 de septiembre de 2014. Consultado el 4 de marzo de 2015.
  53. a b Barié, Cletus Gregor (2003). Pueblos indígenas y derechos constitucionales en América Latina: un panorama. Quito: Editorial Abya Yala, pp. 40. ISBN 9789990503678.
  54. a b c Rodríguez, Jorge J.; Robert Kohn & Sergio Aguilar-Gaxiola (2009). Epidemiología de los trastornos mentales en América Latina y el Caribe. Pan American Health Org, pp. 223. ISBN 9789275316320.
  55. Rosenblat, 1954: 96-121
  56. Rosenblat, 1954: 88
  57. Rosenblat, 1954: 59
  58. Rosenblat, 1954: 36-56
  59. Rosenblat, Ángel (1954). La población indígena y el mestizaje en América. La población indígena. Tomo I. Buenos Aires: Editorial Nova.
  60. Roldán Ortega, Roque (2005). "Importancia de los territorios colectivos de indígenas y afroamericanos en el desarrollo rural". Revista Trimestral Latinoamericana y Caribeña de Desarrollo Sustentable III (11): 135-161 (véase p. 137). ISSN 1913-6196.
  61. Peyser Alciaturi, Alexia & Chackiel Torres, Juan (1994). "La población indígena en los censos de América Latina". Notas de Población XXII (59): 93-119 (véase p. 101).
  62. "Notas sobre la población mapuche actual". Revista Astrual de Ciencias Sociales, n.º 4, 2000, Valdivia, pp. 5-26.
  63. Lizcano Fernández, Francisco (2005). "Composición étnica de las tres áreas culturales del continente americano al comienzo del siglo XXI". Convergencia. Revista de Ciencias Sociales. XII (38): 185-232 (véase p. 218). Toluca: Universidad Autónoma del Estado de México.
  64. Encuesta Complementaria de Pueblos Indígenas (ECPI) 2004-2005
  65. Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2010
  66. Censo de Población Belice 2000
  67. 2010 Belize. Population and Housing Census Report
  68. Castro Lucic, Milka (2015). América Latina y la diversidad culturaldel siglo XXI. UNAM.
  69. Censo Nacional de Población y Vivienda 2012
  70. Censo Nacional 2005
  71. Censo de Población y Vivienda 2002
  72. Censo de Población y Vivienda 2012
  73. Censo de Población y Vivienda 2001
  74. Censo de Población y Vivienda 2010
  75. Censo Población y Vivienda 2005
  76. Censos Nacionales 1993
  77. Censo Nacional 2007
  78. a b XV Censo de Población y Vivienda

Véase también[editar]

Enlaces externos[editar]